[1] Amelia | Número 5; The umbrella academy.

051.

Amelia.

---¡Es Cha-cha, ahí viene!--- siguió gritando Klaus mientras se acercaba a nosotros.

---¡Klaus al suelo!--- alcanzó a gritar Luther.

Número 4 rápidamente se lanzó al suelo cubriendo su cabeza con sus brazos, mientras los hombres enmascarados comenzaron a disparar en su dirección. Nos comenzaban a sobrepasar en número, era nuestro momento de actuar.

Cinco se teletranporto encima de uno de los sujetos, haciendo que girara pero mientras seguía disparando, logrando darle a otros miembros de su equipo, yo salí de mi escondite y logré dejar a 2 hombres sin armas, mientras las tenía en mis manos y comenzaba a disparar tratando de darles a unos cuantos, pero nos seguían ganando en cantidad. 

---¡Estamos acorralados!--- escuché la voz de Diego entre todo el sonido de los disparos.

Hasta que de reojo vi como Klaus comenzaba a levantarse del suelo lentamente.

---¡Klaus, abajo!--- le grité.

Pero al verlo mejor, vi como sus 2 manos desprendían una luz color azul intenso, y de ellas iba saliendo una silueta de una persona, pero...yo lo había visto antes.

---¿Ben?--- susurré en voz baja, solo audible para mí.

Klaus con su poder de comunicarse con los muertos, había conseguido traer a Ben unos momentos, mientras que del cuerpo de número 6 salían tentáculos gigantes que comenzaron a  tomar a algunos de los enmascarados, logrando que dejaran de disparar y matándolos.

Todos estábamos asombrados ante la escena, nunca habíamos visto a Klaus hacer un buen uso de sus poderes, pero lo había conseguido, y en el mejor momento de todos. Pero no todo era tan bueno.

Cha-cha salió de una de las piernas del teatro, con rastros de sangre y heridas en su cuerpo, pero Diego no se inmuto ante eso, ya que al ver a aquella mujer en el lugar no dudo en ningún momento en irse contra ella, claro, aprovechando que los enmascarados estaban "ocupados" en otras cosas.

Los hombres enmascarados eran lanzados contra las paredes gracias a Ben, algunos otros eran partidos a la mitad, a otros les destruía la cabeza y otros cuantos los apretaba tanto al punto de dejarlos muertos. Era un festín de sangre y matanza por donde quiera que lo vieras. 

---Por Dios, es él...es Ben.--- habló Luther, cuando finalmente pudimos reunirnos.

Después de que Ben pudiera acabar con todos, los tentáculos volvieron a el guardándose en su interior, mientras su color azul brillante comenzaba a desaparecer... al igual que él.

---¿¡Quién hace guardia ahora!?--- gritó Klaus en nuestra dirección, en verdad se veía orgulloso de lo que había logrado.

Los 6 nos habíamos acercado a un punto medio entre los pasillos del teatro, viendo como Vanya seguía tocando cada vez más rápido mientras su traje se tornaba de un color blanco al igual que su violín. Los muros del lugar comenzaban a partirse, el teatro estaba a punto de colapsar, y teníamos que detener a número 7 antes de que eso pasara.

---Oh bienvenido, ¿dónde estabas?--- preguntó Luther con sarcasmo cuando finalmente llego Diego con nosotros.

---Honrando una memoria.--- comentó Diego seriamente.

El chico de los cuchillos nos volteó a ver a Cinco y a mí, mientras asentía en nuestra dirección; había escuchado las palabras de Cinco el otro día. Había perdonado la vida de Cha-cha.

---¿Cómo acabamos con esto?--- preguntó Diego mirando la escena. 

---Hay que rodearla, ¿si?--- mencionó Luther.--- Tenemos que aproximarnos de todos los ángulos.

---Suena a que vamos a morir.--- mencionó Klaus.

