El humano de la Vampira

Narración Especial #2: Samara

"No hables Samara, no digas nada o ellos te encontraran! Serás hermosa mi niña, tan hermosa que es peligroso, los demonios te encontraran, te usaran para alimentarse, usaran tu belleza y tu sangre para vivir más tiempo, luego mi niña, te mataran. Mataran a tu hermano, solo por protegerte, el daría tu vida por vos, pero esto sucederá solo si hablas, si les dices algo será su perdición. Nunca hables, nunca Samara, recuérdalo mi niña"

Mi madre, sus últimas palabras, antes que los demonios se la llevaran, antes que ella dejara el mundo de los mortales.

Como olvidarlo si esas palabras se clavaron en mi mente, si eso es lo que me frena cada dia cuando intento pronunciar palabra.

Mi hermano es de la vampiresa, ella ya lo ha reclamado y poco podemos hacer, ambos lo sabemos. Cuando un demonio te reclama, es la perdición, quieras o no, le perteneces, por las buenas o te toman por las malas.

Yo no soy la excepción, también he caído, el me reclamo, es guapo, lindo, fuerte, jura amor eterno, pero sé que puede destruirme si así lo desea.

La vida aquí parece pacifica, lo poco que he visto es como en las historias que nuestra madre nos contaba, gente buena, que vive sin miedo, vecinos que te saludan.

Pocos días llevamos aquí, Aiden me ha vigilado, aunque él no lo sepa, lo noto, escondido tras los árboles, vigilándome. El me protege, lo noto, camino sola pero no lo estoy. No sé qué siento por él, es muy protector conmigo, aunque no se me ha acercado, lo siento. Destiny me ha explicado la conexión de mates, como el me amo desde que me ha visto.

Fue difícil de creerlo para mí, pero al explicarme que cada día a su lado, la conexión de mates me afectaría, que comenzaría a desarrollar sentimientos hacia él, y eso ha comenzado.

Mi hermano acaba de irse con Venus, y yo vi a la abuela Destiny, ella es paz y armonía, me ha ayudado a expresarme mejor.

-Ho.hola

-Hola mi niña, quieres un poco de pastel?

-Si.si, por favor

-Ahora te sirvo cariño, y tu Aiden, quieres un poco?

No lo había escuchado, pero aquí estaba, Aiden, con una camiseta negra, unos jeans y unas zapatillas normales. ME miraba como si nunca lo hubiera hecho.

-Ho..hola Aiden

-Samara, hola.

No dejaba de mirarme, Destiny nos dejó un plato con pastel a cada uno, y se fue de la cocina. Aiden se sentó justo enfrente de mí. Su mirada me ponía nerviosa, quería hablarle pero me era imposible. Las palabras se atragantaban en mi garganta y no podía producir ni un sonido.

-Samara, me gustaría, emmm, te gustaría conocer el poblado?

-S..si

Salimos de la casa, el día estaba soleado, las personas de la aldea caminaban tranquilos y sin prisas. Aiden iba a mi lado, no me tocaba, no se me acercaba, estaba tenso y desconocía lo que lo tenía así, solo unos días pasaron, unos días que hizo que muchas de las barreras que había creado de desmoronaran.

-Samara, te he invitado hoy para pedirte disculpas, mi actitud cuando llegaste no fue la mejor, no pude contener a mi lobo. El solo deseaba tenerte a su lado, y no pude evitar esa actitud. Lamento si te lastime, espero que un dia de estos puedas perdonarme.

-Aiden, n..no-las palabras no salen de mi boca, no puedo pronunciar una frase completa porque no puedo, me agobio, me frustro. Noto como mis ojos se humedecen, me siento indefensa, por años las palabras no importaban, solo una mirada bastaba para darme a entender, pero hoy ya no es suficiente.

-Samara, pequeña no llores, está bien. Si tu corazón no está preparado para perdonarme es comprensible.

-Aiden, yo t..te perdono, no pue..edo ex.xpresarme bien

-Samara escucha, poco a poco podrás expresarte mejor. Gracias por perdonarme, espero, y no tomes mal lo siguiente. Quiero cortejarte Samara, eres mi compañera, ambos lo sabemos, pero quiero enamorarte, solo si tu me lo permites.

No podía creerlo, sus palabras rebotaban en mi cabeza, sabía que por la conexión de mates, el me ama, pero preocuparse por enamorarme, hacerme sentir cómoda, hacía con él.

-Sí, me gustaría mucho Aiden.

-Samara, tomare esta oportunidad que tú me das, te prometo que no te fallare, mientras tú me des esta oportunidad, no te defraudare. Lo prometo Samara.

-Aiden, confío en ti.

Su cara fue de sorpresa, sorpresa total, sus ojos se iluminaron, y destellaron en amarillo, uno quedo de color café, y el otro de color amarillo.

-Samara, mi dulce mate, no sabes lo que tus palabras hacen en mí. Mi dulce mate, prometemos enamorarte, ambos. Él no te lo dirá, pero ya te amamos.- Él se acerca a mí, me abraza lento y esconde su cabeza en mi cuello y lo siento aspirar- Hueles como los dioses mi amada, es hipnotizante.

-Aid.en?

-No mi amada mate, soy Xandre, y juro protegerte hasta el fin de los tiempos, solo confía en mí, en nosotros.

-Confío en ustedes. 

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Mis lectores, he vuelto.

Lamento la tardanza, pero estaba seca de imaginacion.

Esto explica un poco a Samara...

Nos leemos en el proximo cap..

Les quiere, R