Serendipity • Lizkook

🐰20

La época premiaciones había llegado, los Melon se acercaban y el principal embajador era KIA, lo cual lo hacía más emocionante, éramos su imágen principal.

Los Melon serían nuestros, teníamos preparada una presentación impecable, los colores del evento serían una combinación de ellos y nuestros, nunca se había visto tal cosa. La empresa incluso había hecho un concurso para que algunos Blink fueran al show.
Teníamos dos semanas para perfeccionar la coreografía y elegir vestuarios, aunque el concepto y los efectos ya estaban listos.

-Mas tarde irán a la sede de los Melon a ver su escenario especial y ahí sabremos si habrá alguna modificación - nuestro manager entró a la sala de ensayo donde las chicas y yo habíamos estado practicando desde temprano.

- Estaremos listas - Dijo Jisoo segura.
Nuestro manager asintió satisfecho y nos dejó solas. Venía cada cierto tiempo a vernos.

- Esto es lo que había estado esperando - Rosie terminaba de estirarse para después tomar una toalla y secarse el sudor de la frente.

- Lo se, estoy emocionada - Jennie ya se encontraba sentada descansando después de ensayar por tanto tiempo, me dedicó una sonrisa cuando cruce una mirada con ella.

- Creí que esta vez sí sería diferente - escuché decir a Jisoo a mis espaldas, notaba el cansancio en su voz y no necesariamente físico.

Este año nos habían prometido otro Comeback, nuestros solos y más proyectos, no sabíamos que se referían solo a portadas de revistas y libros de fotos. Los hacíamos con toda la dedicación y emoción que suponía nuestro trabajo pero, lo que más nos gustaba hacer y por lo que habíamos entrenado tanto tiempo, eso estaba guardado en un baúl que no parecía ser abierto en un tiempo hasta que las premiaciones llegaron. Creíamos que estaríamos en ellas por lo menos con una canción más, claramente no fue así.

Unas horas después ya estábamos entrando al lugar donde los Melon serían realizados. El escenario era increíble, al parecer nuestra presentación duraría 20 minutos en total, metiendo los pequeños cortos que teníamos que grabar para mostrar el concepto al público y nos diera tiempo de cambiar de vestuario. Veía como los ojos se le iluminaban a las chicas de emoción y sonreí. Daría lo que fuera por verlas así siempre.

Un sonido a mi espalda me hizo girar, más personas entraban al recinto, al parecer no éramos el único grupo que había venido a ver el escenario. Bangtan hacía su camino a nosotras, rápidamente voltee en dirección a las chicas, Jisoo me veía preocupada mientras que Rosé y Jennie aún seguían viendo a los chicos.
¿Que se supone que haría? Mi mente no me daba respuestas rápidas que eran las que necesitaba en este momento, traté de respirar con tranquilidad, no era momento de perderme.

- Oh Bangtan Sonyeondan - Dijo el chico de diseño que estaba con nosotras y corrió a darles la bienvenida.

- En un segundo estoy con ustedes - les dijo sonriente.

Los chicos llegaron al escenario y nos hicieron una reverencia y nosotras la devolvimos con un poco de lentitud, estaban a una distancia moderada lo cual me tranquilizó de cierta forma, mis ojos se habían posado en Namjoon que nos miraba amable. No podría resistir no mirarlo por mucho tiempo.

- Chicas, eso sería todo - nos dijo el diseñador que al parecer quería empezar a trabajar con ellos de inmediato. Le entregó a Jisoo un papel con el plano del escenario y se despidió haciendo una reverencia. Justo cuando el caminaba hacia los chicos pude cruzar una mirada con Jungkook y ya no pude escapar de ella. Sus ojos no transmitían sentimiento alguno, la calidez y el amor con la que me miraba siempre, no estaba, pero tampoco notaba frialdad ni odio. Parecía estar mirando al vacío. Pude notar que sus mejillas estaban un poco hundidas, su cabello ya no estaba tan largo como la última vez que lo vi en televisión, estaba más delgado y ya no llevaba en su mano, el anillo que compartíamos.

