Capítulo 8

1.1K 93 11
                                    

Si los teléfonos tuvieran un detector de mentiras entre sus funciones, Clara ya se habría dado cuenta que la frase "Que buen gesto de su parte el dejarme dormir allí" que dijo Lauren después de contarle sobre Camila y su ofrecimiento para darle asilo en Nueva York era más falso que un billete de 3 dólares o uno de 30 pesos o de 40 reales, bueno la idea de falsedad que emanó la boca de Jauregui quedó expuesta.

-Aún no sabemos si vayas o no pero ya tenemos una opción de dónde podrías quedarte si el viaje no cubre el hospedaje – Mencionó Clara.

"Espero que sí lo haga" – Pensó Lauren – Sí, es una buena opción, aunque pasas por alto que ella y yo tuvimos algo que ver -Lo sabemos hija, pero creo que ustedes olvidan parte de la historia, antes de ser algo más fueron amigas – Sentenció Clara – Sí mamá, eso lo sé pero no es tan fácil, las vivencias cambian mucho tu forma de ver la vida, así que desde la perspectiva que me encuentro ahora se me complica volver a ser amiga de Camila – Finalizó Lauren.

-Bueno ¿Al menos la sigues felicitando en su cumpleaños? – Preguntó Clara – "No" – Sí mamá, cada marzo sin falta – Me da gusto que aún tengan un trato cordial en fechas importantes – Somos adultas ahora, no niñas – Aún tengo mis dudas sobre tu adultez, no encuentro a Nala por ninguna parte desde que viniste de visita esta última vez - ¡La secuestré para un experimento! ¿Sabías que debemos mantener con nosotros una parte que nos vincule a nuestra infancia? La razón es para no olvidar ni perder esa etapa de inocencia - ¿Y la foto tuya y de Camila que tenías en tu buró? – Esa la tiré, cuando lo hice sentí que tiraba el pasado, se siente muy bien – Que raro, no encontré trozos de fotos en la basura – Los restos se fueron a la basura del vecino – Muy bien, haremos que te creo, descansa que ya es tarde – Seguiré trabajando un poco en la tesis y ya después me iré a dormir – Muy bien, pero no te desveles ¿Ok? - ¡Ok, mami! – Te quiero – Yo también, mamá – Al colgar, Lauren dejó su celular en su escritorio y continuó con la redacción de su tesis, aunque la conversación con su mamá sobre Camila la puso un poco pensativa y sin evitarlo abrió el cajón de su escritorio para sacar entre sus libros la foto que faltaba en el buró de su cuarto, al volver a verla la ojiverde no pudo evitar pensar en ese día.

Sin duda un día de película, soleado, con un clima templado y el agua del mar más cristalina y azul que nunca.

"No puedo creer que Michael nos prestara su Jeep para pasear por la playa" – Mencionaba una sonriente Camila que disfrutaba a cada momento el aire en su rostro y la vista tan increíble que tenían del océano, el cual recorrían por la carretera que estaba al borde de la arena que guiaba a la playa.

"Ya tengo 16 años, puedo manejar sin problema de que un oficial nos detenga por no venir con un adulto" – Contestaba Lauren – "Además, eres buena conductora" – Afirmaba Camila quién se acomodaba su melena que jugaba con el viento debido a que el Jeep estaba descapotado. Que la latina peinara con sus manos su cabello revuelto, usara esos lentes de sol, junto con ese top y ese short, causaron que la excelente conductora que había alabado hace unos instantes se descontrolara por la imagen que le había regalado la castaña.

Para fortuna de ambas, la carretera estaba despejada y a la altura de la arena, lo que permitió que Lauren maniobrara para volver a poner el Jeep en dirección correcta.

"¿Estás bien?" – Decía una preocupada Lauren mientras que su copiloto reía a carcajadas por lo sucedido, lo que hizo que la ojiverde se contagiara de su risa y así ambas comenzaran a reír – "¡Me voy hacer pipí!"- Gritó Camila entre risas – "¡No, mi papá me va a regañar si te haces en el asiento!" – "¡Entonces, oríllate ya!" – Pedía Camila quien no aguantaba más las ganas de ir al baño a causa de las carcajadas, Lauren se orilló en una parte con acceso a la playa, al sentir que el Jeep estaba estacionado Camila corrió sin previo aviso detrás de una palmera para expulsar sus necesidades.

UNA VEZ MÁSWhere stories live. Discover now