Capitulo II: Nicholas

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Dos semanas han pasado, y la vida en el pueblo es más fácil de lo que creí, con mi hermana vinimos a parar a un complejo de cabañas de una joven llamada Lena, nos brido un hogar, y trabajo mi hermana limpia las cabañas, y el jardín que da con un hermoso bosque, mientras que yo, cocino para todas las personas que por aquí pasan. Casi todos los días, vamos al centro del poblado para comprar víveres. Samara comenzó a dormir más, hace días que las pesadillas ya no forman parte de su vida, y está tratando de tener conversaciones con Lena. Ella, Lena, es una persona curiosa, es extraña, pero en el buen sentido, parece mayor, como unos 30, pero su espíritu es joven, incluso tiene una energía que es atrayente y tranquilizante. Todo lo que necesitamos. Los visitantes son variados, algunas familias, algunos solitarios, sombríos, alegres, por más distintos que son, todos tienen una chispa de determinación en sus rostros, algo que los impulsa a seguir para adelante.

Hoy salimos con Sam al poblado, necesitamos unos cuantos víveres para cocinar la cena, aparentemente una persona importante cenaría hoy con nosotros, Lena parece muy feliz por su visita. Caminamos lentamente, disfrutando del sonido de las hojas de los arboles chocando entre si por el viento que anunciaba una lluvia inminente.

-Sam, te gusta el pueblo?

-Si, e..es lin..d.o..

-Quieres quedarte, o quieres que nos vallamos?

-Quiero quedarme, es lindo, me gusta mucho..

-Samara, dijiste una frase entera, mi niña, que hermoso!

-Basta Nico..

-Basta que, estoy feliz Sam, este sitio te está haciendo bien. Me agrada esto

-Lena me dice que es la es..esencia de.el pueblo.

-Es posible, tengo un buen presentimiento de este lugar.

-yo también.

El resto del camino al pueblo es calmado, puedo encontrar con facilidad los productos que necesito, la cajera del mercado no pierde oportunidad de coquetear con migo, algo que ya ha hecho con anterioridad, mi hermana, en su gesto posesivo que ya conozco, se cuelga de mi brazo, y fulmina con la mirada a la rubia teñida que jugaba con su cabello con anterioridad.

Salimos de la tienda, la cajera no podía estar más roja, mi hermana, con su tartamudeo habitual, le explico de una manera no muy amigable las razones por las cuales le pertenecía, y que no volviera a coquetearme porque le arrancaría cada una de las extensiones de cabello que tenía en su hueca cabeza, palabras de Samara, no mías.

Cuando llegamos, Samara se va al jardín, dice que las rosas están a falta de agua, y yo me dirijo a la cocina. La invitada de la señorita Lena aun no llega, asique me da tiempo de cocinar algo bastante elaborado para todos, veo en la pizarra que está pegada en la nevera que el día de hoy somos 6 personas, pocos, creo que en estas dos semanas que llevamos aquí, hoy es el día que menos gente ha visitado las cabañas.

Veo a Samara con las rosas en el jardín, me siento tan feliz por sus avances, puede hablar tranquilamente, y su timidez de ha reducido casi completamente.

La cena no fue muy compleja, carne de ternera en salsa, ensaladas de diferentes variedades, y de postre tiramisú, algo bastante rápido, Samara decoro la mesa con rosas del jardín, la invitada era una joven, con un vientre un tanto abultado, se presentó como Elizabeth, tiene ese aire extraño, algo místico.

-Y díganme, desde donde vienen?, se les nota un poco de acento.

-Somos de Sudafrica...

-Interesante-menciona Elizabeth- están muy lejos de casa, que los trajo por aquí?

-Son asuntos personales señorita Elizabeth.

-No me mal entiendas, es solo curiosidad, no todos los días se ve gente de tan lejos, podría apostar que huyen de algo

-Nada en particular, solo queríamos un cambio de aire.

