Ahora ya te conozco

35. Televisión

Narrador.

Cuando Alex se despertó se asustó bastante al no sentir el cuerpo de su novia contra el suyo.

Abrió los ojos de golpe, sin importarle que la luz del sol le molestara. Estaba segura de que ayer la pequeña vino a su departamento a mitad noche, no podía haber sido un sueño.

Miró a sus alrededores en busca de una evidencia de que la pequeña hubiese estado con ella noche, y la encontró cuando vio aquella sudadera perfectamente doblada en su escritorio.

Suspiró algo más aliviada, Emmy si que había ido anoche ¿Pero donde estaba ahora?

Salió de la habitación en su busca, y para su suerte la pequeña no se había ido a ningún lado, estaba sentada en el sofá, mirando la televisión.

- Buenos dias- saludó la universitaria caminando hacia su novia. Esta le regaló una suave sonrisa, pero no expresaba felicidad alguna.

No sabía qué hacer, así que se metió en la cocina y preparó dos vasos de zumos.

- No se si has comido algo, pero toma- dijo sentándose a su lado y tendiendo un vaso- Es de manzana.

- Gracias, todavía no había comido nada- la pequeña lo tomó y le dio un pequeño sorbo, sin apartar la vista de la televisión.

- ¿Quieres hablar?

- Ahora no- Alex asintió y pasó su brazo por el hombro de Emmy algo insegura, no sabía si quería aquel abrazo. Pero Emmy si que lo quería, necesitaba sentir a Alexa, sentir apoyo- Gracias- susurró escondiendo su rostro en el cuello de su novia.

- No es nada.

Estuvieron en silenció un buen tiempo, observando solamente la televisión. No ponían nada interesante a decir verdad, eran capítulos repetidos que ambas ya habían visto.

*****

La mañana había pasado sin ninguna novedad. Después de estar una hora en silenció Alex había decidido ir a comprar algo, su nevera estaba completamente vacía y si la pequeña se iba a quedar quería tener comida para elegir.

Intentó convencer a Emmy de que se fuera con ella pero está se negó aludiendo que no quería que la gente viera su cara de zombie.

Después de una hora volvió con las manos llenas de bolsas, no sabía lo que Emmy quería así que compró de todo, cosas que no le gustaban pero si había oído a la peque mencionar lo deliciosa que estaban, cosas que nunca había comido pero por recomendaciones de sus amigos decidió comprarlo.

Habló con su padre, que le había llamado preocupado por si sabía algo de Emmy. Por lo visto la madre de la pequeña había ido hoy a la cafetería hecha una furia.

Acordaron no mencionar nada a la pequeña por el momento, tratando de agobiarla lo menos posible.

Durante la tarde trató de hacer reír a la de ojos oscuros, contándole algunos chistes malos, haciendo cosillas o simplemente rememorando anecdotas graciosas de las dos. Consiguiendo robarle pequeñas y fugaces sonrisas. No eran mucho, pero hacían saber a Alex que lo que estaba haciendo estaba bien.

Ya a la noche, ambas estaban nuevamente en el sofá, viendo una película bastante aburrida, pero juntas después de todo.

- ¿Por qué estamos viendo esto?- Alexa fue la primera en hablar, jugando con la mano de su novia.

- Sinceramente no lo sé, pensaba que te gustaba.

- No, ya te digo a mi que no me gusta ¿Quieres ver otra cosa?

- Mira a ver qué ponen- Emmy tomó el mando de la televisión que estaba a su lado solo para pasárselo a Alex.

La mayor estuvo mirando la guía de distintas cadenas, pero ninguna estaba haciendo algo interesante.