- ¿ Pero qué? Tu y Alfred...?- Aitana no se creía lo que acababa de escuchar- pero como? Osea cuando? Bueno mejor no me lo digas que ya puedo imaginármelo- dijo haciendo que se me escapara una sonrisa.
- No lo sé Aitana, se me fue de las manos, él hace que me sienta tan bien que a su lado no puedo pensar.
-Y por que no me contaste que os habíais visto?Cuando os visteis?- madre mía Amaia no me has contado nada.
- Si, lo se, lo siento, ha sido todo muy rápido y he hecho daño a Raul y ahora no se como voy a hablar con ninguno de los dos - dije sollozando.
-Bueno, tranquilízate, empieza por contarme como ha pasado todo - me dijo de una manera muy calmada.
TRES MESES ATRÁS
Sonó el despertador, eran las nueve de la mañana y tenia una reunión con Universal a las 10.No estaba muy lejos de mi casa pero si no me daba prisa llegaría tarde.Me di la vuelta en la cama y vi a un Raul despeinado y durmiendo como un bebé, no pude evitar sonreír, estaba adorable. Le di un beso en la frente y me levanté camino a la cocina, me preparé un café como todas las mañanas y me lo tomé mientras miraba a la nada.
Cuando miré el reloj me di cuenta de que habían pasado 20 minutos y que si no me daba prisa no llegaría. Me vestí con lo primero que encontré en mi armario, una falda vaquera y una camiseta negra y salí corriendo de mi apartamento.
En la calle hacia una temperatura agradable, por lo que decidí ir caminando, por suerte nadie me reconoció y llegué a las oficinas bastante rápido.
Cuando entré en el ascensor un aroma demasiado familiar me inundó, reconocería ese olor en cualquier lugar del mundo, mi corazón se aceleró rápidamente,no podía ser, seguramente sea alguien que lleve la misma colonia, ha pasado mucho tiempo, me dije intentando convencerme a mi misma de que era imposible que hubiera estado en ese mismo ascensor minutos antes que yo.
Sumida en mis pensamientos llegué a la planta donde se encontraban las oficinas,mi corazón latía con fuerza ante la posibilidad de poder encontrarme con el, ¿ por qué me estaba pasando esto? ¿qué le iba a decir si apareciera delante de mi? Habían pasado casi dos años desde que lo habíamos dejado, habíamos hablado en escasas ocasiones, ¿como lo saludaba, dos besos, un abrazo...?
-Hola Amaia, llegas tarde- me dijo Marta, mi representante,sacándome de mis pensamientos.
Javier dejó de ser mi representante después de eurovisión porque nos afectaban demasiado las discusiones y no queríamos perder la relación que teníamos como hermanos.
-Si, lo se, lo siento.
- Bueno, estamos acostumbrados, te conocemos demasiado bien- me dijo amigablemente - Entremos, nos están esperando.
-Vale-dije mientras miraba hacia todos los lados en su busca, no se por qué, pero algo en mi me decía que estaba allí, me tranquilicé cuando entramos en la sala de reuniones y no había ningún rastro de el.
La reunión fue bastante bien, contratos y mas contratos, sin ninguna cosa fuera de lo común.
Cuando salí me dirigí rápidamente al ascensor para salir lo antes posible de ahí, no paraba de oler ese aroma y me estaba volviendo loca.Necesitaba salir de allí, no entendía como ese olor todavía podía crear tanto nerviosismo en mi.
cuando las puertas del ascensor estaban apunto de cerrarse alguien las sujeto corriendo.
- Espera por favor! -dijo el chico mientras sujetaba la puerta- Amaia- dijo con una voz temblorosa.
Mierda.
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Hola!
Espero que no os este pareciendo muy aburrido, tengo que introducir la historia y es un poquito larga, espero que os guste mucho
Gracias por leerme ☺️
