DUAL: Origins

Windy

Al segundo día de la estancia allí las cosas se empezaron a colocarse raras y Alyxa y el resto lo notaban también. Constantemente nos sentíamos observados y no era nuestro anfitrión, puesto que nosotros desde que llegamos lo vigilábamos a el con frecuencia. Por otro lado, la misma noche que llegamos Windy había despertado, Fire había tenido razón, ella estaba débil y no podíamos partir inmediatamente. Desde que nos instalamos le pedí a Maggie que me enseñara un poco de mis poderes, ambos nos hacíamos fuera alejados de la granja para practicar mientras los otros dos se quedaban cuidando a la chica y alertas a que nada nos pasara.

Me costó mucho, pero ese mismo día hasta que no hubiese por lo menos aprendido a sacar mis alas no dejé a mi nueva mentora en paz, por suerte había accedido fácilmente a enseñarme lo necesario de nuestra raza. Al momento en el que pude extenderlas me sentía renovado, como si quien estuviera en estos momentos desplegando en su espalda algo que no sabía que existía no fuera yo. Era una parte de mi que no conocía y me emocionaba con cada cosa nueva que lograba.

Aly siempre permanecía mirando a la ventana, supongo que esperando a que Dominik apareciera. La ventaja era que nuestra "enferma" se recuperaba rápido, al día siguiente del que despertó nos inundó de preguntas que por suerte Fire junto con Alyxa se encargaron de responder, luego de todas las explicaciones Windy accedió a ayudarnos, a estas alturas creía que todos los elementos pensaban lo mismo respecto a las dos razas, tanto ellos como los humanos eran los afectados con su patética guerra que no se esmeraban en resolver y solo crear más enemistad. Tanto ángeles como demonios les habían causado daño a los elementos para que no se opusieran a los pocos que no estaban dispuestos a un cambio y en parte también se sentían aliviados de que la hija de Saya los encontrase y estuviera trabajando para liberarlos de su prisión.

Mi progreso le sorprendía a Mag (le decía así puesto que todos le decían solo Maggie o Margot, y me nacía llamarle de forma distinta por la ayuda que me estaba proporcionando), supongo que se debía a que me esmeraba realmente por mejorar y tendía a aprender rápido, ya sabía como materializar armas igual que Aly y Dominik hacían. 

Al día de hoy todos nos encontrábamos reunidos fuera de la casa observando nuestro alrededor, se sentía extraño y estábamos más alerta de lo normal, era campo abierto por cualquier lado podían atacarnos. A las dos de la tarde Mike (el dueño de la casa) había salido a hacer unas compras y realizar otras diligencias que según el eran importantes, ya rondaban las cuatro y aún nos sentíamos observados, se le hizo extraño cuando llegó en su desgastado Chevrolet y nos vió a todos tensos sentados fuera.

-¿Está haciendo mucho calor dentro? -preguntó acercándose lentamente, Fire y yo fuimos a ayudarle a cargar algunas bolsas que llevaba-.

-La verdad el ambiente está un poco inquietante -le respondió Mag ayudándole a subir los escalones-.

Sospechábamos que el sabía que sus visitantes no eran nada comunes, no nos decía nada, pero cada vez que nos observaba haciendo algo poco usual simplemente hacía que no le importaba, llegamos a la conclusión de que solo le importaba que lo acompañáramos.

-¿Quién quiere comer muffins? -exclamó al entrar a la casa-.

-Suena delicioso -respondió Aly sonriendo-.

-Supongo es momento de un descanso -dijo Windy manteniendo la sonrisa y el tono amable que la caracterizaban-.

Es una chica que a simple vista se ve tierna, pero cada que pasas más tiempo a su lado te das cuenta que también tiene carácter, se avergüenza con nada; Fire dice que es como la brisa, aveces puede ser suave y otras veces un torrente peligroso, un análisis bastante acertado teniendo en cuenta que ese era su elemento y también nos dábamos cuenta por la personalidad de el, a ratos era de chispa y hacía chistes un poco "ardientes", también era un poco apasionado en las cosas. "Las cosas se pondrán interesantes a medida que vengan más elementos -concluí-. Varias personas de diferentes personalidades conviviendo en un solo lugar".

