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━DESCONOCIDO━
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──¿Seguirá vivo?
Pregunto una pequeña niña de cabellos largos albinos, sus hermosos ojos azules miraban con preocupación aquel chico rubio que ella y su amigo lo encontraron inconsciente.
──No lo creo. ─un cerdito se acerco a el pequeño rubio.
Este abrió sus ojos mirando la nariz del cerdo, con su cabeza lo golpeo haciendo que el cerdito retroceda de dolor.
──¡Hawk! ─la pequeña fue a su ayuda. ──¿Te duele mucho Hawk? ─preguntó sobando su cabeza. ──¿Qué rayos le haces a Hawk? ─le preguntó enojada a el rubio.
──¿La espada? ─ignoro a la niña llevando su mano directo a la espada con empuñadura de dragón que se situaba en su espalda y otra que tenía en la cintura. ──Esta rota y el arma sagrada, muy bien. ─dijo a si mismo guardando ambas espadas. ──¿Esta es una cueva? ¿Por que estoy acá? ─preguntó mirando a su alrededor.
──Te encontramos en la calle tirado y te trajimos aquí. ¿Por que no nos das las gracias al menos? ─le dijo el cerdito.
──Gracias, cerdo. ─miro a la pequeña albina quien lo miraba. ──Tú... ─la pequeña se acerco colocando su mano en la frente.
──No tienes fiebre. ─la retiro, el rubio la miraba sin formular palabras ya que era casí idéntica a una chica que conocía. ──¿No te duele nada? ─preguntó tiernamente.
──N-no, me siento bien. ¿Cómo te llamas? ─la pequeña sonrió.
──Me llamo Amaris y el Hawk. ─señalo a el cerdo.
El rubio quedo sorprendido más encima no dijo nada al respecto y trato de actuar como si fuera la primera vez la miraba.
──¿Y estoy en liones? ─preguntó el rubio.
──¿Te estabas dirigiendo a liones? ─pregunto la pequeña. ──¡Yo siempre he querido ir ahí! ─dijo con un brillo en los ojos que hacia sonreí a el rubio, por alguna razón tenía la necesidad de abrazarla pero se contivo. ──Debe de haber miles de millas hacia el norte desde acá.
──Es decir, que estoy cerca de Camelot. ─dijo el chico mirando la entrada a la cueva.
──Rayos, recogimos algo raro. ─se dijo a si mismo el pequeño cerdito.
──¿Eres Wandol? ─pregunto a el cerdo al recordar a cierto pajaro que antes tenía.
──¿Ah? Soy Hawk, Amaris te lo había dicho antes. Y que raro nombre es Wandol, ¿quien era?
──Un viejo compañero que tuve. ─se levanto mirando de brazos cruzados a el cerdo y a la pequeña. ──Muy bien, ¿eres un cerdo y te llamas Hawk? ¿Tu eres una niña y te llamas Amaris? No volaran.