-y tu hermana que no habla? Por eso el cambio de aire.

-Mi hermana está en proceso, por problemas previos no le gusta hablar.- mi ira comienza a bullir en mi interior, es igual a los interrogatorios de los vampiros.

-Verdaderamente interesante-se queda unos momentos pensando.

-Que es interesante?

-Lo de tu hermanita, tiene como 15 años, no?

-Tiene casi 16 años.

-Por qué no esperaste más para sacarla del país, hasta pasado los 17, digo, asi podía estar su cumpleaños con sus amigas.

-Porque la hubieran matado!

Inmediatamente me doy cuenta de lo que dije, ambas me miran con los ojos salidos de orbita. Samara me mira con la cara asustada, mis manos comienzan a temblar, sé que estoy más blanco que una hoja de papel. Elizabeth y Lena se miran, parecen comunicarse solo con una mirada, estamos todos en silencio, el nerviosismo y mi pánico se siente en el aire, mi hermanita se aferra a mi mano como si fuera un ancla en la mitad de una tormenta.

-Bien Nicholas, se sincero conmigo por favor. Por qué se fueron de Sudáfrica?

-Huíamos-susurra Samara

-De quien mi niña?-ahora toda la atención de Elizabeth está en Samara.

Mi hermanita me mira, sé que esta incomoda, y que no quiere contestar, tener la atención le pone incomoda, apretó sus manos incentivando que ella conteste la pregunta, pero su mirada baja, no va a contestar.

-De los demonios nocturnos, de ellos huimos.

-Quienes?-pregunta Lena

-Consumidores de sangre, demonios de la noche, asesinos del humano, succionadores del alma, vampiros, llámenlos como quieran..

- Solo vampiros, no todos son malos-menciona Elizabeth con una nota de malestar en su voz.

-En nuestra experiencia de vida, señorita, solo asesinan a jóvenes, succionan hasta la última gota de vida de nuestros conocidos, y son suerte podemos encontrar sus cuerpos para darles un velorio adecuado. Discúlpeme en dudar de la moral de estos seres del infierno.

-No sabes nada Nicholas-dice moviendo su cabeza en desacuerdo

-Yo respondí a sus preguntas, ahora contéstenme ustedes, ¿qué son?

-Nick-me llama Lena-sabes que no soy como tu verdad?

-Si Lena, lo sospechaba

-Soy un hada cariño, por eso es que se sentían cómodos conmigo, es parte de mi esencia.

-Y usted Elizabeth, es un hada también?

-No, soy una mujer lobo- su mirada es perspicaz, y por unos segundos cambia a una tonalidad dorada.

-Licántropo-susurro- conoce a Will, es usted de la manada del Alpha Alexander?

-Como sabes tanto niño, que eres? Hueles a Humano, eres humano, o tienes descendencia sobrenatural?

-Somos humanos, nuestros padres conocían a un licántropo llamado Will, él dijo dirigirse aquí, en busca de la manada del alpha Alexander y la luna Destiny, o algo así.

-Tengo que llevarlos, saben mucho, Silver tiene que hablar con ustedes, ella decidirá qué hacer.

-Silver es una licantropa también?

-no cariño-menciona Lena- ella es una vampiresa

-NO!-grita Samara-n..no, ella daña, noo

-Samara escúchame-tomo su cabeza entre mis manos- no iremos, jamás nos dañaran, lo olvidas?, No iremos señorita Elizabeth, si nuestra presencia aquí es peligroso para ustedes, nos marchamos, pero escapamos de vampiros, no vamos a ir a un lugar donde residen más de ellos, lo lamentamos.

-No tienes opción Nicholas, vendré por ustedes en la mañana.

Elizabeth se pierde en el bosque, Lena nos mira con una expresión extraña, se va a su cabaña, no sin antes mencionarnos que no escapáramos, porque seguramente centinelas rodeaban el terreno, no tenemos escapatoria. 

El humano de la VampiraWhere stories live. Discover now