Ahora ya te conozco

26. Daño

Alexa pov

Estábamos ambas sentadas en un banco que había delante del centro comercial, su mano estaba entrelazada con la mía y no decíamos nada, sólo mirábamos los cochés pasar delante nuestra.

- Alex...- fue Emmy la primera en romper el silencio que se había formado desde que me puse a llorar.

-Lo siento- fue lo primero que dije antes de que ella dijera algo mas- Lo siento mucho, la cita se a estropeado por mi culpa.

Y era la verdad, la había cagado. No tenía que haberme ido con Tim, no tenía que haber dejado que sus insultos me afectarán, pero me afectaron. Era mi culpa todo esto.

Emmy me miró con los ojos bien abiertos y rápidamente soltó mi mano. Se iba a ir. Cerré los ojos intentando reprimir lágrimas.

- ¿Que demonios estas diciendo Alexa?- noté un par de manos en mis mejillas- Mirame- me ordenó pero yo no le hice caso- Mirame ahora- lentamente abrí los ojos y me encontré a Emmy mirándome directamente- No es tu culpa ¿Me has oído? No lo es.

Inmediatamente me puse a llorar de nuevo. Y pensar que la llorona en un principio era Emmy...

- Lo siento, no tenía que haber caído en su juego. Pero es que si te viera te insultaría a ti también. Y no quería que te hiciese daño.

- Alex... no me va ha hacer daño. Porque no me importan sus insultos. Me vale una mierda lo que el opine de mi porque no es importante para mí. Entiendo que para ti te duela su opinión, estuviste con el mas un año... Pero quiero que entiendas que el lo único que quiere hacer es dañarte.

Asentí con la cabeza y me incliné para abrazar a a Emmy. Necesitaba sus brazos. Estaba muy sensible a causa de todos los insultos que estaba recibiendo a diario y este fue el que me hizo estallar. El que se metieran con ella.

Ya un poco más calmada levanté mi vista y me encontré con la de Emmy mirándome tiernamente.

- Parezco yo ahora la niña en vez de tu.

- No soy una niña- me contradijo rápidamente mientras que sus mejillas tomaban algo de color.

- Eres una niña. Una niña muy hermosa.

- Pues que sepas que esta saliendo con una niña- abrí la boca ante su contestación y le di un pequeño golpe en el hombro- Ouch- se quejó mientras se pasaba su mano derecha por su hombro izquierdo.

- Te quiero- dije para luego acercarme a ella y besarla lentamente, sin prisas. Sólo necesitaba notar sus labios y su cuerpo para que la tranquilidad volviera a mi. Era mi remedio milagroso. Emmy se separó de mi y no pude evitar mirarla con reproche.

- Soy una niña- dijo en tono de burla levantándose del banco.

- No, eres Emmy. Mi peque- dije para volver a atraerla a mi y besarla- Mía sólo mía.

Noté como ella sonreía contra mis labios después de que dijera estas palabras e inmediatamente después pasara sus manos por mi cuello y poder acercarme más. Cuando fuimos a separarnos atrapó mi labio inferior entre sus dientes y lo estiró un poco. Luego lo soltó y depositó un suave beso en este para terminar de separarse.

- Vamos a casa, si?- dijo ahora ella mientras me miraba directamente a los ojos con un pequeña sonrisa.

- Te acompaño hasta la tuya- ella negó con la cabeza.

- No deberías ir sola por ahí así que te acompañaré yo a la tuya- la miré frunciendo el ceño. La pequeña era ella- Y así sabre donde está tu apartamento y poder ir a visitarte- dijo para acercarse un poco a mi y darme otro beso.

Y esa idea me gustó, me gustó el pensar que Emmy podía ir a visitarme cuando quisiera

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- Nos vemos mañana- me despedí dejándole otro beso en los labios. Amaba sus labios, tenía una obsesión con sus labios. Mejor dicho, con Emmy

Ahora más que nunca entendia todo lo que sentía por Emmy. Después de lo de esta tarde me había dado cuenta de que estaba perdidamente enamorada de ella.

