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Estaba regresando de trabajar cuando veo que recepción estaba llena. Nunca había visto más de una familia estando allí. Pero ahora, el lugar no estaba llena de familias, sino de chicas. No tan niñas ni tan adultas, en un intermedio. Entro al departamento un poco extraña, intentando pasar entre las chicas. Como en la puerta del ascensor también estaban ellas, decidí subir por las escalera. Lo bueno que vivo en el segundo piso, siento lástima por los que viven en el piso 30 cuando el ascensor esta averiado.

De pronto, cuando estoy entrando al pasadizo, alguien me jala del brazo de una forma muy brusca. Chocamos hasta casi con las caras. Yo tenía los ojos cerrados, tal vez por la impresión de que el golpe fuese más fuerte, pero por suerte no lo fue. Entonces veo a un Yoongi intentando separarse de mí e olvidar lo que había ocurrido.

_Necesito que me ayudes -dijo de la nada.

_Eh-eh, Yoongi...

_Algunas fans están abajo, no es que no quiera verlas, sino que si no hay control esto puede acabar mal.

_Pero, ¿P-por qué viniste? -dije un poco nerviosa.

Como dije, cuando estaba frente a él, ya no era yo. Mi cerebro se ponía en modo nervioso.

_¿Puedo entrar a tu apartamento? -dijo ignorando mi pregunta.

_P-pues..

_Gracias -dijo. No de una formas sincera como de la primera vez, sino más como para callarme.

Entonces involuntariamente fui hacia mi puerta y la abrí. Prendí las luces y entré seguida de Yoongi. Entonces él, como si fuera dueño de la casa, se sienta en el sofá y prende el televisor.

Mi casa era en verdad muy cómoda. No era muy grande, lo que ocupaba espacio era el gran mueble que tenía. Me lo había regalado Hojin hace algunos meses cuando me había comprado mi televisor, dijo que tenía que tener un sitio para ver alguna película o serie.

Estaba en verdad muy nerviosa. El estaba todo relajado en Netflix mientras que yo sentía que en cualquier momento se me iba el aire y me moría allí mismo. En algún momento me aburrí y me dió hambre. Así que me fui a mi pequeña cocina y saqué un ramen para prepararme (Una clásica cuando te aburría preparar algo). Creo que ni dejé hervirlo totalmente pero ya los había puesto, y ni siquiera se cocinaron bien pues ya los había puesto en un plato. Tenía demasiada hambre como para esperar.

Entonces estando parada aún, agarro unos palillos para probarlos pero el chico castaño me arrebata el plato y se lo come.

_Gracias, moría de hambre -dijo mientras masticaba.

Quería gritar o golpearlo pero mi cuerpo no me dejaba. Se quedaba estático y no podía ni siquiera hablar.

_¿Quieres? -me dijo mostrándome el plato.

Asentí con la cabeza. Tal vez me veía torpe, no sé.

_Antes tienes que hacer algo -dice y se acerca mucho a mi.

Se acerca lentamente. Cada vez más, mirando mi boca. Supongo que tal vez quería ¿besarme?

_Eh, oye, ten- -tengo novio. Iba a decirle pero este se agachó por un lado mío hasta agarrar el control remoto del televisor.

_Tienes que cantar -dijo con el objeto en su mano y se fue hacia la sala.

¿Qué fue eso? ¿De verdad quería agarrar el control? ¿o quería besarme? ¿Está haciéndose el loco?

Amor platónicoWhere stories live. Discover now