Sin Palabras ||En Físico||

Compañía

* Imagen de Bradley Palik *

- Te estoy dando una orden, señor Tucker - Gritó Conrad.

- En esto no me puede ordenar nada, Reznick - Se defendió Murray aún con mi mochila de la ropa en la mano.

Fliss y yo nos encontrábamos sentadas en uno de los bancos de la comisaría, frente a Conrad y Murray, que discutían quién me llevaría a la universidad. Los gritos han ido aumentando después de diez minutos, pero me mantuve callada pasando la mirada de mi padrino a su jefe, mientras abrazaba mi mochila con los libros de la universidad. Fliss se estaba divirtiendo mucho, en cambio yo, estaba preocupada por la hora. Si falto a clase, mi abuelo se cabreará, aún sin tener yo la culpa.

- Deberías ir a dormir - Dijo Conrad en un suspiro masajeándose la sien; estaba estresado - Yo me encargaré de llevar a Agnes a clase y la veras por la tarde. Tienes tres días libres ¿ vale ? - Concluyó.

- ¿ Tres días libres ? - Frunció el ceño - Estoy en un caso sin resolver todavía, ¿ y me lo quieres quitar ? - Tragué saliva al verlo tan cabreado. Nunca lo había visto así - Mientras yo estoy "descansando" ahí afuera - Apuntó a lo lejos - ...hay muertes, robos y violencia...

- No solo tú trabajas en el cuartel, hay más policías - Dijo obvio - Aparte, ¿ de qué me sirve un policía sin todas sus facultades ? - Ahí tenía razón - Duerme. Descansa durante este día y mañana hablaremos - Me hizo una señal para que me levantará.

- Me iré, porque Brock está en casa sólo y todavía no ha comido - Sonreí al ver su excusa - Suerte en clase, cualquier cosa me llamas - Besó mi frente antes de marcharse hacia su coche.

- ¿ A qué hora entras ? - Preguntó Conrad mirando el reloj de su muñeca mientras lo seguía hasta un coche de policía.

- En diez minutos... - Dije mirando mi móvil antes de subirme al coche. Voy a llegar tarde.

- Habrá que utilizar mi truco... - Lo miré sin entender.

Nos abrochamos los cinturones, arrancó y encendió las luces y la sirena. Conrad aceleró, saltándose todos los semáforos y tomando algún que otro atajo. Me agarré al asiento como pude, mientras que Fliss gritaba emocionada en el asiento de atrás. Ahogué un grito al notar cómo giraba bruscamente el coche para girar en una curva y así entrar en el parking de la universidad, minutos después. Conrad apagó las luces y la sirena, pero vi cómo la mayoría de los alumnos nos miraban con curiosidad.

- Nos han sobrado cuatro minutos - Sonrió satisfecho.

- ¡ Esto ha sido genial, hay que repetirlo ! - Dijo Fliss saliendo del coche.

- Gracias por traerme - Susurré antes de salir con la mochila, colgada al hombro.

- Cuando quieras - Sonrió inclinándose - Vigila a Tucker, no quiero que pise la comisaría en tres días mínimo. Necesita un descanso - Asentí con una pequeña sonrisa.

- Que tengas un buen día - Le deseé.

- Igualmente - Me guiñó el ojo antes de cerrar la puerta de copiloto, arrancar y marcharse.

- ¿ Qué has hecho ? - Preguntó Arielle con cara asustada - No me digas que ahora tendré que visitarte los fines de semana a la cárcel... - Sonreí y negué con la cabeza - Menos mal... Aunque te llevaría un bocadillo todos los días - Ambas nos reímos según nos acercábamos a las escaleras del edificio - Por cierto, hemos reclutado a cuatro chicas - Dijo entusiasmada - ... y no parece que sea por interés, sino porque realmente les gusta - Me explicó.