La Poción de Circe (Percico)

XI. ¿Quieres llorar?

Percy se quedó en el pabellón. Salió de su trance cuando sintió unas manos rodearlo.

— ¡Percy! ¡Estás bien!

— A-Annabeth...

— ¡Perdón! Lo siento como me comporté antes... Yo... Bueno, era un hechizo nunca fue mi intención.

Percy sonrió y aceptó el abrazo. Después de todo ese sentimiento que tenía por Annabeth resurgió en su pecho, pero había algo incómodo. Algo malo.

Tomó su mano y plantó un beso en su frente.

1 mes después

Todos en el campamento seguían sorprendidos, Noam y Jason habían vuelto de la muerte con ayuda de Zeus y Hades. A ambos les hicieron honores por su valentía y cruzada entre el Hades y la Tierra. En la cabaña de Noam (Némesis), colgaba una corona de flores rojas que nunca se marchitaban.

Jason volvió con Piper contándole su travesía, ella le propinó un golpe por "haberse dejado matar" y después lo inundó con besos. Noam ganó popularidad y varias chicas de Démeter le hacían ojitos para alguna cita.

¿Y los otros tres mestizos?

Nico había entrado en un estado de shock... De nuevo. Will se ofreció a cuidarlo y prácticamente 24/7 el rubio dormía, comía y respiraba cerca del chico muerte.

Percy volvió a sus actividades normales y su relación con Annabeth. Aquel sentimiento por Nico parecía un recuerdo lejano, de hacía mil años. Aunque nunca más se cruzó con Nico, sabía que algo lo llamaba a hablarle y aclarar todo.

Ese día, Annabeth estudiaba con Percy en su cabaña algunas reglas gramáticas del griego antiguo, Percy entre cada cierto período de tiempo hacía chistes y su novia rubia reía.

— Tengo hambre, iré por algunas fresas. ¿Deseas algo?

— No, estoy bien.

La hija de Atenea besó su mejilla y salió. Percy se quedó mirando los libros leyendo las frases del tema. "Amor".

Una frase captó su atención.

"Επειδή η αγάπη συμβαίνει το ίδιο με τους πολέμους
Μερικοί κερδίζονται και άλλα χάνονταις."

Su mente automáticamente tradujo: 

"Porque en el amor pasa igual que en la guerra
Unas se ganan y otras se pierden"

Se quedó mirando la frase unos segundos más cuando una imagen fugaz apareció en su mente.
Esa noche en que se declaró a Nico, ese brillo en sus ojos cuando pidió su mano para bailar, la forma en que el tiempo se detuvo cuando caminó hacia él decidido a enamorarlo una vez más.