Juntos por la razón equivocada (Taehyuck).

Mis vecinos.

El reloj que marcaba en una fuente luminosa rojiza las doce de la tarde le indicaba que había cumplido sus ocho horas de sueño, moría de hambre, pero alejado de la ficción donde tu familia adoptiva te recibe con una gran desayuno en la cama después de tu primera noche, el moreno decidió bajar para preparase algo que le diera la suficiente energía para un día incierto, nada había sido movido ni un milímetro de su lugar lo cual indicaba que el abogado no había puesto un pie en la casa desde la noche anterior.

Se dirigió al lugar donde el mayor había obtenido las botellas de agua, seguramente sería la cocina. Hablar para si mismo era cómodo en un lugar donde cualquier movimiento podría causar eco.

-Un batido de fresa es necesario- el impecable espacio para alimentos no tenía licuadora-Bueno algo de fruta me refrescará- en el refrigerador solo habían botellas de aguas y ningún frutero o parecido a éste a su alrededor-Huevos fritos y pan-sin producto animal de ese tipo, ni una migaja así como un sarten o semejante-Atún o...-alacenas vacías-Lee Donghyuck puedes preparar algo delicioso-la esperanza de obtener su primer alimento del día aun no desaparecía.

Hubiera preferido una ducha antes de salir pero sus estomago dolía tanto y un leve mareo surgía que no podía esperar por ir al súper a comprar una pequeña despensa que claramente se necesitaba.

-Buena posición económica solo para comprar agua- se dijo de forma sarcástica, tomó su cartera pero no tener llaves arruinó sus planes. La necesidad de alimento provocaba en él alucinaciones, seguramente, no podría coincidir su situación en demasía a un secuestro.

Antes de caer en la locura, tomó la perilla de la puerta para girarla de manera torpe, cuando empujó los rayos del sol en su máxima capacidad le golpearon la cara provocandole una ceguera temporal.

Recuperando la visión, su atención se concentró en las tres personas que se encontraban en la zona izquierda del jardín.

-Wendy y Joy deben cantar, las rosas crecerán hermosas si lo hacen-se trataba del mismo sujeto de la prenda para cocinar de Hello Kitty. ¿Suho o Lay?, no quería fallar la acción de ponerle rostro al nombre pero era indispensable ya que el menor consideraba que cada vez que quisieras la atención de esa persona, si lo hacías empezando por decir su nombre ésta se sentía valorada, importante para el otro porque habías memorizado la escritura y sonido únicos.

-Irene ayuda a Yeri con el abono- el hombre de piel pálida le indicaba a la niña que alimentaba con abundante agua a las begonias en un lugar de sombra.

La curiosidad dio vida propia a sus pies para descender por la escaleras y avanzar lentamente hacia la persona con un overol de color rosa palo.

-¡No puede ser!-Suho cubrió su boca con ambas manos sin poder ocultar su mirada sorprendida.

-Buenas tardes, Lee Donghyuck, es un placer conocerlo- ofreció su mano para saludar como forma de reforzar la formalidad.

-B-buenos días, digo buenas tardes, Suho, también es un placer- desprendió una mano de su rostro para responder al apretón que el castaño le ofreció.

-Gracias, su jardín es hermoso- no pudo resistir admirarlo nuevamente, la luz del sol provocaba a los brotes un brillo que pronunciaba su color natural.

-Mi jardín...si....quise decir, gracias, pero, ¿cómo tú sabes...?-no pudo evitar sonrojarse y el calor de mediodía no lo estaba ayudando.

-Seremos vecinos temporales, mi tutor es el propietario de la casa....-explicaba hasta que una niña de cabello negro interrumpió la conversación.

-¡Moon Taeil!, él es escalofriante- se aferraba a la cintura de Suho sobreactuando tener escalofríos.-Más que escalofriante yo diría misterioso- se acercaba una pequeña abrazando un pequeño costal-Todos dicen que es un fugitivo de la ley, es buscado por crímenes horrorosos-agregó la de menor estatura que tomaba de la mano a la niña de cabello intensamente rojo. -¿Eres su cómplice?¿Huyen juntos?-por detrás de Donghyuck la dulce voz de la nena con el aspersor hizo que volteara rápidamente.