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Los iban a cazar, yo tenía que hacer algo. A estas alturas creía que era mejor definir bandos, pero eso haría que no pudiera ver a Dimitri con la frecuencia que lo veo estando aquí y tendría que escabullirme a donde quiera que fuera en el infierno, "antes de hacer algo debería hablar con el -pensé bajando las escaleras de mi departamento-." A sí que hice como si me dirigiera al torreón principal y justo antes de llegar me desvié para tomar mi atajo a los calabozos.

-Hoy no es día de visita -mi mentor sonaba algo sorprendido-.

Y era verdad, tenía los movimientos de los guardias calculados para ciertos días, pero ese día no era hoy y estaba tomando muchos peligros.

-Tengo que decidir mi bando, August me tiene tras las rejas y quiero poder ayudar bien a Aly y a Axel en esto. Se que sirve que yo esté aquí pero ambos sabemos que no te van a matar a menos hasta que apresen a Alyxa y algo me dice que cuando ella venga; no será de esa forma. Además, tu terrible hermanito no solo cuenta con lo que ya teníamos planeado que atacaría, tiene una chica humana que quiere metermela por los ojos y se que ella no me dejará en paz y será peor si se entera por ella de que estoy ayudándolos, me apresarán así como a ti; con la única diferencia claro, de que a mi no dudarán dos veces en matarme.

-Entiendo

-Soy un demonio, puedo entrar libremente aquí y encontraré la forma de seguirme escabullendo.

Antes de oír la respuesta de Dimitri se oyó un sonido a la entrada de las celdas.

-Sal ya de aquí te esperaré lo necesario solo pido que protejas a mi hija -respondió empujándome hacia la entrada a la celda que yo había hecho-.

No fue concreta, pero si clara, dejaré a August para volver con Aly y el resto esta vez enviaron muchos tras ellos y puede que ya tengan a algunos elementos, ¿pero y si no son suficientes para detener a quienes van por ellos? Me cambié inmediatamente el absurdo traje de guardia que tenía y lo guardé en un maletín para luego bajar nuevamente afanado, antes de salir había dejado una vela bajo una cortina; dentro de poco mi departamento estaría sumido en llamas. Caminé lo más deprisa que pude al torreón y una vez allí subí al cuarto del trono, que el ptetico que tenía como jefe nunca abandonaba.

-August -le llamé y se volteó asombrado de mi irrespeto-.

-¿A que se debe esto mi queridísimo Dominik?

-Ya no le serviré a usted ni a sus tropas -tiro el maletín a sus pies-. Puede buscar a alguien más que ocupe mi cargo -Sin decir más di media vuelta y salí de la habitación-.

Como lo predije, es lo suficiente inmaduro como para reaccionar inmediatamente a lo que le he dicho, así que tendré suficiente tiempo para huir de aquí antes de que me alcancen. En una mochila llevaba todo lo necesario, no era muy grande pero cabía lo suficiente. En cuanto salí del inframundo abrí un portal que me llevó inmediatamente a donde se encontraba Aly.

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Fue extraño, nos encontrábamos comiendo muffins en la cocina y hablando con Mike muy animadamente cuando de la nada una persona de vestimenta negra parece salir del refrigerador y caer al suelo torpemente todos reaccionamos en defensa y a lo que eso concierne significa que en menos de dos segundos habían tres chicos armados y cinco listos para atacar a quien quiera que fuese.

-Aly... -soltó el chico tirado en el piso tratando de levantarse, me invadió la vergüenza ¿cómo es que no le reconocí?-.

-Rayos Dom ¿que te pasó? -me arrodillé inmediatamente para ayudarlo a levantar-.

Mis acciones calmaron un poco al resto Mike solo se había quedado observando la escena estupefacto Windy y Maggie se encargaron de llevarlo al sillón y darle un poco de agua para calmarlo.

-Creo que fue un escape repentino -contestó cuando logró recuperar completamente la compostura-. Debemos salir de este lugar lo antes posible, corremos mucho peligro aquí.