Amor platónico

38

No sabía realmente qué decir.

¿Qué se supone que haga?

_Lo siento... mucho -dije con dificultad.

Realmente estaba tan en shock que no podía vocalizar bien.

Empezó a abrazarme muy fuerte.

_Pero... ¿no se puede hacer nada? -dije y luego me di una bofetada mental, creo que había empeorado su dolor.

_No estoy seguro -dijo sin despegarse de mí. Su voz no estaba tan entendible- Me dijo que habían medicamentos... cosas así, pero no sé...

_¿Qué no sabes? -dije y se separó de mí y se sentó.

Dió un suspiro.

_Desde siempre, el sida fue para mí la peor enfermedad que podía existir... Claro, existen miles más pero esa enfermedad me parecía tan dolorosa que no quería ni pensar en eso... y ahora... mi hermano sufre de eso.

Parecía que quería llorar de nuevo así que le tomé de la mano muy fuerte.

Aunque yo también tenía problemas y me sentía realmente devastada por dentro, el dolor de Yoongi era más grande.

Nos volvimos a echar y a quedar profundamente dormidos.

(...)

Me levanto por la vibración de mi celular.

Yoongi estaba en un lado de la cama en forma fetal. Ahora que lo recuerdo, tiene la costumbre de dormir así.

_¿Sí? -digo contestando a Taehyung.

_Buenos días -dice alegre.

_Buenos días -digo intentando contagiarme de su buen ánimo.

_¿Recién levantándose? -pregunta como si estuviera hablando con una pequeña niña- Ya es el mediodía.

¡¿Mediodía?!

_No me había dado cuenta -le digo un poco culpable- Si no me hubieras llamado, de seguro seguía durmiendo.

Nos reímos.

_¿Cómo está Yoongi? -me dijo y lo miro.

_Pues, lloró ayer...

_En serio debe haberle sorprendido...

_Pero... ¿cuándo se enteró?

_Ayer -dijo rápidamente- Justo antes de llegar a tu departamento a recogerte para ir a comer.

Ah... Por eso estaba en la acera pensando.

_Me alegra de que se haya expresado -dice Tae.

_¿Expresado?

_Yoongi no muestra mucho sus sentimientos... Su dolor siempre lo mantiene dentro y no lo quiere sacar... Siempre teníamos que consolarlo cuando nosotros sentíamos que ocultaba algo, ya que nunca mostraba su tristeza... Por eso me alegro de que haya llorado, pudo sacar su dolor.

_Pues, creo que sí... -dije- ¿Tú eras muy cercano a Yoongi?

_Realmente, sí -dijo y puedo ver cómo está sonriendo detrás del celular- Suga siempre ha sido un hermano mayor para mí. ¿Sabes? Da muy buenos consejos. Sabe mucho de la música, pero no sabe mucho de las personas... de los sentimientos de las personas... Siempre estuve allí ayudándolo en ese sentido.

_Pues, no sé si tu estudiante haya aprendido a tratar bien a las personas...

_Sí que mejoró en ese aspecto -dijo al instante- Era peor de lo que te imaginas. Siempre lastimaba a las personas sin querer.

_A veces sigue haciéndolo.

_Lo sé, pero estoy orgulloso de lo mucho que ha mejorado...

_¿Cómo puedes ayudarlo ahora? -pregunté.

_¿"puedes"? -dije confundido- ¿Tú no piensas ayudarlo?

_¿Cómo alguien herido puede ayudar a otro en ese mismo estado? -dije- ¿No recuerdas que aún estoy mal? Creo que más bien deberían ayudarme a mí.

_Yo puedo hacerlo.

_¿Qué?

_Tengo una idea -dijo entusiasmado- Deberían de venir los dos a mi casa.

(...)

Había llevado 1 maleta de las cosas básicas que debo tener como para sobrevivir en una casa que no es la mía. Suga también había llegado ya a la casa de Tae.

Entro con cuidado y todo me parece súper elegante: los enormes sofás, el gran de televisor de 75", los grandes equipos de música, la alfombra super costosa y otras cosas.

En cambio, Yoongi entra como si fuese su casa, se echa en uno de los sillones y se queda dormido.

_Hola, mis huéspedes -dije un Tae emocionado apareciendo de la nada- Bueno, ahora solo tengo uno con vida.

_Te puedo escuchar -dijo Suga con voz fuerte sin abrir los ojos.

Lo ignoramos soltando algunas pequeñas risas.

_Ven, que te enseño tu habitación -me dijo V dirigiéndose al segundo piso.

Carga mi maleta y entramos a un cuarto...

¡Oh, mi Dios!

Era realmente muy hermoso.

Estaba ya amoblado: tenía un ropero muy grande, otro televisor un poco más pequeño que el de la sala, una cama de 2 plazas, una mesa con una bonita lámpara...

_¿Te gusta? -dijo mirándome- Compré algunos adornos para ti, si no te gusta, me dices...

_No, no -dije rápidamente- En serio me encanta.

_Me alegro mucho -dijo Tae con una gran sonrisa- Voy a estar abajo, cualquier cosa, me avisas.

_Ok -contesté.

Me tiré en la enorme cama y di un suspiro.

No podía creer que todo ese hermoso cuarto era mío.