Capítulo 35: El primer problema

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- ¡¿QUÉ ESTÁN CON ARICO DÓNDE?! - Gritó del otro lado de la línea, realmente alterado.

- En la comisaría - Respondió un poco nerviosa la ciudad.

- ¡¿Y ARICO ESTÁ BIEN?! - Volvió a gritar, y se oía un movimiento de fondo, parecía tomar cosas.

- Está con un poli fuera, le dijimos que no hizo nada, asi que to' piola - Decía calmado, pero sabía lo que se venía.

- VOY YA MISMO PARA ALLÁ Y EN CASA VAN A VER USTEDES DOS - Y luego de esa amenaza colgó.

Por otra parte, Arico esperaba sentado de forma firme, siendo visto de vez en cuando por uno de los hombres de guardia aquella noche.

- No creí que esto fuera así... Quiero ir a casa - Se dijo a si mismo, temeroso por el lugar, pues nunca se había metido en problemas al estar en México.

Volvamos varias horas antes, cuando apenas llegaron al país albiceleste.

[Reloj en reversa]

- ¿Nervioso? - Preguntó Argentina a su hijo, quien se colocaba su mochila con ropa en la espalda.

Él sólo asintió.
Argentina le tomó la mano, y los 4 (ellos + Tucumán y Buenos Aires, quienes estaban a cargo del argentino por su situación) bajaron del avión privado que los había devuelto a sus tierras.

- Llega a haber desorden en la casa y el primero al que le voy a dar un golpe es a tu hijo Bai - Habló el más bajo, subiendo el bolso con ropa al coche donde viajarían.

- Mientras me dejes a Córdoba todo bien - Respondió, cerrando el maletero.

- ¿Pegar? - Preguntó Arico, sentado atrás con su padre.

- Seh... - Comenzó a sobar su nuca algo nervioso. - CABA y Córdoba son los más... "Desmadrosos" - Si quería que su hijo entienda lo que dice, debía hablar como México.

- Ohh, como CDMX! - Dijo sonriente, recordando al Estado más desastroso.

- Peor - Respondió, sonriendo al ver los dientitos de su querido hijo. - DALE BAIRES ME CAGO DE HAMBRE - Gritó hacia afuera, donde la capital terminaba de hablar con unos guardias.

- Calmate ura, Cata y Rioja están cocinando - Le habló Tucumán, quien ya se había abrochado el cinto. - Ariquito, te gusta la carne? O saliste vegetariano? - Preguntó volteando a ver la cara del menor.

- ¡Pues cómo no! - Dijo alegremente. - ¡Sonora y Nuevo León hacen las mejores carnes asadas del mundo! - Eso hizo cambiar un poco la cara a los sureños, pero ya tenían una buena excusa para que un domingo se haga un asado como Dios manda.

- Consejito - Habló Bs. As. entrando al auto y acomodandose. - Ni mu en la casa sobre eso, que hay todavía una competencia argento-mexicana con respecto a la carne - Hablaba mientras ya había comenzado a avanzar para salir del estacionamiento.

- Oh... - Quedó en silencio, pues se sintió algo amenazado.

- Che, no te preocupes Arico, acá son todos re buena onda - Animó Argentina al ver la expresión de su hijo. - Mientras te cuento, el que maneja ya seguro lo conocés, Buenos Aires, mi capital - El nombrado alzó levemente la mano del volante, pues veía el momento para entrar en la calle. - Es parte del territorio desde antes que yo "nazca" - Dijo sonriente.

Amor a la... [Countryhumans]Where stories live. Discover now