Después de un momento observando a Jungkook no supe cómo había bajado del escenario pero me encontraba caminando fuera de ahí, Rosé me llevaba de la mano y me aferré a ella como si fuera mi único atisbo de realidad hasta llegar a la furgoneta.

- ¿Estás bien? - me dijo tomando mi rostro entre sus manos, me miraba preocupada.
Esa misma dulzura que me transmitía con tal gesto, hizo que sintiera algo en mi corazón, algo que hizo que mis ojos comenzaran a humedecerse.
Rosie me tomó entre sus brazos incapaz de verme llorar, pude sentir como Jisoo me abrazaba por la espalda y Jennie tomaba mi mano.

Estaba preparada mentalmente para evitar verlo durante el show, sabía que con la gente al rededor me iba a forzar a mi misma a mantener la calma, era como cuando teníamos una presentación y al ver a todas las personas ahí los nervios pasaban a segundo plano. Pero, al verlo ahí, de esa manera, mostrando una mirada dura y vacía pero a la vez dejando ver la vulnerabilidad de su cuerpo me había hecho perder todo. ¿Por qué tenía que ser tan débil cuando se trataba de el?

La furgoneta llegó a la empresa, aún teníamos que revisar si cambiaríamos algo después de ver el escenario, subimos al elevador, directo a la oficina de nuestro manager. Jisoo llevaba la hoja en las manos y le comentaba a Jennie sobre la coreografía, Rosé no había soltado mi mano desde que bajamos del vehículo lo cual agradecía.
Jisoo fue la primera en tomar el picaporte de la puerta de la oficina, nosotras, que íbamos detrás de ella no nos esperábamos el grito de asombro que iba a salir de su boca al cruzar por esa puerta.

Nos hicimos paso dentro de la oficina para ver qué era lo que había causado esa reacción y nos encontramos con la oficina totalmente destruida, papeles por todos lados, la silla donde normalmente descansaba nuestro manager estaba en el suelo, los retratos y decoraciones que tenía en su escritorio, no estaban.
Caminé a los cajones de este y también estaban vacíos, abrí uno por uno nuevamente, con la vaga esperanza de encontrarlas. 
Escuché un sollozo de Jennie y levanté la vista, llevaba un sobre blanco en sus manos, era su carta de renuncia.

Nuestro manager estuvo con nosotras desde el principio, estuvo con Jennie en la producción de su solo, acompañaba a Rosé y a Jisoo en sus inumerables paseos por las calles de todos los países a los que íbamos que tanto les gustaba dar, me acompañaba a mi a visitar a mi familia y amigos. Cada tour, cada proyecto, cada hiatus incluso, el estaba ahí siempre.
Ahora no estaría más a nuestro lado, esa compañía paternal que nos brindaba, nos haría mucha falta. Nos vio crecer en este mundo, nos vio cumplir nuestros sueños y nos acompañó durante el tiempo que gozamos de el, hasta este momento.

Bajo la carta de renuncia, había otro sobre, ese era para nosotras.

En el expresaba la razón por la que había dejado la empresa, el cariño que nos tenía y cuánto lamentaba irse de nuestro lado, expresaba sus deseos para nosotras y lo mucho que nos quería y echaría de menos.
Esa noche dormimos en mi habitación, abrazadas una de la otra, cansadas de tanto llorar y de tanto que estábamos soportando.

Nuestro manager se fue porque la nueva CEO decidió cancelar todas las premiaciones para todos los artistas de YG, no había una explicación, solo una orden concreta e irrefutable.
El había visto lo que nos habíamos estado esforzando con la coreografía, lo emocionadas que estábamos de volver al escenario y de ir a las premiaciones que le seguían, lo agradecidas que nos sentíamos por tener Blinks en primera fila por el concurso, y no lo soportó. No soportaba vernos esperando la llamada para ir a grabar y lanzar música que solo ocurría una vez al año, no soportaba vernos con el temor que nuestros Blinks se fueran, no soportaba vernos tristes porque nuestra empresa declinaba cada proyecto al que nos invitan a formar parte, simplemente no soportaba vernos así.

Ese había sido su límite y también el nuestro.