El pequeño del Alpha [Jikook][Omegaverse]

Capítulo 15

—No puedo creer que me llame tanto la atención la sangre de un sucio perro. 

Pensé que nadie entraría a esta habitación que me acondicionó el vampiro pero me equivoqué.

—Lobo...— Hablo bajito.

—¿Que?— El joven se levanta de la pequeña mesa en la que estaba sentado.

—Soy un lobo no un perro— Muevo mis manos, un signo de que estoy demasiado nervioso.

—Te tendría que matar por el solo hecho haberme contestado, pero no puedo ya que eres una cosa valiosa para Jimin— Ahora se sienta en la cama con las piernas cruzadas.

Tomo la sabana y la jalo lejos de mi cuerpo, estaba apunto de dormir pero entró el.

—Estás temblando ¿Acaso tienes miedo?— Gatea lentamente a donde estoy.

—Aléjate por favor— El si me causa terror, el y todos los demás vampiros excepto el que me encontró.

—Todo estará bien, mi hermano salió por un rato— Ronronea mientras da una lamida a sus labios.

Cierro mis ojos y los vuelvo a abrir.

—¡Ah!— Está al frente de mí sonriéndome de manera perversa.

De un rápido movimiento me acuesta en la cama, sus colmillos han crecido.

—¡No por favor, no me hagas daño!— El se acerca a oler mi cuello.

—Parece que mi hermano ya te ha puesto la mano, mejor dicho la lengua— Con mis manos temblorosas lo empujo.

—N-no, eres tan cruel conmigo— Sollozo con asco y miedo al mismo tiempo, no quiero que este hombre me toque.

—Taehyung ¿Que diablos haces?— El chico se levanta rápidamente como si yo quemara.

—Hermano yo estaba hablando con tu cachorro— Está nervioso.

Con mis manos cubro mis ojos, no quiero ver a al chico.

—No te enojes hermano, ¡El me provocó!— Un gran gruñido se escuchó, un gruñido furioso.

—Lo dejé solo en la maldita habitación, ¡Solo! Tu entraste a molestarlo, para intentar morderlo y eso no puede hacerse hermano mío. 

—Jimin yo no quise...— Ahora la habitación está en completo silencio.

Abro uno de mis ojos y ya no hay nadie, ahora puedo respirar con tranquilidad.

Me pongo de lado y me hago bolita con una pequeña sonrisa que no entiendo porqué salió de mis labios, pero no importa, cierro al fin los ojos.

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Siento una fuerte mirada e inconscientemente mis piernas se frotan entre ellas, eso no es buena señal.

No he querido abrir mis ojos, pero la curiosidad me gana, un pequeño grito sale de mi garganta cuando veo a Jimin acostado a mi lado, mirándome fijamente.

—Mi cachorro por fin despiertas— Está a unos escasos centímetros, deseo frotarme contra el, sentir su piel contra la mía.

Muerdo el interior de mi mejilla con fuerza sintiendo el sabor metálico.

—¿Me estas seduciendo?— Agarra con sus grandes manos mis muñecas y rápidamente se pone arriba mio.

—Yo—Sus labios chocan bruscamente con los míos, sin esperarlo su larga lengua se mueve en mi boca llevándose consigo el sabor a sangre.

Suelto un gran gemido mis ojos lloran de emoción, cierro mis manos en puños.

Tengo un cosquilleo en mi pelvis, pasan los segundos y necesito aire así que lentamente se aleja.

—Tu sangre es aún más deliciosa de lo que pensaba y huele cada vez mejor— Agarra mi muñeca y la lleva a su nariz.

Cierro los ojos imaginado sus dientes en mi cuello, imaginado una marca de propiedad.

—Muérdeme.

—¿Tan rápido? Que apresurado, lastimas mis sentimientos— Alza la camisa de color negra que me ha dado y ahora siento su lengua lamer mis pezones.

Respiro con dificultad no puedo creer que un vampiro me este tocando de esta manera.

De nuevo se separa, muerdo mi labio para evitar chillar por más atención.

—Salí ayer por comida, me costo trabajo ya que nosotros no comemos y también lamento lo de Taehyung— Puedo escuchar sus dientes rechinar de enojo.

Muevo mi mano para que me suelte y así lo hace, con delicadeza acarició su mejilla intentando tranquilizarlo, es como si mi cuerpo supiera cuando está enojado necesito verlo en todos los aspectos "Feliz".

—Gracias— Acaricio y exploró su rostro, su piel bajo la mía se siente un poco fría nada exagerado.

Quisiera abrazarlo para darle mi calor pero se perfectamente que esa es su temperatura.

—Debes comer cachorro— Pone un brazo debajo de mi cuello y otro en mis piernas para levantarme junto con el.

En un parpadeo estamos en un gran comedor.

—Serás la primera persona en utilizarlo como se debe— Sonrío.

Me carga en una mano y abre la silla para sentarme en esta.

—¡Hoseok!— Su voz hace temblar un poco la habitación.

Entra un hombre que esta vestido de negro, en sus manos trae una charola que seguro pesa mucho.

Sin alzar la mirada acomoda la comida enfrente mio, me da miedo su perfección, termina y hace una reverencia para después retirarse.

—Disfruta—Jimin se sienta a mi lado sin dejar de mirarme.

La comida no se ve muy apetitosa.

Agarro un tenedor y pruebo la comida, por lo menos sabe bien.

Jimin estira su mano y jala un mechón de mi cabello hasta llevarlo a su nariz para inhalar.

—Eres mi droga pequeño cachorro, una que no tengo pensado dejar.

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