Tsukino Ruri no puede aceptar los finales dados por la escritora Koyoharu Gotouge, expresando siempre su descontento. Un día normal de feria, un idiota grosero, todo parece estar bien más terminan envueltos en un gran accidente
El despertar en un m...
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Hasta ahora se había mantenido muy feliz al pasar tiempo con Kyojuro como su novio y el pequeño Senjuro que parecía muy emocionado porque ellos dieran el siguiente paso, sin embargo ahora la preocupación y confusión se veían reflejados en sus verdes ojos y aunque intentaba pensar claro había algo que no podía negar y es que desde un comienzo Tsuyoshi había sido grosero, más nunca había mentido
Aún así no se fiaba de las palabras que había dicho el joven, sin embargo las emociones de ira y tristeza que se dibujaban en su rostro no parecían ser falsas, pero no tenía ningún sentido, ya que ellos pertenecían a otro mundo, entonces ¿cómo Rengoku podría estar involucrado? ¿Acaso su hermana había venido también a este mundo? Ahora que hacia memoria, Kyojuro parecía conocerle
"No, Kyojuro nunca dejaría morir a nadie"
— No —musitó Ruri seria
— ¿No qué? —le cuestionó Tsuyoshi
— No puedo creer en tus palabras —respondió la peliverde con el ceño fruncido— solo escúchate, es imposible que Kyojuro tenga algo que ver con la muerte de tu hermana
— Me pregunto quien fue la que siempre insistió en que este mundo no es solo papel y tinta —soltó el joven sarcástico— no me importa si crees en mi o no, Ruri —negó— no es como creyendo en mi tuvieras el poder de hacer algo para revertirlo —añadió antes de dar media vuelta dispuesto a irse
— ¡Espera, Tsuyoshi! —le pidió Ruri pues no podía dejarlo ir solo así— soy consciente de que no eres una persona que diga mentiras, ya que desde el primer momento me has demostrado que eres brutalmente honesto y por la expresión en tu rostro sé que debió ser difícil —siguió la joven tratando de comprenderle— pero no puedo creerte en esto, no tiene sentido. Kyojuro jamás dejaría morir a alguien mientras estuviera vivo y nunca antes mencionaste que estabas acompañado ese día...
— ¡Ya cállate! —le cortó Tsuyoshi enfrentando a la cazadora— es claro que no puedes saberlo, ni mucho menos comprenderle —le recordó antes de tomar su muñeca con fuerza— ¡realmente no tienes idea de nada! —añadió mientras bajaba su mirada hacia el suelo en un intento de calmar sus emociones, más el agarre de su mano no aflojaba ni un poco
— Tsuyoshi, me estás lastimando —se quejó la joven, pero no hubo ningún cambio— suéltame ahora, ya que no quiero verme en la necesidad de noquearte
— Eso no será necesario —intervino esta vez Kyojuro quitando la mano del joven rápidamente— ¡no está bien hacerle eso a una señorita, Tsuyoshi!
— Tsk, no te metas —le cortó seco antes de quitarse su mano bruscamente— no tienes nada que ver aquí, Rengoku
— Claro que tengo que ver, ¡Ruri es mi novia y si ella se encuentra en una situación complicada, por supuesto que iré a ayudarla! —soltó serio.
