𝐄𝐫𝐞𝐬 𝐌𝐢𝐨 [윤민] 𝐎𝐦𝐞𝐠𝐚𝐯𝐞𝐫𝐬𝐞

Parte 7.

"Capítulo 7: Un poco más y nos iremos."

Toda esa tarde parecía haber terminado bien, y el resto de la semana de igual manera.

Aunque fue muy incómodo aún para Jimin, ya que según él, estar en celo era una etapa muy vergonzosa, sus instintos fluían por si solos, que ni se podía medir la intensidad de todas sus acciones.

Para YoonGi todo fue perfecto, poco a poco fue acoplándose con la presencia de Jimin, estaba haciéndose a la idea de compartirlo todo, más ahora con su omega. Había pasado momentos únicos por primera vez. Entendía muchas cosas ahora, como por ejemplo, el tener una pareja, y no sólo lo decía por el sexo, aunque no iba a negar que hacerse cargo del celo de su omega había sido maravilloso pero se refería a pasar momentos con alguien y reír juntos, sabiendo que era correspondo era algo que provocaba miles de lombrices en su estómago.

Sólo de pensarlo sonaba completamente ridículo a su parecer más para el, pero a la vez sonaba tan lindo con sólo recordar como había sido.

Con el paso de las dos semanas ambos se habían ya poco a poco tratado de acostumbrar. YoonGi ya había hablado con sus amigos Jin y Namjoon, con Jin todo fue un poco más difícil, para él no era fácil asimilar todo eso, tanto que había terminado todo en llanto con él, pero como anteriormente había mencionado Namjoon, era eso o que algo le sucediera a YoonGi y a su pareja, cosa que nadie deseaba.

Tan bien fue un poco complicado explicarle a Jimin que deberían mudarse a otro lugar un poco lejos y el por qué, no era que no lo entendía, porque en realidad lo hacía, más bien era para que pudiera estar al tanto de las cosas y estuviera seguro.

Había sido una tarde difícil para Jimin, como antes se mencionó, él estaba completamente de acuerdo con la decisión que había tomado YoonGi porque a la final era por su bien, pero esto fue lo mismo que le hizo recordar la atroz y desalmada hazaña de "venderlo" esa era la palabra correcta para que hicieron sus padres. Terminando así llorando en los brazos del pelimenta.

Para YoonGi también fue difícil creer y aceptar como estos habían podido hacer algo así con su hijo, claro que internamente se insultaba y se maldecía porque de alguna u otra forma el estaba involucrado en ese acto, pero en fin, él podía ser una mierda de persona pero no creía que alguna vez pudiera ser capaz de abandonar a alguno de sus hijos, ni por la cantidad más grande que fuera que quisieran ofrecerle, él había creído que ningún padre podría hacerle algo así a sus hijos, pero ahora sabía perfectamente que la avaricia en algunas personas era más fuerte que todo.

Luego de que Jimin supo calmarse en sus brazos, se animó a hablarle cosas sobre él, empezando así a contarle sus temores.

Jimin sabía perfectamente quienes eran sus padres, pues si, eran las típicas personas de una buena clase social que se creían una joyita para todo el mundo, la típica familia de buena posición, con los mejores hijos y la mejor relación amorosa entre ellos. Cuando la realidad era de que todo lo que decían ahí en sus reuniones acerca de su familia era de puertas hacia afuera.

La verdad era que sus padres eran unos ambiciosos y que si seguían juntos, era por no romper esa película que habían creado para la sociedad, donde su madre era una linda señora, que estaba a cargo de sus hijos, no aquella que les gritaba que eran unos estorbos y buenos para nada.
Donde su padre era un hombre responsable, que trabaja duro para ganarse su dinero y era alguien respetable, más no era la persona que le gustaba el dinero fácil y estafar a las personas.

Pero así se había acostumbrado a vivir, no podía odiarlos porque a la final eran sus padres, pero tampoco podía felicitarlos ni estar orgulloso de las personas que eran.
De la única persona de la que estaba orgulloso era de su hermano, Jihyun es su nombre, alguien que de verdad merece la admiración de los demás, a pesar de no llevar una vida de los colores del arco iris era alguien que al igual que Jimin, había aprendido que si no se esforzaba, nadie iba a hacer nada por ellos.