Capítulo quince.
Lucía;
Me hundí en mi cuerpo. Contraje la respiración, y apenas lograba dar señales de vida. Me estaba cojiendo con tanta intensidad que hasta estaba a punto de soltar lágrimas.
- Ah.. - Soltó un pequeño suspiro. Me separé de ella para poder mirarla, para poder gozar de este enorme privilegio. Verla así... excitada. Jadeante. Transpirando lujuria y gimiendo para mi, sólo para mi. - Ah... sí. - Murmuró ella ahora cerrando los ojos. Me apretó con sus brazos por la espalda, luego saqué mi pija de su interior, rozando lentamente su entrada y labios. - Hacelo de nuevo, por favor. - Me pidió ahogada, casi rogando, con la voz ronca haciéndome estremecer y poniendo mi pija más dura de lo que estaba.
- ¿Sí? - Respondí. Y la verdad es que tampoco aguantaría tanto tiempo sin metersela. Sin sentir ese delicioso apretón. Subí y bajé mis caderas para complacer a Lucía de nuevo.
- ¡Ahhh! Sí... así... - Grité y cerré mis ojos con fuerza disfrutando de cada embestida que Valentín me daba. Estaba en el paraíso. Iba a acabar en cualquier momento si me seguía cojiendo así, y eso era lo que más me gustaba.
- ¿Te gusta? - Me preguntó él, mientras que yo movía mis caderas a la par suya, escuchando como nuestros cuerpos chocaban.
- Sí... me encanta, me encanta. - Dijo ella poseída por sus palabras. Entonces decidí hacerla gritar aún más. Mis brazos se tensaron cuando volví a levantar mi cadera. - Sos hermosa. - Murmuré.
《Hermosa y toda para mi.》- Pensé.
Volví a embestirla con fuerza, mientras ella sólo me apretaba por la espalda con la esperanza de no demostrarme que en realidad le encantaba cómo le estaba dando. Pero fue imposible.
- ¡Seguí... más! - Me ordenó. Yo Sonreí ligeramente. Una bonita sonrisa que habría hecho que cualquier mujer se calentara en ese instante. El movimiento de caderas se hizo más continuo. Lucía me apretaba fuerte por la espalda para que no me separe de ella y yo iba a acabar en cualquier momento. Sus gemidos y gritos me enloquecian, cada vez más fuertes, más finos, más excitantes. Hacían que cada movimiento, cada penetración, cada vez que yo la bombeaba con tanta fuerza y lujuria.. nunca fueran suficientes. Necesitaba más. Llenarla por completo. Haciéndome acabar, y que por supuesto iba a acordarme de esto siempre.
Una vez más volvió a aplastarme, enterrando toda su pija dentro mío.
- Valen.. - Lo llamé arqueando la espalda. Él se inclinó para plantar un beso en mi cuello. - Decime. - Susurró él, sacando su pija envuelta de los fluidos de ambos.
- Esto es increíble. - Admití, ahora intentando abrir los ojos, recuperando la respiración después de todas esas fuertes embestidas. - La verdad que sí. - Me miró a los ojos. Lucía miraba el umbral de la puerta sigilosamente. Se había quedado callada. Sólo una pequeña respiración, ahora ligera, se escuchaba en medio de la noche. Lo habíamos hecho. Habíamos cojido como tanto había querido desde el primer momento en que la vi. Sus ojos brillaban, empezaban a hacerse pesados, era cierto, después de tan tremendo polvo, te agarraba alto sueño. - ¿Te imaginaste esto alguna vez? - Pregunté deshaciendome del silencio que nos invadía. - ¿Qué? - Pregunté dudosa, sin entender a lo que se refería. - Esto... cojer con tu secuestrador. - Dije soltando una pequeña risita.
- Nunca. - Dijo ella ahora cerrando los ojos, la había dejado deshecha, y ni siquiera habíamos llegado al orgasmo. Sí... también era verdad. Después de cojer solo te quedaba dormir.
[Pero... parecía que para él no había sido un simple polvo.]
💥💥💥
2/????? Bueee quien pudiera cojer así con wos ahre
Wacho alta bronca me da que x ejemplo lean 15 personas y voten 6. SEIS. Y LAS OTRAS????que les cuesta apretar la estrellita, no se la van a cobrar eh.
😭😭😭 gracias a las personas que leen Y VOTAN, esas se llevan un lugarcito en mi corazón y la maratón es para ustedes 💞
