Nuestro compromiso [WangXian]♡

Miedo profundo

Wei Ying se estiró en la cama siendo iluminado con el sol. Se levantó de golpe, estaba ansioso por comenzar el día.

A los pocos pasos dados en su dormitorio recordó el día que era. 

Se cumplían dos años desde que había contraído matrimonio con su amado Lan Zhan, no pudo evitar recordar lo del contrato de los dos años, luego de que esto pasaran podrían separarse, pero dando un suspiro desechó aquellos pensamientos.

Era inmensamente feliz junto a Lan Zhan, siendo mimado por él y disfrutando cada momento juntos.

Salió de la ducha y bajó algo extrañado de no sentir ruido alguno por varios minutos ya.

Entró a la cocina y tampoco halló a nadie. Sin querer una ráfaga de terror se apoderó de él.

Se sentó en el comedor de diario y un pequeño papel llamó su atención, tomándolo leyó su contenido.

"Wei Ying dejé el desayuno listo. Tengo que hacer algo urgente en la empresa, me llevaré a A-Yuan al jardín. Nos vemos esta tarde. Te ama Lan Zhan"

Riendo, suspiró con evidente alivio y se dispuso a desayunar.

Terminando de desayunar y antes de subir a su auto para ir a la universidad intentó llamar a Lan Zhan, necesitaba escuchar su voz, pero no pudo lograr comunicarse. Haciendo un puchero abrió la puerta de su auto desde donde cayó un sobre.

Le pareció extraño, pero pensó que quizás era uno de los tantos detalles que Lan Zhan le daría por su aniversario. Lo tomó sin mayor preocupación y se subió al auto para leer su contenido.

Sacó lo que se suponía era la carta y notó que tenía letras de diarios, pasando por su mente la idea que fuera una carta de amenaza como la que salían en las películas antiguas rió divertido y comenzó a leerla, pero a medida de su vista avanzaba a través de aquellas deformadas letras su rostro se fue tornando a uno mas deformado con una mueca de pavor.

"Tu eres el culpable de la muerte de Wen Chao y te haré pagar de la manera mas dolorosa posible, cuida bien de los que amas por que quizás ya no los veas mas"

Volvió a leer la carta repasando cada letra. En pocas palabras le hicieron sentirse a la orilla de un precipicio, volvió a llamar a Lan Zhan. 

Estaba temblando y muy asustado, pero se calmó a si mismo. Buscó alguna pista en la carta y el sobre, pero no había nada mas que las letras . 

Decidió no tomar las cosas de manera apresurada, quizás solo había sido una mala broma de Jiang Cheng y una muy mala, pensó para si mismo con mucho coraje.

Todo el primer periodo de clases estuvo muy distraído, así que decidió que no asistiría al segundo periodo, en cambio decidió ir a la oficina de Lan Zhan, necesitaba de sus palabras para calmarse realmente.

Nuevamente en su auto antes de partir tomó la carta leyéndola convenciéndose a si mismo que no tenía un real valor.

Llamó nuevamente a Lan Zhan sin obtener respuestas, supuso que estaría en reuniones de su empresa, cada cierto tiempo pasaba así. Preocupado también hizo una videollamada hacia el jardín donde estaba su pequeño A-Yuan, para su tranquilidad contestaron a su llamada y pudo estar hablando con su pequeño hijo por casi veinte minutos. Mas tranquilo se dirigió hacia las oficinas de la familia Lan.

Para su suerte no se topó con el tío Qiren, yendo rápidamente hacia la recepción de la oficina de su esposo.

La mujer lo miró con cara de sorpresa, asegurando inmediatamente que Lan Zhan no había asistido en todo el día a la oficina. 

Algo asustado le volvió a llamar desde allí preguntándose que otros asuntos podría estar arreglando Lan Zhan y porque no le había dicho que no iría a la oficina.

Se retiró de allí y se fue a un parque cercano. Necesitaba tomar aire y calmarse. 

Llamó a su shijie para preguntar por Lan Zhan, pero ella ni el pavo contestaron.

Ya estaba desesperado, el miedo le atacaba profundamente. Decidió que lo único que podría calmarle en ese momento sería la tierna sonrisa de tu tierno hijo.

Llegó al jardín por su pequeño casi en desesperación pasando por alto la presencia de las madres con quien conversaba regularmente, se dirigió hacia la cuidadora de A-Yuan siendo sorprendido con la noticia que a los pocos minutos de terminar la videollamada que había echo al jardín cerca de medio día, había llegado Lan Zhan por su pequeño hijo.

Volvió a su auto ya con el terror corriendo por sus venas preguntándose una y otra vez donde estaría su esposo, luego de haber llamado a la mujer que hacia el aseo en casa confirmando que no estaban aun allí.

Volvió a insistir con la llamada sin obtener respuesta. Ya estaba bastante furioso cuando un mensaje llegó a su móvil con una dirección y una orden de Lan Zhan que debía ir a ese lugar.

"O claro que voy a ir Lan Zhan y tendrás mucho explicar" arrancó su automóvil bastante molesto llegando a los pocos minutos a lo que parecía un salón de eventos.

A la entrada lo recibió su shijie que tenía un hermoso vestido puesto y sonriendo lo recibió, tomándolo del brazo sin darle una sola palabra lo llevó a lo que parecía un camerino, dándole la orden de colocarse lo que había allí. 

Ya estaba mas confundido de enojado así que decidió hacer caso sin mucho animo, dentro de un pequeño ropero encontró un traje negro con pequeño detalle en rojo brillante. Era muy elegante y como lo había sospechado estaba echo a su medida.

Salió del camerino y afuera ya no estaba su shijie sino Jiang Cheng, intentó pedirle una explicación de porque no le había contestado el teléfono en todo el día, pero este tampoco lo tomó mucho en cuenta y casi lo arrastró hacia un salón pequeño. 

Se quedó solo por unos segundos. Mientras murmuraba molesto para si mismo suspirando de manera desesperada, le interrumpió la llegada de Lan Zhan que estaba vestido con un traje blanco con pequeños motivos de nubes dibujados en los bordes de sus mangas y la solapa de la parte de arriba. 

Se acercó criticándolo por el susto que lo había echo pasar aquel día, pero apenas fue rodeado por aquello fuertes brazos comenzó a llorar argumentando que había sentido mucho miedo.

Lan Zhan se disculpó sinceramente muchas veces hasta que Wei WuXian se calmó, se alejó  mirándolo a los ojos, para al fin desearle un feliz aniversario a lo que Lan Zhan le respondió con un apasionado beso y luego invitándolo a un lugar.

Llegaron de la mano a un salón saliendo directamente sobre un escenario adornado, al ser percibidos por los invitados fueron recibidos con aplausos.

Lan Zhan había estado preparando aquella celebración por varios meses. Haciendo una pequeña ceremonia volvieron a renovar sus votos, asegurando por parte de ambos que querían seguir estando juntos por el resto de sus vidas.

Al ver a todos sus seres queridos allí Wei Ying dejó de lado sus pensamientos sobre la carta de amenaza y se dedicó a disfrutar de la fiesta estando con su amado Lan Zhan a un lado todo el tiempo, como le encantaba estarlo.