LA ALOCADA IDEA DE MI MADRE

Finalmente el auto se aparcó enfrente de mi casa, Kassie corrió como si su vida dependiese de eso y entró disparada en mi casa para ver a mi hermano.

Ahora solo estábamos el Rios y yo. Solos.

— ¿Tu hermano está muy mal?

Yo fruncí el ceño, ni siquiera sabía que estaba mal hasta hoy de mañana. Soy una pésima hermana.

— No lo sé, pero de la manera que me dijo que estaba parecía estar vomitando hasta las tripas.

Él sonrió y quitó un pote de nutella con un moñito atado.

— ¿Entonces él no puede comer chocolate? — yo negué con la cabeza algo confundida, ¿y eso a que viene? — muy bien, podré darle la nutella que le compré pero no podrá comerla y entonces yo lo haré por él.

Lo miré con una ceja alzada y nos echamos a reír.

Iba a bajarme del coche, pero él puso seguro de niños para que no saliera, ¿y eso a que viene?

— ¿Que haces? ¿Vas a secuestrarme? — Pregunté burlona y algo nerviosa.

— Si será la única forma de que dejes de evitarme, recurriré a eso — Iba a negarme, decirle que no le ignoraba, pero él se apresuró — no me vengas a negar porque ni tu te crees pequeña — Volví a cerrar mi boca y miré hacia mis manos — Quiero saber porque lo haces,  ¿acaso hice algo? ¿Te molestó algo que hice? ¿Ya no me quieres?

Alcé mi vista para mirarlo y él me miraba con los ojos cristalizados, él estaba demasiado destrozado y me sentí muy mal.

No aguanté más y le abracé fuertemente, el ojiverde se sorprendió pero correspondió enseguida. Nos quedamos así por un pequeño tiempo y me separé para mirarlo con una sonrisa.

— No digas tonterías Rios, yo solo estoy muy ocupada intentando acostumbrarme otra vez, todo está diferente — Le pellizco la mejilla — Y claro que te quiero, eres como mi hermano.

Él me sonrió a medias y quitó el seguro de la puerta.

— Creo que me he vuelto muy cursi — se ríe él y luego pasa una mano por su cabellera — es que extraño cuando solo éramos tu y yo, el idiota del Playboy y la loca de las series.

Nos sonreímos y yo asentí. También extraño esos tiempos, fueron muy pocos pero me valió la pena cada segundo.

— Antes que empecemos a llorar como los actores de la rosa de Guadalupe, vamos a ver a mi hermano, él te necesita.

Manu asiente riéndose y nos bajamos del auto, entramos en la casa y lo primero que vi fue a mi madre salía corriendo hacia la cocina junto a Chris. Ya se me había vuelto algo normal verlos así, siempre lo hacían cuando ya era tiempo de quitar su receta del horno y ver como ha salido. Se pasaban minutos mirando a la comida con asombro.

Era demasiado raro.

— ¿y quién es ese?

— El nuevo novio de mamá, seguro la comida ya está lista — Caminamos rumbo a la cocina junto a donde los dos tortolitos estaban.

Ellos estaban enfrente a la mesa y encima de ella tenía una torta salada recién horneada. Tenía buena pinta.

Mi madre nos mira con asombro y corre a abrazar al ojiverde que estaba a mi lado.

— Si no es mi hijo adoptado — Ese era el apodo de Manu, ya que antes prácticamente vivía aquí — Tanto tiempo sin vernos, ya era de verlos juntos otra vez, ¿estaban peleados o algo así?

EL IDIOTA DEL MEJOR AMIGO DE MI HERMANO #2 [SI#2]Where stories live. Discover now