De sus pequeños oyuelos cuando reía, de sus hermosos ojos castaños o su pelo ondulado. Pero no sólo me había enamorado de eso. También me había enamorado de sus defectos. Era un poco celosa, torpe, lloraba con facilidad, se le olvidaban algunas cosas y era malísima para los nombres. Pero todo esos detalles sólo hicieron que me gustara más.

- Te quiero- susurró contra mis labios para después separarse con una sonrisa- Nos vemos- volvió a besarme antes de marcharse de mi departamento agitando el brazo de un lado a otro.

"Ella no te quiere" después recordé las palabras de Tim y la sonrisa boba que me había provocado Emmy desapareció.

****

- Alex, seguro que estas bien?- me preguntaba por decimosexta vez mi mejor amiga.

- Ya te lo he dicho. Si, estoy perfectamente.

-Pero lo de ayer...

- No me lo recuerdes- gruñí y continue mi camino por los pasillos de la universidad cuando mi cuerpo chocó contra algo. No otra vez.

- ¿Te lo pasate bien ayer? ¿Tuvieron "sexo?- marco entre comillas la palabra sexo. Ya que según Tim, no se puede tener sexo sin un pene de por medio.

Levante la cabeza cuando oí que alguien le daba una bofetada. Era Nadia. Por un momento me había olvidado de que estaba a mi lado.

- Uno, está comprobado científicamente que el sexo entre chicas es el mejor. Dos, es una pena que ahora mismo me vaya a comisaría para denunciar que estas insultando, y agrediendo verbalmente a una chica por ser bisexual- Tim abrió la boca sorprendido y fue a abalanzarse sobre Nadia, pero para nuestra suerte estábamos en mitad cafetería y toda la universidad nos estaba viendo.

Nadia me cogió de la mano y me llevó a rastras a la puerta de la Universidad.

- Hoy no vamos a clases, nos vamos a comisaría ahora mismo- la miré con cara de negacion, no quería llegar a esos extremos- Alex, no quería llegar a este punto pero nos vamos comisaría a meterle una denuncia como una casa o me voy yo sola. No voy a dejar que continúe insultándose así.

- Yo...- no me dejo continuar pues ya me había vuelto a coger del brazo y a llevarme a estirones hasta su coche.

Después de estar dentro del coche ella arrancó y empezó a conducir dirección a la comisaría que más cerca nos pillaba. Sin duda este día iba a ser muy largo.

*****

Emmy pov

-Emmy- escuché que me gritaba alguien a mis espaldas. Cuando me giré lo primero que encontré fue a mi mejor amiga sobre mi cara- Adivina a quien le han regalado un anillo por 6 meses de relación.

- Pues a mi no, seguro- dije con tono irónico mientras consegia que se soltara y bajara de mi.

- Dios, que imbécil eres... miralo- me enseñó su mano, orgullosa del anillo que llevaba en el dedo del corazón de su mano izquierda.

- wau, y ahora que sigue ¿El matrimonio?- dije en tono de burla y ella me golpeó en el hombro como respuesta- Ouch, es broma, es broma.

- Mas te vale- después de decir esto se giró y vio a Samy venir- SAMY- y repitió lo que había echo conmigo pero la diferencia es que nuestra amiga no se lo esperaba y call⁹ al suelo.

-MI CULO- escuché el quejido que soltó Samy cuando choco contra el asfalto.

Sin poder evitarlo empecé a reirme, interrumpida por el sonido de mi móvil vibrando. Contesté la llamada sin mirar quien era, ya que me marcaba número desconocido.

- Tengo a tu novia. Si quieres volver a verla tienes que venir a comisaría, ahora.

Mi sangre se congeló en ese momento. ¿Quien demonios tenía a Alex?
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Estos dos capítulos realmente no me gustaron cuando los escribí (hace dos años) y ahora siguen sin gustarme. Quería quitarlos pero como eran importantes más adelante no podía cambiarlos mucho.