Amor platónico

17

Estaba con mis compañeros de trabajo saliendo de la cafetería. Había acabado nuestro turno, ahora venían otros para el turno
nocturno. Estábamos regresando a nuestros departamentos caminando ya que las de todos quedan cerca de allí, así como la mía. Entonces al llegar a la esquina de mi departamento, me despido de todos. Llego al departamento y subo las escaleras.

Entonces veo a un chico sentado en el suelo apoyando su cabeza en mi puerta. Cuando me ve, este se para rápido y se acerca a mi.

_Te has demorado. ¿dónde estabas?

_En la cafetería -dije con un poco de timidez.

Parecía como si me estuviera llamando la atención por hacer algo malo, pero, ¿quién era él para tener esa autoridad?

_¿Cafetería? ¿Saliste sola?

_Trabajo allí, Yoongi -dije rápido pero ya no con timidez, sino que un poco molesta.

¿Molesta?

_¿Qué? -dice él dándose cuenta de mi estado de ánimo.

_Que trabajo allí -dije con el mismo tono.

_¿Estás molesta conmigo? -dice y suelta una pequeña risa- Anda, abre la puerta.

Entonces lo hago pero entro e iba a cerrar la puerta pero pone su pie para estancarla.

_Lo siento -dice tan sinceramente que me conmovió mucho- Por dejar la casa así, tuve algo que hacer... Anda que lo limpio -dijo y empujó la puerta y entró.

Me dolió un poco el golpe, pero, anda, no era para tanto.

Se sentó en la silla de la cocina y me miró muy fijamente que me hizo provocar ese escalofrío por todo mi cuerpo.

_¿Vas a hacer algo? -me dice- ¿Tienes planes?

_¿Pla-planes? -dije sin poder mirarlo fijamente.

_¿Tienes tarea?

_Bueno, un poco... ¿por qué?

_Por nada -dijo rápidamente chasqueando la lengua. Se paro y se tiró en el sofá- Voy a ver una película, si terminas rápido, lo vemos juntos...

Mi corazón latía rápido, ¿era una cita?

_Eh-eh... -quería oponerme a la idea pero no podía decir nada.

_¿Eh? -dice el remedándome.

_Tengo mucha tarea -dije y me dirijo a mi mesa de trabajo.

Chasquea de nuevo la lengua.

_Como quieras -dice y prende el televisor. Luego se dirige a la cocina y desaparece en ella.

Quería hacer como que no me importase lo que haga, pero la verdad es que tenía mucha curiosidad. Pasaron algunos minutos.

De la nada sale Yoongi con dos platos de ramen. Tenía mucha hambre y de verdad necesitaba uno.

_Gracias -digo un poco bajo.

_¿Quién dijo que era para ti? -dice- Son para mi, ¡los dos! ¡Tengo mucha hambre!

_¡Oye! -dije y hasta yo me sorprendí. Era primera vez que le decía eso.

_¿"Oye"? -dice él- ¿Me estás enfrentando?

_Tengo mucha hambre -dije de nuevo von voz baja.

Entonces lo hace de nuevo. Se acerca demasiado a mí que puedo sentir su aroma a tal vez, café de los amargos.

_Sabes lo que tienes que hacer -dice casi susurrando.

Me quedé estática.

_¿Qué? -dije casi sin articular mi boca.

Entonces él me mira la boca, así como se ve a alguien que quiere darte un beso pero se detiene antes porque alguien tocaba la puerta.

Tocaban rápido y fuerte.

_ ¡Cariño, abre la puerta! -dice el joven del otro lado de la puerta- Soy yo.

_¿"Cariño"? -me dice Yoongi- ¿Tienes novio?