Amor secreto.

8 0 0
                                    

No había sido hasta hace tres años que perseguir al pequeño Lee se había tornado interesante. En sus primeras semanas de educación pre universitaria, había estado poco aconpañado, e incluso Johnny suponía que estaba teniendo problemas de adaptación, lo cual era extraño porque años anteriores era notable su popularidad.
Esperando por el chico afuera de la escuela a la hora de salida, como ya era rutina, el acompañante que tomaba de su hombro llamó su completa atención. Se atrevía a pensar que casi tenía la misma edad del menor, cabello oscuro y piel pálida, pómulos pronunciados, cara pequeña, delgado y con una estatura similar a la de Donghyuck. Había algo que le impedía despegar su mirada de él e incluso le causó insomnio esa noche.  

Al estadounidense no le faltaban propuestas amorosas serías o temporales de ambos sexos

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Al estadounidense no le faltaban propuestas amorosas serías o temporales de ambos sexos. Contaba con un inegable atractivo y con una forma de ser demasiado directa, lo cual lo  habían llevado por un camino seguro que lo protegía del rechazo, le evitaba rogar por atención y enamorarse. Siendo lo último lo que más tenía, le aterraba la desilusión.

Sin embargo, contradiciendo todos sus principios, no tomó mucho tiempo aceptar que el chico de anteojos le atraía severamente, por primera vez se encontraba en una situación de incertidumbre para con el menor. Johnny nunca se había sentido más vunerable, parecía que el menor había acabado con toda su autoconfianza y lo colocaba en esa espantosa situación de que él conocía todo del canadiense, mientras Mark no sabía de su existencia.
Ahora que ya no era más parte del equipo que investigaba a Lee Donghyuck, si, todo un grupo especializado que su padre había formado para recabar información del hijo de Ten y Taeyong, Johnny se hizo de sus propios medios y contactos para continuar con la investigación acerca de Mark, debía admitir que la casualidad de que su primo se convirtiera en el tutor del individuo que estuvo vigilando y que fuera el mejor amigo de éste, le facilitaba acercarsele.
-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_


