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Para cuando el bentley se estacionó frente a la cabaña en Tadfield, eran al rededor de las tres de la mañana. La joven de oscuros cabellos estaba agotaba, miró por el retrovisor y observó a Aziraphel dormir, eso la alivio, el estrés no era bueno para el bebé.

Abrió la puerta y bajó, cuidando no hacer mucho ruido para no despertar al ángel. Entró a la casa, abriendo con sus llaves, lo primero que vio fue a Newt lavando algunos platos, sonrió agotada y se acerco al mayor, abrazandolo por la espalda.

—Hola, no ingeniero en sistemas... —Le besa la nuca.

—Ana, por fin volviste. —Se aparta para poder verla frente a frente. Le acaricio la mejilla a la ocultista. —¿Donde demonios estuviste? —La chica hace una mueca y se hizo hacia atrás.

— Yo... De eso quería hablar. — Anathema carraspea y quita sus anteojos.— Hay... Alguien en mi auto y... Se quedará a vivir con nosotros por algunos meses.

—¿Que? ¿De qué estás hablando? ¿Vivir con nosotros?

—Se que no es lo más normal, pero necesito que confíes en mi. Esto es muy importante, mas importante de lo que podrías creer...

—Tiene que ver con Agnes. ¿Verdad? —Dice el joven con un tono molesto. — Dijiste que no más, creí que habías dicho que no querías ser más una descendiente. Que podríamos tener una vida normal y ahora, esto.

—Lo siento, Newt. En verdad, se lo que dije, pero... Es solo esta última vez, te lo Suplico. Es mas grande que tu y que yo...

—¿Como el armagedon? — Inquiere con una ceja arqueada.

—Si... Lo lamento. — El joven bufa frustrado.— ¿Puedes ayudarme? Hay una habitación de huéspedes, y...

—Esta bien. —Le da un corto beso. —Iré a prepararla, tu ve por tu invitado.—La joven asiente y sonrie avergonzada. Entendía lo que Newton quería decir, quería una vida normal, un romance, una linda casa quizá en el futuro un matrimonio... Pero con las cosas de agnes y ella dispuesta a seguir con sus demandas todo se complicaba. ¿Como decirle que un ángel preñado estaba bajo su custodia y quizá la ira de un demonio gay caería sobre ella?

Dio un suspiro y tocó suavemente la ventana del auto. El ángel abrió los ojitos lagrimosos.

—Aziraphale, ya llegamos. —Intento decir suavemente, después del pequeño conflicto que habían tenido en el auto todo se había vuelto un poco tenso.

—¿Donde esta Crowley? —Pregunta somnoliento y tallando con el dorso de su mano su ojito derecho.

—Yo... No lo se, solo, baja por favor. Hay una habitación cómoda y tengo galletas de chocolate. —El ángel asiente y baja con cuidado. Anathema vio con ternura como cuidaba su vientre y lo sujetaba cuidadosamente.

Entraron y lo guio al cuarto donde Newton acababa de poner sábanas limpias. Cuando el cazador de brujas vio al ángel, de inmediato lo reconoció.

—¡Tu eres el sujeto que estaba durante el fin del mundo! ¿Y tu amigo el de los lentes? — Aziraphale baja la mirada, quería llorar. Anathema le dio un golpe en el costado a Newton.

—El volverá pronto. Ya veras, se que el no sería capaz de dejarte ni a tu bebé. — Pulsifer se vio bastante confundido con la mencion de un bebé, la ocultista lo mandó a callar con una mirada.— Quizá sea mejor que descanses, hoy fue un día duro. —Toma del brazo a Newt y ambos salen de la habitación dejando solo a Aziraphale.

El ángel afloja el moño de su cuello y se quita su saco color malva. Acaricia la cama, extraña la suavidad de las mantas que había comprado para la cama que compartía con Crowley. Solo se sento en el borde y miro su hinchada barriga.

—Vamos a estar bien... Tu padre regresaré, siempre lo hace. —Murmura, pero más bien lo decía para si mismo. Se recosto en la cama. —Por favor, Crowley... Haz un milagro y vuelve conmigo. Te necesito aquí... —Toma una de las almohadas y la pone a su lado para abrazarla.

Solo solloza hasta quedarse dormido.

*

—Así que... ¿Un ángel?

—Si.

—¿Y está en cinta?

—Precisamente.

—¿De un demonio?

—Eso es lo que dijo Agnes. —Newton bebé un sorbo de su taza de café. — Se que suena a una locura, pero, según Agnes esto podría evitar una futura guerra. No más armagedon, solo paz.

—No creo que funcione de ese modo...

—Newton, entiende, es un hijo nacido de la unión de un ángel y un demonio. ¿Entiendes? Es como en la antigüedad, cuando se buscaba hacer pactos de paz entre reinos, casaban a los príncipes y princesas para unirse.

—Y los hijos eran herederos de ambos, teniendo la sangre de ambas familias....

—No podían declarar la guerra. ¿Ahora entiendes?

—Creo que si... —El chico pone una mano en su frente, todo era demasiado estresante. A nadie se le pasaría algo como eso por la cabeza.

—Por eso... Debo cuidar a ese bebe... —Newton toma la mano de Anathema.

—Te ayudare, no estás sola...

—Gracias, cabo Pulsifer.

Y ambos ríen.

*

Cuando Crowley tomó el autobus, no le importo las miradas de las personas que estaban a bordo, sabía que su vestimenta no era adecuada, estaba manchada de algo negro, que el sabía había sido la sangre del cuerpo de Belzebu, había tierra por toda ella así como en su rostro y su cabello alborotado y despeinado.

Solo, quería encontrar a su ángel.

Cuando abordó, no sabía realmente a dónde iba, ¿dónde demonios estaba esa maldita mujer? ¿A donde había llevado a Aziraphale?

Algo en su cabeza le grito "Tadfield" pero, no sería tan fácil ¿O si? Además, en ese poblado estaba el jodido anti Cristo y no sabía que tan seguro podía ser para su ángel y para él bebé. Aún así, hizo que el conductor se dirigiera a Tadfield.

Solo sostenía la pequeña caja que antes estaba envuelta en papel azul claro, pero que ahora estaba algo chamuscada, el listón se había reducido a un pedazo derretido de tela plastica en la tapa.

Siguió adelante. Nada lo apartaria de su familia

A unexpected miracle. //Innefable Husbands//Mpreg//Where stories live. Discover now