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Capítulo once.

Lucía;

- Me importa una mierda lo que me tengas que decir. Dejame en paz. - Un gemido salió de mi boca, sin querer. No podía contener las lágrimas ni un segundo más.

- Bue, ¿quién iba a decir que semejante chetita iba a tener ese vocabulario? - Valentín me miró fijo.

- Realmente, sos infumable. - Quería llorar, ahora más que nunca. Un sollozo salió de mis labios. - Sos repugnante. - Una lágrima se desprendió de mis ojos. - Te odio.

- No llores. - Dijo él, como si diciendo eso mágicamente iba a dejar de llorar.

- Te odio muchísimo. - Susurré entre lágrimas y rabia. Bronca.

- No me gusta que llores. - Esas palabras salieron tan fugazmente que apenas pude escucharlas. Lo miré a los ojos, ahora los míos estaban ligeramente irritados por aguantarme el mar de lágrimas que estaba a punto de soltar. Él también lo hizo.

- Soltame. Por favor. - Le pedí con suavidad, alejandome de él.

- Ta bien.. - Me soltó suavemente. Respiré hondo, liberandome. Intenté irme sin decirle nada más. Pero Valentín volvió a girarme, haciendo que mi pecho chocara contra el suyo. - No quise hacerte llorar, a veces no sé lo que digo.

- Ya está. - Le dije restandole importancia. - Olvidate.

- Olvidate vos primero. - Él sonrió, y no pude evitar notar la hilera de dientes blancos, dejándome ver su terrible sonrisa. - ¿Me dejas ducharme?, ¿o querés venir conmigo?

- No. - La vi salir. Menos enojada que antes, lo cual eso me hizo sonreír a medias. Lucía.. me dije a mi mismo. Hay algo que tenía claro, y es que jamás le iba a decir que estando en pedo le había confesado que yo le gustaba. Y ahora, yo también lo sentía: me gustas y cada día más.

Al otro día...


"Llevo acá exactamente cuatro días, y sigo haciéndome la misma pregunta. ¿Cuándo es que me va a dejar libre? No lo sé, no lo sabría, sino no estaría escribiendo esto por si alguien alguna vez me encuentra, y quizá quiera saber sobre las últimas cosas que hice en mis últimos días de vida, por si muero, por si él me quita la vida. Qué sé yo. Ya no sé qué esperar. ¿Qué harías vos si estuvieras acá? En mi lugar. Secuestrada."

Dejé el lápiz y el papel abajo de las sábanas, para luego regresar a la pequeña sala. Solamente tenía ganas de expresarme un poco, no le veía sentido a las cosas. Valentín llevaba más de dos horas en la calle, otra vez había ido a sacar plata del banco. Mi plata. Al paso que va, supongo que ya ha terminado de retirar toda la plata que tenía. Me chupaba un huevo, lo único que quería era irme de este lugar. Dejarlo, no volver a verlo nunca más si era posible. Olvidarme de todo lo que estaba viviendo... pero... entonces, una leve oleada de sentimientos se abrió en mi estómago. ¿De verdad quería olvidarme de todo esto? Sí. Quería. ¿Y por qué mierda estoy dudando?, ¿qué motivo tengo como para estar dudando semejante cosa? NO, LUCÍA. Me dije a mi misma cerrando los ojos. Me conocía perfectamente, y conocía cada síntoma que sentía cuando empezaba a...

Valentín abrió la puerta del departamento, cerrandola de inmediato. Se detuvo por un momento antes de voltear a verme. Parecía que no tenía ganas de hablar, lo supe cuando lo vi darse vuelta, con la mandíbula hinchada y ligeramente morada. Golpeado. Mi corazón se contrajo al verlo así, mis ojos lo observaron asustados, me dolía, y no sabía por qué me dolía verlo así.

- Valen.. - intenté hablar pero me interrumpió al toque.

- Dejame, estoy bien.

- ¿Qué te hicieron? - Me acerqué de inmediato hacia él, antes, agarré lo que tenía a mano, una servilleta tendida sobre la mesa. Intenté pasarla por su mentón, él cerró los ojos negando con la cabeza.

- Estoy bien te dije. - Susurró.

- No necesitas hacerte el fuerte conmigo. - Le dije con una sonrisa en mis labios, intentando tranquilizarlo, él me devolvió la sonrisa. Fui hacia la cocina a humedecer la servilleta con agua y volví hacia él. - Tenes muy hinchado. - Dije intentando curarlo.

- He estado peor. - Dice irónico. - ¿Qué te hicieron? - Pregunto preocupada.

- ¿Posta te importa? - Dice sobrador. - No quieras pelear conmigo. Quiero estar bien, sí? - Digo tratando de darle la mayor confianza que puedo para que me cuente qué fue lo que pasó.

- Lo digo en serio, ¿te importa saber? - Sentí sus manos rozar mi mentón, un roce que estaba sintiendo en lo más profundo, mojé mis labios, muy cerca de los de ella, de nuevo... maldito sentimiento. Pero qué bien se sentía poder olerlos a poca distancia.

- Sí. - Me respondió ella. Sincera, aún sabiendo el rencor que me tiene. Le importo, como también ella me importa a mi.

- Bueno, me pegaron. - Digo largando una sonrisita, esperando una mala reacción de ella, ya que le estaba tomando el pelo. Pero en lugar de eso recibí otra pregunta. - ¿Quiénes?

- Un hijo de puta. - Lucía me miró mal. Terminó de pasar la servilleta por mi mentón. - Pero ese hijo de puta te dejó mal. - Dijo preocupada.

- Ellos quedaron peor. - Dije ganador. Mentira. - ¿Quién fue? - Preguntó posta, preocupada. Puso sus brazos sobre su fina cintura, pareciendo una jarrita, viéndose realmente graciosa. El enorme buzo que le había comprado le quedaba hasta un poco más arriba de las rodillas, por lo que no usaba pantalón

- Un pelotudo, sí? Uno de los que se llevó a una amiga tuya..

Un escalofrío me invadió el cuerpo al recordar esa escena, erizandome la piel por completo.

- No creo que quieras escuchar esto. - Valentín caminó hasta la habitación, alejandose de mi. - Decime. - Dije porfiada.

- Sos tan terca. - Se quejó él. - No me importa. - Dije segura.

- ¿Querés escuchar la verdad? - Me preguntó. Frío. Me saca de quicio, aún así, asenti. - Mataron a tres de tus amigas. - Lo dijo sin escrúpulos. Un silencio incómodo se interpuso entre los dos. Mis ojos se humedecieron por completo, sólo me faltaba cerrarlos para completar el llanto. Mi cuerpo se debilitó, sólo se sostenía con la mirada de Valentin. Me iba a matar. Sí. Solamente faltaba yo. - Y... ¿sabes que más? - me preguntó. - Faltas vos y otra más. - Mis lágrimas se hicieron interminables. Otra vez asustada. Mis manos empezaron a sudar. Mis ojos se hicieron chiquitos. - La diferencia es que yo no pienso hacerte nada.


💥💥💥

Bueno tanto la pidieron aca está 😭 siento que ss una mierds así que x favor díganme x comentarios que les parece.
Y x si les interesa, la 2da temp de queridisimo hermanastro está disponible ahre
Gracias x leer lxs amo 🎀💖💞

Secuestrada.- WosWhere stories live. Discover now