¿Crees que es fácil cuidar niños? Para T/n no lo era, ya que nunca en su vida había cuidado uno.
¿Pero qué tal si tiene que cuidar a cinco chicos? ¿Y si son todos adolescentes? ¿Y si le comienzan a gustar los cinco a la vez?
No, ella nunca imaginó...
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—H-hola —saludé nerviosa a Jaemin.
—Al parecer el destino nos vuelve a unir —comentó Jaemin.
Dentro mío, algo se movió y no pude reprimir una mueca de disgusto. Esa era la misma frase que el acosador de la fiesta me había dicho, y con ese mismo tono.
—¿Cómo estás? —preguntó Jaemin con una sonrisa.
—Y-Yo... Me estoy volviendo loca —susurré mientras agarraba mi cabeza con ambas manos.
—¿Cómo conoces al cartero, T/n? —preguntó Taehyun confundido.
—¿Cartero? —repitió Kai más confundido aún—. Yo nunca lo había visto...
—Es porque siempre vienen sus hermanos mayores... Él y su familia son todos carteros —explicó Taehyun.
—Entonces... ¿Se conocen? —quiso asegurarse Beomgyu, cruzado de brazos.
—Él... Bueno, yo... —intenté decir algo pero, por algún razón, estaba nerviosa.
—¿Es tu novio acaso? —preguntó Taehyun con una ceja levantada.
—¿¡Qué?! ¡Claro que no, lo conocí hoy, chicos!
—Lamento mucho molestarlos, solo quería traer la correspondencia —explicó Jaemin inocentemente.
—Qué inoportuno —dije en un susurro.
—La señora Shin dejó un mensaje diciendo que no iba a estar por un tiempo, y que la correspondencia se la entregaramos a una chica llamada T/n. Y como mis hermanos tienen día libre hoy, vine yo... No sabía que serías la misma T/n.
—Espera un segundo —dije volviendo adentro para anotar algo en un papel—. ¿Cuál es tu número?
—¿M-Mi número? —repitió Jaemin.
Anoté su número y lo agendé en mi celular un rato después. No parecía un mal chico y, además, quería salir con él en algún momento. Luego, Jaemin me entregó dos sobres cerrados para la señora Min Ah.
Ni bien se fue, cerré la puerta y me recosté sobre ella como si me hubiese cansado físicamente. Suspiré profundamente y negué con la cabeza, internamente muriendo.
—Ni siquiera preguntó para qué quería su número —me cuestioné confundida, pero rápidamente desvié toda la sospecha de mis pensamientos y decidí enfocarme en lo que pasaba a mi alrededor.
