engáñame; jjp; markbeom [reescribiendo]

jaloux;

"celoso, celoso de no poder estar contigo".

-¿Podrías calmarte?- casi pidió su amigo, molesto por la forma en que Mark se estaba quejando, arremedando las frases de YoungJae.

-¿CÓMO CARAJOS PLANEAS QUE ME CALME? VA A SALIR CON YOUNGJAE- frustrado era poco a comparación de cómo se sentía, no podía aceptar el hecho de haber escuchado eso, menos que su profesor lo haya aceptado, era molesto, irritante, quería ir a golpearlo y decirle que tenía más que prohibido acercársele.

-Nadie te dijo que los siguieras- solucionó de manera sencilla su amigo, reduciendo el problema, haciendo que Mark de inmediato se molestara ¿Cómo se atrevía a decirle eso?

-Eres frustrante, mal amigo.

-¿Yo?- cuestionó indignado- si tu haz sido el que me abandona, el mal amigo es otro.

-Ahora resulta, no saques tus traumas aquí.

-No me hagas recordártelo.- reprimió YuGyeom, ya que debía sentarse en los descansos u horas libres solo, sin compañía de su amigo, porque este se la pasaba sobre el maestro, claro y estar enamorado no era malo, lo comprendía, pero había limites, tampoco debía abandonarlo, aunque era consciente que los amigos se olvidan cuando estas con quién te gusta, pero no tenía la culpa y bien podría tenerle consideración un poco, sólo un poco y también pensar en él.

-Bien lo que sea.- le restó importancia comiendo de sus alimentos.

-Li qii sii.- arremedo.- si solo estas aquí porque estas molesto.- reclamó, sabiendo perfectamente que no quería ver a JaeBum ni en pintura, porque seguramente le haría una escena fuera de lugar, o al menos le insinuaría preguntas raras para el tipo de relación que llevaba con él.

-claro que no

-No intentes mentirme, sino porque tienes otro recipiente de comida- señaló el envase que conservaba a su lado intacto.

-Yo...

-Mentiroso.

-como sea, de cualquier modo no quiero que este con YoungJae.- finalizó.

-Pues haciendo esta escena estas dejándole claramente el campo libre.- le sonrió, tomando de la comida de su amigo y metiéndola a su boca, como si se tratase de una victoria.

JaeBum se preguntó porque no había visto a Mark en todo el día, suponiendo que estaba ocupado con algo, o quizá estaba molesto por la última vez que se vieron dónde accidentalmente tiro de su comida encima de él sin querer. Tontamente había esperado por verlo entrar a su salón de clases con un recipiente de comida para él, como se había vuelto costumbre, pero no lo vio, espero un buen rato y después se rindió optando por salir a comprar algo que consumir, para que su estómago no estuviese vació por completo.

Al pasar por las mesas de la cafetería vio al par de chicos hablar y revolotear, Mark parecía divertirse con aquel chico, si no lo mal recordaba parecía que lo había visto un par de veces, sumando las pláticas dónde había sido necesario hacer memoria de quién era ese chico tan alto, a pesar de saber quién era no pudo evitar sentirse de manera extraña, como si le molestase verlo junto a él.

YuGyeom volteó sintiendo la mirada de alguien sobre él, topándose con el maestro de su amigo, sintiendo una extraña sensación por la manera en que lo miraba, como si estuviese molesto de verlo junto con su amigo. Seriamente se preguntó de las conclusiones de Mark, las cuales apuntaban a que su maestro no se fijaba de ninguna forma en él, pero con ello parecía que todas las cosas que Mark le había dicho eran una total mentira.

-¿Pasa algo?- preguntó su amigo notando como la sonrisa de Kim había desaparecido casi de inmediato.

-Yo...- pensó en decirle.- no, nada.- prefirió hacer su propia investigación antes de declarar cualquier cosa.- ¿iras a tus tutorías después de clases?- cuestionó, cambiando de tema.

-Supongo.- se encogió de hombros.

-Bien... así no te espero.

Mark asintió lentamente, notando que parecía ser que YuGyeom estaba en otro mundo.

Al final del día se animó a ir a sus asesorías, encontrándose a JaeBum sentado leyendo algún libro, preguntándose qué clase de cosas lo atraparían en cuanto a lectura.

-Hola...profesor.- saludó el menor.

-Hola.- sonrió el mayor, alejando de su vista su lectura, encontrándose con el chico sonriéndole de igual manera.

Su reducida clase dio inicio, y ambos parecían estar concentrados en el tema, aunque la verdad ninguno de los dos estaban adentrados en el tema que veían.

-Mark...- llamó el profesor.- yo... te espere en la mañana...- soltó sin saber exactamente porque lo había hecho, apretando sus labios, avergonzado por haberlo dicho.

-Ah...yo...- No iba a decirle que estaba molesto por lo de YoungJae, por supuesto que no, eso era una clara señal de que los había espiado, y nadie podía enterarse de ello.- pensé... que estaba ocupado.

-Ah ya veo.- soltó una risa.- la próxima pregúntame.

-Sí, no se preocupe.- sonrió el menor, aliviado de sonar convincente.

-Realmente me gusta pasar el tiempo contigo.- admitió sin pensar sus palabras.- además la comida es deliciosa, debes de decirle a tu madre que amo su comida.

Mark sintió que se estaba quemando completamente por las palabras descuidadas de su maestro, poniendo sus manos sobre sus mejillas y evitando a toda costa que una sonrisa tonta saliera de sus labios. Se movió de inmediato, sacando así la comida que había preparado para él y se la extendió, haciendo que su docente sonriese, completamente feliz.

-Gracias.- dijo tomando el recipiente.

-No es nada.

[...]