Cómo era posible que el clima cálido del interior del auto no le afectará en lo más mínimo. Sus manos heladas todavía no asimilaban la pérdida de su aparato electrónico. Era lamentable no poder enviar la imagen y el texto a su amigo. Reaccionó pero fue demasiada tarde, el mayor se adelantó a colocar el seguro a la puerta, debía calmarse y ganar tiempo para pensar.
Parecieron los segundos más largos de su vida, su mirada fija en la puerta y con sus puños que recibían todo su miedo, le permitieron pensar y darse cuenta de algo extraño que el estadounidense había dicho. Giró para encontrarse con la mirada del mayor.
-¿Y usted cómo sabe dónde vivo?- para su perspectiva el cuestionamiento que hacía no iba a evitar las malas acciones que planeaba Johnny pero lo ayudaba a mostrarse valiente y que no se iba a quedar sin pelear hasta en las últimas circunstancias.
Sin embargo, la respuesta del menor provocó que el mayor se diera cuenta de su frase muy mal planeada y que tal vez estaba a punto de arruinar su anonimato porque lo colocaba en una posición demasiado sospechosa.
-Quise decir, a mi apartamento, es tuyo cuando quieras- trató de arreglar la situación con otro comentario de coquetería barata pero no fue muy convincente pues se mostraba demasiado nervioso y evitó a cualquier forma la mirada que lo cuestionaba.
Así Mark se dio cuenta que la situación no ameritaba su pánico total, concluía qué solo era palabrería del mayor y que la probabilidad que ejecutara era poca. Rodó los ojos y se inclinó hacia adelante de su asiento para que el tacto de su mano localizara su teléfono en la oscura zona. Su acompañante le sostuvo la muñeca para impedir que siguiera buscando pero entre un leve forcejeo Mark encontró la oportunidad de deshabilitar desde el tablero principal el estado de bloqueo del auto. Equivocamente trató de revertir la acción, suavizando su agarre y otorgándole la oportunidad a Mark de escapar y priorizando su bienestar físico y emocional sobre lo material.
-¡No, espera!- intentó alcanzar al chico que se perdía entre la oscuridad de la calle pero el cinturón de seguridad lo continuaba atrapando. Quiso quitarlo pero reconoció un tono telefónico, ubicó entre sus bolsillos su aparato electrónico para disponerlo y reviso el identificador.
-¿Si, quién habla?- contestó a pesar de que ya sabía de quién se trataba.
-Moon, idiota- del otro lado su primo le respondía poco amable pero poco le importo al estadounidense ya que su mente estaba ocupada por saber el paradero de Mark.
-Omitire la coma en tu frase- se defendió y se estiró para el lado contrario, tratando de cerrar la puerta del copiloto que el canadiense no consideró en ni un momento cuando escapó . Tristemente aún el cinturón lo capturaba y limitaba su alcance, así que decidió retirarlo y descender de su vehículo. Todavía consiente de la persona del otro lado de la línea se percató del silencio total que emitía
-¿Bueno?- retiró el aparato de su oído para verificar que la llamada siguiera en curso. Al confirmar que aún estaba en la línea, insistió ser respondido.
-Moon no es gracioso, ¿Qué quieres?- tras cerrar la puerta, regresó a su lugar y volvió a colocarse el cinturón de seguridad.
- ¿Puedo dormir en tu casa?- finalmente el mayor terminaba con el silencio
-¿Qué?, No me digas que seguiste discutiendo con el chico- cansado cuestión porque al parecer el pelirrojo no intentó calmarse y tomar en cuenta su consejo que le había dicho cuando se despidió en su casa.
-No, llegamos a un acuerdo. ¿Puedo o no?- Taeil empezaba a sentirse incómodo por la preguntas.
-Claro, ya sabes la contraseña. Te encuentro ahí más tarde, tengo algo que hacer- colgó cuando escuchó un apenas audible agradecimiento del mayor.
Encendió su auto y empezó la búsqueda del menor. No le tomó mucho tiempo para hallarlo en una esquina, a pocas cuadras, se le veía asustado y volteando en todas direcciones. Gran culpabilidad nació en su pecho, todo se debía por la terrible primera impresión hacia con Mark. En esta situación si le ofrecía ayuda nuevamente, lo rechazaría y podría empeorar el escenario. Apagó el auto y colocó ambas manos en el volante, tras pensar por un momento, tomó su teléfono y buscó entre sus contactos a YangYang. Encontrándolo y enseguida marcando, veía a Mark contando algunos billetes.
- Buenas noches, servicio de transporte privado See The Vision, ¿Con quién tengo el gusto?- el chino contestaba a través del manos libres.
- Hey Yang, soy Johnny, ¿Te encuentras ocupado?-
-Hey John, si, ¿Por qué?- el chino explicaba mientras volteaba fugazmente al ver a la pareja que descansaba en los asientos traseros
-Necesito tu ayuda- pedía el mayor.
- Dinero no tengo- inmediatamente contestó de esa forma, se había programado para responder negativamente ante cualquier propuesta económica durante el mes y así poder ahorrar para su regalo de aniversario que igualará al costoso obsequio que Xiaojun acostumbraba a regalarle.
-No es dinero, necesito que pases por un chico que está perdido-
-Espera, ¿Cómo que perdido?- detenía suavemente el vehículo que conducía para prestar total atención. 
- Contexto, estoy a pocos metros de un chico que está perdido, sin auto ni celular, estoy seguro que no aceptará mi ayuda pero si tú te presentas y le ofreces transporte, por razones obvias no se negará- explicaba aún observando cada movimiento del canadiense.
-Espera por favor- silenció su llamada y aclaró su garganta para llamar la atención de Jaemin y Jeno. Entre bostezos y estiramientos reaccionaron.
-¿Ya llegamos?- preguntaba el novio de Jeno mientras revisaba por los vidrios laterales.
-Aún, no. Pero necesito un enorme favor de ustedes chicos- suplicaba y se predisponía para negociar -Un amigo se encuentra sin transporte, muy cerca de aquí - mentía un poco- si me permiten cambiar un poco la ruta para recogerlo- empezaba a ofertar- inmediatamente que lo llevemos a su destino, puedo llevarlos al suyo, sin costo alguno- concluía y esperaba respuesta.
Jaemin se asomó entre los asientos delanteros y recargó sus brazos para acortar la distancia entre él y el conductor.
-Un solo viaje gratuito es muy poco para un gran favor ¿No lo cree?- levantaba su ceja derecha para poner en duda la recompensa que se les está ofreciendo. Aún en su lugar, Jeno tiraba de la chamarra de su novio en señal de que no se mostrará tan interesado.
-¿Una semana?- contraofertó el chino sin permitir sentirse tacaño por su primera oferta.
-De acuerdo, ¿De cuántos viajes por día estamos hablando?- no se rendió el de enorme sonrisa blanca, estaba dispuesto a sacarle el mayor jugo posible a la oportunidad de transporte privado por una semana.
-¿Cuántos viajes puede hacer un escolar al día?- se burló un poco al notar como el uniforme de Jaemin se dejaba ver un poco debajo de la gruesa prenda.
-Dejemos esto en cuatro viajes gratis por una semana, oferta final- ofreció su mano izquierda para cerrar el trato. El conductor aceptó devolviendo el gesto a su astuto negociador y tomó nuevamente su teléfono para regresar a la línea telefónica.
-Envíame la ubicación del chico- solicitó mientras encendía de nuevo su vehículo.
-Perfecto, gracias Yang- terminó la llamada para enviar lo que su amigo le pedía además realizó una captura rápida de Mark en el sitio en el que se encontraba.
A los pocos minutos, YangYang recibió los datos y con ello cambió su dirección en el dispositivo GPS.
No transcurrió más de una hora cuando Johnny identificó el vehículo privado de su amigo aproximarse al canadiense cuando éste también le señalaba para que se acercara. Desapareció de su vista tan pronto como subió al coche y arrancó.
En el interior, el cálido silencio y la profunda oscuridad ayudaron a que resaltará un objeto, Johnny se acercó y tomó el celular de Mark. Sonrió levemente al observar la parte trasera del aparato tapizado con calcomanías de sandía. 


/////////////////
Gracias por leer.

Juntos por la razón equivocada (Taehyuck).Where stories live. Discover now