Capítulo 13

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-Cariño ¿Ya guardaste todo? ¿Cepillo, Toalla, Calcetines, Shampoo...? – Ya mamá, tranquila todo está dentro – Lauren hablaba por teléfono con Clara quien le ayudaba a realizar un cheklist de todo su equipaje antes de que esta tomara el vuelo a Nueva York el día de mañana.

-Muy bien cariño ¿Cómo te sientes? ¿Nerviosa? – Preguntó Clara – Quizás ansiosa, tal parece que esta noche no voy a dormir nada tan sólo de pensar que conoceré Nueva York y que tengo un concurso pendiente – Respondió Lauren – Me da mucho gusto cariño, verás que te irá de maravilla, toda la familia acá estamos cruzando los dedos para que ese premio sea tuyo – Y lo será mamá, ya lo verás – Lauren confiaba mucho en su trabajo y en ella misma, por lo que no se disponía a dudar de sus capacidades o a minimizar su trabajo.

-Mamá, no quiero hacerlo, pero debo colgar necesito despejar mi mente un poco e intentar dormir, ya es muy tarde y no quiero perder el vuelo mañana – Dijo Lauren un poco apenada – No te preocupes cariño descansa, y quiero que sepas una cosa, todos aquí estamos muy orgullosos de ti y pase lo que pase tú ya eres nuestra campeona, te queremos mucho Jauregui – Habló con orgullo Clara - ¡Y yo a ustedes Jaureguis! – Dijo algo nostálgica Lauren - ¡Oh! Por cierto, si llevas los platanitos fritos para Camila que te mandé ¿verdad? -  Sí mamá no te apures, los llevo muy resguardados en mi maleta, y que bueno que la mencionas, debo llamarle ahorita para ver si ellas podrán ir por mi mañana al aeropuerto – Comentó Lauren - ¿No le has hablado Lauren? – Retó su mamá – Es que traigo la cabeza hecha un lío, pero ahorita lo resuelvo relájate – Intentó Lauren calmar a su mamá – Ya es muy tarde para que le hables ahorita, son las 11 de la noche – Habló Clara - Sólo es una hora de diferencia, y si aún continúa con sus malos hábitos de dormir, sé que estará despierta, debo colgarte mamá ¡Los amo mucho! – Lauren terminó la llamada para después contactar inmediatamente a Camila, que como ella dijo aún seguía con sus malos hábitos que la llevaban al insomnio muy a menudo.

Camila tocaba algunos acordes de guitarra en su habitación cerca de la ventana, la cual tenía como vista las calles iluminadas de Nueva York, de un momento a otro notó que su celular comenzaba a timbrar y sin duda lo tomó para saber quién le llamaba a tan altas horas de la noche, en la pantalla se divisaba el nombre de Lauren, por lo que esta no dudó en contestar.

- ¿Hola? – Hola Camila ¿Te desperté? – Preguntó Lauren – No, para nada aún estaba despierta – Contestó Camila – Lo sabía, aún continúas con tus malos hábitos para dormir – Esta frase hizo reír un poco a Camila – Ya vez, estoy un poco averiada en cuestiones del sueño, pero ya habrá tiempo para dormir – Creo que tu alma es tan activa, que el día de tu funeral en vez de decir "descanse en paz", dirán ¡cuidado que este espíritu no descansa! – Ambas se rieron ante el comentario de Lauren – Mi diversión será asustar a todos por las noches, ¿te imaginas lo divertido que sería eso? – Mencionó Camila entre risas – Ya para, que no sabes lo que dices matarías a muchos del susto por las noches – Entonces le haría un bien a este mundo, ya somos muchos habitándolo y esta tierra necesita abono – Que mensa estás - ¿Me está llamando mensa señorita Jauregui? – Dijo Camila en un tono sarcástico de ofensa, lo que hizo reír a la ojiverde – Disculpa, mensísima – Esta vez las risas fueron más audibles y duraderas – Ya por favor, necesito seriedad en esta llamada. Quería preguntarte qué planes tienen ustedes el día de mañana – Cuestionó Lauren – No lo sé aún ¿Por qué? – Preguntó Camila como si desconociera el viaje que haría Lauren – ¿Si recuerdas que mañana viajo a Nueva York? – Dijo Lauren - ¡Joder, se nos pasó por completo! Mañana tenemos muchas cosas que hacer lo siento, creo que no habrá nadie en el apartamento y no podremos ir a recogerte al aeropuerto – Contestó Camila - ¡Oh! No te apures si quieres sólo pásame tu dirección y las espero hasta que lleguen – La respuesta de Lauren reflejaba un poco de desilusión, pues muy en sus adentros pensaba que Camila también se encontraba ansiosa de verla, así como ella lo estaba desde que supo que iría a Nueva York y se quedaría en su apartamento - ¡No seas boba Lauren, claro que iremos por ti al aeropuerto! Los viernes no tenemos clases por lo que se nos facilita ir a recogerte – Soltó Camila - ¡Ya había creído que se te había olvidado que iría! – Soltó Lauren algo sentida – Claro que no, cómo se me iba a olvidar que después de cuatro años volveré a verte – Este comentario salió sin filtro de la boca de Camila, el cual hizo estragos en el estómago de las chicas, pues ambas sentían un tumulto de emociones dentro de este, aunque aún no descifraban a qué grado lo sentían -  Esto es muy loco, cuatro años, qué fuerte es nuestro orgullo – Mencionó Lauren – Pero al parecer es más fuerte el destino – Ante este comentario de la latina ambas se quedaron silenciadas por un momento hasta que Lauren rompió ese incómodo y pensativo silencio – Qué más da, ya estamos aquí, dos adultas que saben anteponerse a todo – Así es – Dijo Camila – Bueno, entonces mañana las veo, al parecer el avión aterrizará a las 12 del día hora de Nueva York – Perfecto, entonces ahí te vemos, descansa – Se despidió Camila – Yo te diría descansa pero sé que aún te aguardan horas de insomnio, sólo trata de no quedarte dormida mañana – Aseveró Lauren – Eso será imposible, ahí estaremos mañana – Muy bien, saludos a Dinah – Yo la saludo de tu parte – Hasta mañana Camila – Hasta mañana Lauren.

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