Capítulo 4: Todo hijo es igual al padre

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- Y con este llanto en mi interior, deseo verte en mi realidad. En mis sueños no te quiero más, por que sólo me causas un inmenso vacío en mi corazón...- Finalizó aquella lectura el norteño, viendo por fin al adulto frente a él.

- ¿Arico escribió todo eso? - Preguntó sin creerlo. - ¿Y todito en inglés? - Recibió otra afirmación del más alto.

- México, no sólo se muestra así en mi clase, Japón y Chile me han comentado que en sus clases pasa de igual manera - Le informaba Canadá a su amor platónico e imposible.

- ¿También en artística y prevención? Chales... - Se tapó el rostro con su mano, Arico estaba dando más señales de saber de su otro padre y no lo podría ocultar por mucho tiempo más. - ¿Puedes llamarlos a los dos? Que me muestren... - Suspiró.

Canadá salió unos momentos para buscar a Japón, maestro de arte y Chile, el maestro de prevención contra desastres naturales. Los tres volvieron, los latinos se saludaron y comenzaron a charlar.

- Sin rodeos, suelten - Pidió con prisas, quería tener toda la información ya mismo para ver cómo le hablaría al niño.

- México-kun, Arico a dibujado varias veces una familia, y reconoce, no sabría decirte cómo, a Buenos Aires - Apoyó una gran carpeta colorida en el escritorio, para abrirla y sacar dibujos hechos por los niños. Los de Arico se los entregó y comenzó a explicar algunas situaciones. - En esa me ha hablado de alguien que nunca vió, pero hablaba muy "raro" - México miró el dibujo, era un muy raro Buenos Aires.

- Ay virgencita... - Miró el siguiente dibujo y fue lo que lo asustó e hizo tensarse. - No puede... Él no - Miró a Japón, estaba no tan serio.

- Me dijo que lo vió en un sueño, que estaba llorando y él lo abrazó - Los señaló en el dibujo, claramente el mayor lloraba.

- ¿Llorando?.. - Volvió a mirar el dibujo, como analizandolo. La única vez que Arico pudo "ver" a su padre era apenas nacido. - La última vez que ví llorar a Argie fue cuando Arico nació... Él era todo un bebito, no podría recordarlo - Continuó mirando los dibujos, tratando de despejarse. - ¿La gorda? - Vió algo escrito y lo leyó en voz alta. - "Papá y señor Unidos pelearon otra vez pero papá es muy muy fuerte y lo golpeó! No sabía que el señor Unidos tenga ojos tan celestes como el cielo de... De dónde?" - Miró a los otros tres, volvió al dibujo y así repetidas veces.

- Weon, queri' calmarte? No está mal que el niño sepa de Arge - Chile cruzó sus brazos.

- ¿Y en tu clase qué? - Preguntó un poco desesperado el mexicano.

- Na' más utiliza demasiado los acontecimientos que repercuten en territorio argentino por mis terremotos - Lo dijo como si no fuera la gran cosa, cosa que era así pero Mex era muy nervioso con su hijo.

Con tanto en qué pensar se le cruzó algo importantísimo, una materia bastante peligrosa.- ¿Quién les enseña historia? - Dejó los dibujos en la mesa, haciendo que Japón vuelva a guardarlos.

- Germany, él la enseña, pero no a ellos, aún no entran para aprender del mundo - Le respondió Canadá, queriendo calmar al tricolor.

Claramente México no hizo caso a nada más, salió del aula con velocidad y muchas emociones en el que salían a flote. Sabía dónde estaría Alemania en esos momentos, por lo que eso era lo único que pensaba mientras ignoraba gritos.

[Inserte reloj]

- Entonces, no le dijiste nada? - Alemania negó en silencio. - ¿Nadita nadita? - Alemania suspiró ante la insistencia del levemente más alto.

Amor a la... [Countryhumans]Where stories live. Discover now