Forzada a Comprar un Esclavo Vampiro

Capítulo 17

Tuve algunas dificultades, pero finalmente conseguí entradas para un concierto a unas pocas horas, Corey estaba encantado y más cuando lo dejé conducir, de todos modos, yo no quería conducir 4 horas seguidas. El concierto fue bastante divertido, podría decir que Corey se lo pasó genial. El único problema fue que nos perdimos y mi auto se descompuso en el camino de regreso, por lo que Corey y yo ahora estábamos atrapados en un lado de la carretera, lo extraño era que Corey todavía estaba de buen humor. Me senté en el asiento del pasajero del auto, tomé mi teléfono y llamé a Drake esperando que respondiera a las 3 de la mañana. Pero, por supuesto, no lo hizo. Suspiré, colgué el teléfono y lo coloqué en el tablero.

— ¿No te respondió? — Corey preguntó.

— No. ¡Vamos a estar atrapados aquí toda la noche! — respondí.

— Cálmate Arabelle — dijo y lo miré.

— No quiero pasar la noche en el lado de la carretera — repliqué.

— Bueno, yo tampoco quiero.

— No me siento segura — dije y él se rió.

— ¿No te sientes segura? ¿Has olvidado que soy un vampiro? Soy prácticamente invencible.

— Sí, "tú" lo eres — dije haciendo énfasis en "tu".

— Sí, bueno, eso significa que puedo protegerte — replicó y levanté las cejas.

— ¿Lo harías? — inquirí.

— ¿No crees que lo haría? — preguntó un poco sorprendido.

— No sé lo que harías — respondí.

— Tú, ¿realmente crees que no te protegería? — inquirió y yo me encogí de hombros.

— Es triste que pienses así de mí — él dijo, pensé que estaba bromeando, pero se veía completamente serio y suspiré.

— Estaba bromeando — agregué.

— No, no lo estabas, estabas completamente seria.

— Bien, lo estaba solo un poco — dije y miró hacia otro lado, por la ventana.

— Lo siento, Corey, pero ¿qué esperabas? Quiero decir, ¿no fuiste tú quien dijo que no querías que fuéramos amigos?

— Eso fue hace mucho tiempo — murmuró.

— Fue como hace un mes — dije.

— Como sea.

— ¿Realmente estás enojado? — le pregunté.

— Sí, obviamente no confías en mí en absoluto - dijo ahora mirándome.

— Si confío en ti ... — respondí, rayos no tenía la intención de sonar tan insegura.

— Suenas tan segura — dijo sarcásticamente.

— Confío en ti ... solo hasta cierto punto.

— ¿Realmente confías en mí?

— Sí — respondí.

— ¿Podrías confiarme tu vida? — inquirió y me mordí el labio, ¿debería mentir o decir la verdad?

— No lo sé, ¿tú me confiarías tu vida? — le dije

— Sí — él respondió y me quedé en shock.

— ¿En serio?

— Sí, pero ahora no estoy tan seguro.

— Pero no hice nada — dije.