Absolutamente despreciable

Chapter 15

Disclaimer: Los personajes de Harry Potter no me pertenecen, son propiedad de J.K. Rowling. La historia tampoco me pertenece, esta pertenece a camnz  y esta historia fue beteada por Flame's Child.

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Draco no regresó por un par de días. Hermione no sabía quién fue la pobre alma que quiso escapar, pero quienquiera que fuese logró evitarlos por un tiempo, no pudo evitar preguntarse si ella también podría eludirlos. Conocía bien el mundo muggle y caminaba rápido. Por otra parte, ellos eran bastante buenos para arrastrar a la gente de vuelta y ella estaba segura de que la vida del desgraciado sería un infierno después de eso.

En este momento a ella no le agradaba mucho Draco. El hecho de que todos cazaban a uno de los de su clase era una razón de peso para odiarlo. Pretender que se estaba enamorando se estaba volviendo más difícil y ella no era buena mintiendo.

Él finalmente regresó. No hablaron sobre lo que sucedió, ella no quería saberlo. La primera noche él la llevó a la mansión Nott una antigua estructura con detalles góticos que sin importar el número de chimeneas encendidas carecía de calor.

Hermione intentó sonreír y unirse al grupo, pero no se sentía cómoda. Draco se unió a sus amigos en un juego de bebidas. Hermione se conformó con sentarse y verse bonita.

—No estás haciendo un gran trabajo, aunque aparentes lo contrario —Connie comentó cuando los chicos estuvieron demasiado involucrados en sus propios asuntos o estando ya demasiado ebrios.

—Es realmente difícil —gimió Hermione—. Él es simplemente horrible.

—No puede ser tan malo —Connie dijo—. Él no te golpea, ¿verdad?

—No —Hermione respondió enfurruñada.

—Entonces ve y hazlo —comentó Connie con una brillante sonrisa que era capaz de encantar automáticamente a cualquiera dentro de un radio de diez metros.

—Lo estoy intentando.

—No, eso no es cierto —musitó—. Inténtalo más, sabes que está intrigado por tu resistencia, así que si quieres deshacerte de él, debes deshacerte de su interés.

—Lo sé, lo sé. —Hermione admitió, sabiendo que Connie tenía toda la razón, pero aún no estaba feliz de tener que fingir que le gustaba Malfoy. Odiaba tener que comportarse de esta forma, ¿por qué el mundo no cooperaba con lo que ella quería?

—Ahora —Connie expresó conspirativa—. Escuché de una fuente interesante que existe una creciente presión sobre el Consejo para cambiar la forma en que se trata a los nacidos muggles.

—¿Qué? —Hermione preguntó sorprendida—. ¿Qué quieres decir?

—Bueno, aparentemente, el trato hacia los nacidos de muggles no está bien visto por todos los miembros de la sociedad —Connie continuó.

—Eso nunca había hecho una diferencia antes.

—Bueno, los tiempos están cambiando. Las cosas se están asentando después del gran cambio y ahora, supongo, las personas están más dispuestas a ver la situación de forma práctica.

—¿Cómo sabes esto?

—Estaba hablando con Maisy, compañera del viejo Nott, que es parte del Consejo. Aparentemente, hay una creciente presión para hacer algo. Parece que las buenas personas se ofenden al ver sangre sucia mendigando en las calles u ofreciendo sus cuerpos a los hombres que pasan.