Capítulo 2

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Ya había pasado al menos un mes desde que despertó, lo dieron de alta hace un par de semanas, se hallaba como cada día a su lado embriagándose de su aroma y rogándole despertar, ya se encontraba algo desesperado porque Izuku no despertaba, la falta de su Alfa le estaba afectando.

No comía, no dormía, tenía pesadillas y dolores de cabeza constantes, náuseas y vómitos por los nervios, el estrés lo estaban acabando, necesitaba la protección de su Alfa para que lo calmase.

—Kat, ya es tarde, vamos yo te llevo.

Kirishima se asomó llamando a su amigo, este salió de la habitación frustrado, vio como Uraraka llegaba y la miro algo irritado, detestaba el hecho de alejarse del pecoso.

—No te preocupes, prometimos tomar turnos, debes ir a descansar hazlo por Izu-chan.

—Créeme, si no fuera por él no podría con todo esto.

Bakugou se retiró a pasos pesados, todo en el aun daba vueltas, su amigo salió tras de él y la noche ya se veía al salir del hospital, Kirishima lo llevaba y traía sin falta alguna, no era que Bakugou no se pudiera cuidar solo, pero desde que Izuku estaba ausente, estaba demasiado vulnerable, temía por su seguridad al estar en un estado de depresión constante.

Se subió al auto del pelirrojo, este permanecía en silencio, cada día le era más difícil el entablar una conversación, no era para menos, cada día su amigo se hallaba más tenso.

Al llegar a su casa se estaciono y espero frente a esta, no sabía si bajarse o retirarse, Katsuki solamente negó con la cabeza al ver las intenciones de su amigo, se bajó soltándole un simple gracias.

Al abrir la puerta, fue recibido con un golpe en la cabeza que lo tomo desprevenido, al alzar la mirada irritado se encontró con el ceño fruncido de su madre.

—¡Mocoso estúpido, prometiste no llegar tarde esta vez!

—¡Déjame en paz maldita vieja! No te importa la hora en la que regrese.

—Katsuki...

Interrumpiendo la disputa entre los dos rubios, Inko llego con una mirada preocupante que siempre se cargaba desde que se enteró del estado de su hijo, Katsuki desvió la mirada al no querer enfrentar a la mujer, se sentía culpable por lo que paso.

—Sus heridas van mejorando, pero aún no se sabe cuándo despertara.

—Ya veo... gracias por cuidar de él.

Sonriéndole Katsuki asintió, la mujer paso a su lado tomando su abrigo ya dispuesta a retirarse, pero fue alcanzada por Mitsuki.

—Espera Inko, no olvides que te llevare, por cierto, no llegues temprano por nosotras, pero ese pequeño espera por ti hasta que ya no puede más, él te necesita.

Bakugou solo bufo con levedad, eso era algo que lo estaba carcomiendo de igual forma, les dio un gracias a las dos mujeres mientras estas se retiraban dejándolo solo, suspiro y se encamino al segundo piso de la casa.

Abrió la puerta de su habitación, se imaginaba que se había dormido ahí, desde que todo eso inicio, el pequeño se negaba a dormir solo, no lo culpaba, ese infante llevaba mucho tiempo sin tener el calor de sus dos padres juntos.

Se aproximó y acaricio sus verdosos cabellos, se sentía culpable de no poder darle todo el cariño y tiempo que el chiquillo necesitaba, necesitaba a su alfa, pero su cachorro era su prioridad, se cambió para estar más cómodo, recostándose junto al pequeño de solo cuatro años, lo tomo en brazos y lo recostó en su pecho abrazándolo.

Recuérdame - Omegaverse (DekuKatsu) TERMINADAWhere stories live. Discover now