---Sí, pero uno lograra pasar.--- concordó Cinco.--- Es la única oportunidad que tenemos. 

---¿Lo hacemos?--- fue lo último que preguntó número 1.

Todos nos compartimos miradas, asegurándonos de que todos estuviéramos de acuerdo con el plan suicida, por que es lo que era. 

---De acuerdo, hay que hacerlo.--- mencioné al ver que nadie se negó ante la idea.

---Tú ve a la izquierda.--- le dijo Luther a Diego, mientras este último se iba a tomar lugar.--- Allison y yo iremos a la derecha, Cinco y Klaus al frente, Amelia... tú por detrás.

Todos nos fuimos a nuestros lugares, pero Allison y Luther se quedaron hablando unos segundos más, al parecer la morena no estaba del todo de acuerdo con el plan, pero no teníamos otra opción. Si Vanya lograba terminar su concierto, todo se iría a la mierda. 

Fui por la parte trasera del teatro, escondiéndome entre unos instrumentos que los músicos habían dejado ahí al momento de huir. Vanya comenzaba a emanar una luz demasiado intensa, al punto de llegar a lastimarte en los ojos si la mirabas mucho tiempo, pero ya no había marcha atrás, ya no había tiempo.

---¡Ahora!--- escuchamos el fuerte gritó de Luther.

Luther, Allison y Diego salieron corriendo entre las piernas del teatro, Cinco y Klaus salieron de entre las butacas en dirección de nuestra hermana, pero yo aguardé unos segundos más en salir. 

Vanya había logrado lanzar algo contra ellos, no pudieron ni siquiera tocarla, cuando un intento de tentáculos como lo había hecho Ben anteriormente , pero estos eran más delgados. Número 8 tenía a los 5 colgando en el aire, mientras que parecía que les iba quitando la energía, les iba quitando...la vida.  

Con mi velocidad, me coloqué a espaldas de Vanya sin que ella se diera cuenta ya que parecía muy concentrada con el resto de mis hermanos, y por buena suerte había llevado una de las pistolas de los enmascarados aún conmigo, por lo que estaba apuntándole en la cabeza a número 8.

Mis ojos comenzaban a cristalarse, no quería hacerle daño, después de todo; de lo de Pogo, lo de mamá, lo de la academia...era aún mi hermana después de todo. Los pocos pero buenos recuerdos que había tenido con Vanya llegaron a mi cabeza, todos esos recuerdos de cuando eramos niñas y todos aún vivíamos en la academia, pero no había otra opción.

Pero una idea llego a mi cabeza; si Vanya tenía su poderes gracias a la música y a su violín, quizá... 

Desvíe un poco mi arma de su cabeza, y la acerqué a su oído derecho, disparando sin dirección alguna, y eso había logrado hacer desconcentrar a Vanya y hacer que soltara al resto de nuestros hermanos, pero una luz azul salió de su pecho disparado hacía el cielo, destruyendo un ventanal en el techo a su paso.

Vanya cayó de espaldas, pero logré sostenerla mientras soltaba el arma a algún lado, el resto de mis hermanos se acercaron a nosotras, mientras mantenía a la castaña en mis brazos.

---¿Está viva?--- preguntó Luther en un susurró.

Allison se acercó y coloco su mano en el cuello de Vanya, mientras soltaba un suspiro para después mirarnos a todos y asentir con la cabeza.

---¿Lo está, sí?--- pregunté temerosa.

---Lo hicimos...lo hiciste Amelia.--- murmuró Luther con una sonrisa en su rostro mientras me miraba.

Solté un suspiro de verdadero alivio, y era por 2 razones: no había matado a Vanya, y habíamos conseguido salvar al mundo de su inminente fin. Cinco, quién estaba a mi lado, tomó mi mano mientras la llevaba a su boca y depositaba un pequeño beso ahí.

Él era el que más aliviado estaba de que pudiéramos salvar al mundo. Después de todo él había regresado aquí por eso.