Parte 6.

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"Capitulo 6: Lo inevitable y la decisión."

YoonGi jamás se hubiera imaginado que algún día estaría en la situación que más evadió durante sus veinte y cinco años. Pero de igual manera como fue antes mencionado, no se arrepentía.

Era simplemente un sentimiento que no podía reprimir y peormente explicar, era completamente nuevo, pero le gustaba de alguna u otra manera.

Desde que su madre había muerto, jamás había vuelvo a tener un despertar así al lado de alguien. Todo era tan cálido.

Empezaba a ver la fuerza y el poder que la naturaleza, el mundo y la madre luna tenían, tanto para crear un sentimiento tan imposible de quebrantar, que naciera en un ser desde su primer momento de existencia.

Estaba tan tranquilo que no quería soltar al omega que ahora dormía plácidamente sobre su hombro. Tenía la respiración más armoniosa que pudo haber visto, dormía sin preocupación alguna, como si al fin se sintiera bien, sus labios se encontraban levemente entreabiertos un puchero debido a que su mejilla se encontraba apegada a su pecho.

En ese momento, al estar un buen tiempo observándole, se sentía mal, culpable, de no poder creer. Hace un poco más de veinte y seis horas, era uno de los seres que más repudiaba, alguien que hace daño a las personas para un beneficio malo y soberbio. Ahora estaba recostado al lado de un lindo omega, que a pesar de haber estado horas atado, de haber sido abusado sexualmente, o eso supuso, aunque no podía especificarlo exactamente, después de todo, no lo pudo notar, ahora ese mismo omega está con él y tienen un lazo.

Definitivamente se había convertido en la misma porquería que su padre.

Sin hacer mucho ruido o mucha presión en la cama, recostó al omega sobre la almohada y lo acunó entre las cobijas para que no le diese frío.

Era el momento de tomar cartas sobre el asunto, ahora ya no era el único que debía importar, ahora tenía a su omega, a su otra parte, a su alma gemela y por supuesto, tendría que ver por él.

Se puso un bóxer y una camisa antes de salir, pasando sus manos por sus cabellos tomó su celular y marcó a su socio y mejor amigo. Namjoon.

¿Quién era Namjoon? era la gran pregunta. Era también su mejor amigo, más que todo, también era su socio, el dueño de la mitad de sus empresas. Se conocieron en la universidad a la mitad de la carrera y aunque Yoongi nunca fue la persona más sociable de la vida, lograron formar un lazo de amistad muy bueno.

Llamó a Namjoon y le dijo que necesitaba hablar en persona urgentemente con el, Jin y él eran las únicas personas en el mundo en las que confiaba plenamente como para tomar la decisión que había tomado.

Cuando él llegó, sólo se limitaron a dedicarse miradas obvias, dudosas, extrañas y etc. Y es que cualquiera que tuviese la oportunidad de ingresar en la casa captaría el olor tan fuerte a omega y a fermonas que estaban ahí.

YoonGi se sentó en el escritorio de su despacho e invitó con la mirada a Namjoon a que también lo hiciera. YoonGi se sentía tranquilo, se sentía bien con lo sucedido, pero no negaba que también estaba preocupado.

─── Necesito que me ayudes en algo. ─Namjoon lo miró serio pero luego relajo su semblante.

─── Vamos YoonGi, te hago favores desde la Universidad. ─ambos rieron ante las palabras de Namjoon. Era cierto, siempre se ayudaban mutuamente, ya sea en tareas o en algo que alguno de los dos necesitaba.

YoonGi le explicó poco a poco todo, así como lo hizo con Jin, y aunque Namjoon ya lo sabía por su pareja, escucho atentamente las palabras de YoonGi.

𝐄𝐫𝐞𝐬 𝐌𝐢𝐨 [윤민] 𝐎𝐦𝐞𝐠𝐚𝐯𝐞𝐫𝐬𝐞Where stories live. Discover now