Once.

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[Omnisciente]

En menos de dos minutos la pareja se encontraba ya sin ropa dentro de la carpa, el calor dentro era mayor por lo cuál el sudor no tardó en hacer brillar sus pieles, YoonGi se encontraba tumbado y JiMin sobre él, frotandose contra la creciente erección del mayor.

-¿Primera vez dentro de una carpa cocinandonos? - preguntó YoonGi luego de separarse de los hinchados labios del mas bajo, el rubio miró fijamente al mayor y soltó una risa.

-¿Significa mucho tu primera vez con alguien?

-No soy virgen.

-Tam-tampoco yo. Pretendo jugar... Sé que... Aún te adaptas a la idea de donde meterla.

-Prometo que voy a estar listo pronto.

-No tengo apuro YoonGi, ademas para eso existe la masturbación y orales.- sonrió el rubio para luego sostener el labio de abajo del azabache.

El manoseo empezó, las grandes manos de Min se situaban perfectamente sobre los perfectos glúteos del rubio, quién arriba frotaba ambos miembros con fuerza e insistencia sacando gemidos por parte de ambos. JiMin estaba bastante rojo debido a la temperatura tan alta de la carpa, Yoon tenía calor pero su piel tan blanca solo sudaba.

Tras cambiar de pose, ambos optaron por ponerse de rodillas y masturbar al otro, JiMin tenía sujeto a YoonGi por el cuello en lo que practicamente comía los labios del palido, el beso en si era sucio, ruidoso y baboso, era algo que a JiMin le gustaba mucho, el morbo, pero Min no se quedaba atrás con ello.

El azabache tenía sujeta en una de sus manos el pene del rubio, usando el pulgar para jugar con la punta, la izquierda la usaba para frotar entre los muslos de JiMin, pasando a llevar también en leves roces sus testículos, acción que traía espasmos y escalofríos al mas bajo.

JiMin estaba de la misma manera, sólo que el si masajeaba los testículos del azabache, jugando con ellos apretandolos suavemente, de manera placentera y satisfactoria, demasiado agradable para el mas alto, quién gemía en la boca del rubio, el par no separaba sus labios en lo que se daban placer, sus labios y lengua estaban fundidas, la baba les salpicaba y creaba gotas bajo sus barbillas. Ambos aumentaron el movimiento de sus manos y el exhalar e inhalar de estos se hizo tan pesado y caliente que a ambos los hizo sofocarse un poco, entre el mareo del placer y calor.

El sonido húmedo de la lubricación de ambos penes casi hacía eco en la carpa, iban al mismo ritmo desesperados, no apartaban la mirada del contrario, menos sus labios, que solo se tocaban o rozaban debido a qué besarse les quitaba el aire, pero si ahogaban sonidos de líbido a la cavidad bucal ajena.

YoonGi fue primero en correrse, el liquido blanquecino salpicó el torso de su chico, gotas caían aquí y por allá cómo si este fuera un lienzo en blanco siendo decorado con pintura, parte del liquido también fue a dar los labios de JiMin, y precisamente tenía su boca abierta, por lo que restos de semen gotearon por el labio inferior del rubio, el mayor creyó que aquello causaría asco en el rubio, pero todo lo contrario, el líquido caliente llevó a gemir demasiado fuerte a quién aún no alcanzaba su clímax, lamiendose los labios con esa lengua tan larga, generando que YoonGi sufrieras espasmos post orgasmos, era tan sucio que le enamoraba.

Min se acercó mas, y mientras que una mano se deslizaba de arriba a abajo en el duro falo, la mano izquierda fue a dar a la boca de JiMin, quién abrió la boca para chupar los dedos de Min, éstos tenían algo de resto de semen, y nuevamente eso no fue impedimento para que JiMin volviera a gemir fuerte, casi en lloriqueos, mientras movía la cadera de arriba a abajo como si estuviera montando algo.  Los dedos lubricados fueron a dar entre los glúteos ajenos, Min encontró la entrada, y se aventuró de golpe dentro, causando que JiMin gritara.

Ningún pobre es ilegal.(YoonMin chileno) Where stories live. Discover now