Tsukino Ruri no puede aceptar los finales dados por la escritora Koyoharu Gotouge, expresando siempre su descontento. Un día normal de feria, un idiota grosero, todo parece estar bien más terminan envueltos en un gran accidente
El despertar en un m...
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Entre el constante fuego de la explosión una figura humana sobresalía, Kibutsuji Muzan siendo quemado debido al fuego, pues Ubuyashiki aquel con la sonrisa de Buda junto a su esposa e hijas mayores se hicieron explotar, añadiendo "Tetsubishi" para hacerlo aún más letal logrando así retrasar su regeneración, ahora Muzan lo entendía, ellos habían sido un señuelo pues sentía la presencia de los pilares a lo lejos, su objetivo era emboscarlo.
— ¡Ubuyashiki! —vociferó
Si el pensaba que eso sería todo, pronto una técnica de sangre en forma de púas atravesó su cuerpo inmovilizándolo, tomando así la decisión de simplemente absorberlas, sin embargo para su grata sorpresa Tamayo se acercó a él sin ser percibida clavándole algo en su cuerpo, Muzan simplemente no podía comprenderlo ¿qué hacia ella en ese lugar? La mujer solo evadió su pregunta informándole sobre el origen de las púas que provenían del hombre que él convirtió en demonio en Asakura.
— Absorbiste mi puño Muzan —le informó Tamayo con una sonrisa— ¿tienes idea de lo que tenía dentro? ¡una droga capaz de convertir a los demonios en humanos! ¿y bien? ¿funciona? —inquirió al ver la sorpresa reflejada en su enemigo.
— No deberías ser capaz... —masculló Muzan
Ambos se debatieron en viejos recuerdos en donde nombraron sus distintos pecados desde el día en que abandonaron su humanidad, sin importar que Muzan consideraba que nada de eso era su culpa. Él era un ser casi perfecto, mientras los demás simples ratas que servían como alimento.
— ¡Tanto tú como yo moriremos en este lugar! —le aseguró muy decidida— ¡Hágalo, por favor Himejima-san! —pidió
Luego de aquellas palabras Muzan pudo divisar al pilar de la Roca, quien sin dudarlo atacó logrando hacer su cabeza pedazos en el acto. El padre de los demonios estaba demasiado furioso, por lo que atacó enseguida a Himejima, más pudo arreglárselas para bloquearlos y en parte ese jugada fue definitiva para decirle que aquel ser no moriría con solo cortarle la cabeza, así que su único camino sería el sol
Técnica de sangre oscura, cadena de espinas
Soltó el hombre creando así varias cadenas con forma de espinas que amenazaron en un comienzo con rodear por completo a Himejima, debía eliminarlo cuanto antes, pues aquellos cazadores malditos se las habían arreglado para terminar con su escasa paciencia
¡Aliento de loto, segunda forma, botón primaveral!
Una tercera técnica ingresó en la batalla, eliminando aquellas púas para solo dejar una ligera fragancia, Gyomei sabía que se trataba de Ruri, pero Muzan al posar sus ojos en ella, una sonrisa torcida decoró su rostro, la había encontrado sin necesidad de buscarla, su nuevo experimento.
— ¡Himejima-san! —soltó Ruri posicionándose a su lado— ¿se encuentra bien?
