Capítulo 11: "Luces Perfecta esta Noche"

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(Narra Betty)
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"Luces Perfecta esta Noche"
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-En tu jodida vida me pondré tal vestido, idiota.- negué un par de veces, intentando escapar de los brazos de Fangs.

-Oh, sí que lo harás, mi Betty- asintió Toni, con una sonrisa pícara en sus labios.

-¡Yo no soy de nadie, pejelagartos!- grité entre risas, cuando Sweet Pea metió una galleta en mi boca, simplemente para que calle.

-Hijos de...- balbuceé con una sonrisa, aunque a decir verdad, la galleta estaba muy rica.

-Está hecha de pepinos, para tu información- susurró Fangs, mientras que Sweet Pea y Toni perfeccionaban mi atuendo para la fiesta de Cheryl.

-¡Hoy mueren!- solté una leve carcajada, intentando luchar contra el maquillaje que retocaba Toni en mi rostro.

-Sweet Pea, ponle los tacones- gritaron al unísono mis compañeros de vida.

-¡Ya, ya voy! ¿No ven que arreglar a esta chica es un suicidio?

-Sé morder- opiné con una cara pícara, aunque sólo recibí un pequeño golpe por parte de Toni.

•••

La ruta estaba completamente vacía, acompañada de la gloriosa música y el suave viento que acariciaba mis mejillas.
Respiré profundamente, intentando sellar el hermoso recuerdo de vida dentro de mi corazón.

-Eres la única persona que ama tanto vivir. Digo,- mi amiga sonrió dulcemente, intentando no quitar la vista del volante.- Miras todo lo que yo veo normal, como si fuera lo más increíble del mundo. Es asombroso, le tomaría una foto, aunque es probable que tengamos un accidente por eso.

-Soy demasiado linda para morir- reí bruscamente, golpeando mi cabeza contra la ventanilla.

-O lo demasiado idiota para suicidarte- susurró Toni entre pequeñas carcajadas.- ¿Buscamos a Jug?

-No, él ya está en la fiesta. Primera vez siendo puntual- anuncié con una pequeña sonrisa. Toni me observó pícaramente; ya sabía de qué se trataba.

-Te gusta y no me dijiste- gritó indignada, quitando por primera vez la vista del volante.

-Toni, sí. Estoy enamorada de Jughead Jones- levanté mis brazos, gloriosamente contenta.

-¡No lo puedo creer, Betts! ¡Es fabuloso!

-¿Lo es? ¿Duele?- respondí al mirarla, ella sabía bien la respuesta.

-Duele al final, y sí... Como el infierno, ¿Por qué crees que luego de Érica, no estuve con nadie?

-Deberías probar con Cheryl, nos invitó para que tú vayas, es mucho decir- parpadeé varias veces, imitando a una muñeca Barbie que tanto perturbaba a Toni de niña.

-¡No vuelvas a hacer eso, demonio!- gritó soltando una carcajada.- Además, llegamos.

La casa Blossom estaba de maravilla, con las perfectas luces cálidas que decoraban la entrada, y un tal Jones con traje, sentado sobre el marco de una ventana.
Alcé mi ceja, intentando cubrir mi sonrisa de satisfacción. Él estaba tan tierno; con su gorro en forma de corona y aquel atuendo tan elegante.

-¿Nos vemos luego, rubia?- preguntó Toni, removiendo su cabellera rosada con unos raros movimientos.

-Vale- mordí mi labio inferior, ya que mi amiga me miraba pícaramente.

El muchacho de rizos negros como la noche, observaba detalladamente el baile de algunas parejas, intentando imitar alguno.

-Hola Sol mío- sonrió al percatar mi presencia.

-Hola mi rey- reí bajando mi cabeza.- Estás muy lindo y elegante, eh.

-Sí, quería verme bien para ti... Que por cierto, estás hermosísima, pero no es una excepción ya que siempre lo estás.- dijo rápidamente, con los nervios a punto de explotar.

-Eres muy tierno, Jughead Jones.- Me acerqué lentamente, sin dejar de observar la belleza que tenía junto a mí.- ¿Quieres bailar bajo la luz de la luna?

-Siempre si es contigo- juntó mi frente contra la suya, obteniendo unas sonrisas nerviosas por parte de los dos.

La noche estrellada y la música a reventar, hicieron eco en mi vida. Ya que lo único que importaba era él, con su jodida sonrisa, la cual nunca demostraba.

-Eres la única persona que se quedó conmigo.- susurró a mi oído, logrando que me entremezca en su pecho- . No por lo que alguna vez fui, no por una relación de niños. Sino porque te quedaste junto a mí, cuando era un imbécil solitario, el cual se perdía entre tanta oscuridad. Te quedaste cuando nadie lo hizo, cuando me merecía un buen golpe de tu parte. Te quedaste ahí...

-Juggie, siempre estaré ahí. ¿Sí? No importa que valga mi vida entera.- Reí en su hombro, cuando movía mi cadera al compás de la música- Te quiero.

-Yo también, Betts.- sonrió como un niño pequeño, demostrando una felicidad indescriptible.- Y como dice la canción, luces perfecta esta noche.

-Well I found a man, stronger than anyone I know- canté cuando él abrazó mi cintura, riendo tan dulcemente.

Así que, a quien sea que haya puesto a Jughead Jones en mi vida, le agradezco porque este muchacho, me cambió completamente...

My Wonderwall •Bughead•Where stories live. Discover now