Ｈａｌｏ『KookTae』

10. 『Rebelde』

Ignorar la invitación de Jungkook resultó más fácil de lo queesperaba cuando él no estuvo en la escuela la semana siguiente.

Después de hacer unas cuantas preguntas discretas, descubríque estaba lejos, en el campo de remo. Sin el peligro de encontrarme con él, me sentí más relajado. Yo no estaba seguro de tener el coraje de renegar de la cita si estuviera de pie justo delante de mí, con supelo nuez moscada bordeando esos grandes y lindos ojos. De hecho no estaba seguro si sería capaz de decir nada en absoluto dado mis anteriores intentos de conversación.

A la hora del almuerzo me senté con Jimin y sus amigos en el patio,escuchando sin entusiasmo su lista de quejas acerca de la escuela,los chicos y los padres. Que hoy la fiesta de graduación sea el objeto del debate no era de extrañar.

—Oh, Dios mío, hay mucho que pensar —dijo Jimin estirado sobre el suelo como un gato. Sus amigos estaban esparcidos a su alrededor, algunos en los bancos del jardín. Me senté con las piernas cruzadas junto a Jimin.

—¡Oh, Dios mío, lo sé! —dijo Yeon Woo. Ella colocó de nuevo su cabeza en el regazo de Nayun y subió su top de modo que su vientre fuera expuesto a la luz del sol—. Ayer por la noche comencé a hacer una lista de tareas pendientes—. Todavía de espaldas, se giró para abrir su planificador de la escuela con etiquetas de marcas dediseñadores que había pegado para decorar.

—Conseguir esto...—continuó, leyendo de una página manoseada—.Reserva de manicura Francesa. Buscar unos zapatos sexys. Comprar clutch, decidir la joyería. Encontrar un estilo de pelo de alguna famosa para copiar. Decidir entre Hawaii puesta de sol y el bronceado spray Champagne. Reservar limusina. La lista es interminable...

—Se te ha olvidado lo más importante, encontrar el vestido —dijo Nayun. Los demás se rieron por la omisión. Me desconcertaba que pudieran discutir en detalle un evento que estaba tan lejos, pero me abstuve de hacer comentarios. Dudaba que mi contribución fuera apreciada, sobretodo por que eran cosas de chicas.

—Les va a costar mucho —suspiró Lay—. Voy a terminar fundiendo mi presupuesto y gastando cada dólar que he hecho trabajando en esa panadería de mierda para comprar un buen traje.

—Yo estoy cobrando —dijo Jimin con orgullo—. He estado ahorrando por trabajar en la farmacia el año pasado.

—Mis padres lo pagan todo —alardeó Yeon Woo—. Ellos han aceptado pagar todo esto, siempre y cuando, yo apruebe todos mis exámenes,incluso pagaran un autobús si queremos uno.

Todos claramente estaban impresionados.

—Hagas lo que hagas, no jodas ningún examen —dijo Jimin

—Hey, ella no puede hacer milagros —Nayun se echó a reír.

—¿Alguien tiene una cita ya? —preguntó alguien. Algunos las tenían, y los que mantenían relaciones estables no tenían de que preocuparse. Todas los demás estaban aún desesperados esperando que alguien les preguntara o eligiendo a quien invitar.

—Me pregunto si Yoongi irá —musitó Jimin, volviéndose hacia mi—.Todos los profesores obtienen invitación.

—No estoy seguro —le dije—. Él tiende a alejarse de ese tipo decosas.

—Pregúntale a Chanyeol —sugirió Nayun a Jimin—. Antes de que se lo pida alguien más.

—Sí, los buenos se van primeros —Agregó Lay.

Jimin se vio confrontado.

—Es lo formal, Na —dijo el—. El me debe hacer la pregunta, así lo decidí.

Lay soltó un bufido—. Buena suerte con eso.

—Jimin, eres tan tonto a veces —suspiró Nayun—. Chanyeol mide 1.85, fuerte, sexy, juega lacrosse y por suerte para ustedes, tira para su lado. Puede que no sea la herramienta más afilada de la nave según tus gustos, pero aún así, ¿Qué estas esperando?