MI MAYOR PECADO IV

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Dios, en ese momento realmente quería desaparecer, cerró fuertemente los ojos y se maldijo por ser tan tonto de llegar hasta ese punto, ¿y ahora que haría? Voltearse encarar al latino y decirle; "Aaaa hola vine a hablar sobre lo mucho que me gustas y no puedo evitar aun estar enamorado de ti", inclusive solo pensarlo sonaba ridículo, pero él no era un cobarde, claro que no, inhalo una gran bocana de aire y totalmente seguro volteó y lo que se encontró no le agrado para nada; a pesar de haber transcurrido un par de días México aún tenía el labio inferior herido con un pequeño moretón, sin siquiera pensarlo y por inercia deslizó su diestra y con las yemas de sus dedos tanteo delicadamente las zonas lastimadas ganándose con aquel acto unas cuantas muecas de dolor.

- ¿yo te hice esto? - el menor lo miraba preocupado mientras que el latino no podía evitar estar sumamente sorprendido- dios soy un imbécil, lo lamento

- ¿Estas bromeando cierto? - México dio un par de pasos atrás - ¿acaso vienes a búrlate de mí?, lamento haberte incomodado y llegar a fastidiarte, pero no me hagas esto por favor, pues a diferencia de ti yo si te amo - susurró bajando la mirada, Rusia no podía creer lo que estaba pasando, hace exactamente un par de días, aquel chico se mostraba sínico, detestable y demasiado chocante, sin embargo ahora parecía, tan tierno e indefenso - lo he estado pensando mucho y creo que me iré ya veré que le invento a ONU...he escuchado muchas veces que si realmente amas a alguien tienes que hacer sacrificios, yo quiero que seas feliz, y aunque había pensado en luchar por ti y vengarme en cierto punto, ya no puedo, Rusia tú te metiste con mi orgullo tras golpearme y decir palabras tan detestables, sin embargo, llegué a la conclusión de que estas feliz sin mí, lo que hice no tiene perdón, mis acciones hicieron que tengas esta opinión tan aberrante acerca de mí, me metí con tus ideales, lo lamento... no sabes cómo me arrepiento de haberlo hecho - a ese punto las lágrimas se hicieron presentes en el mexicano - cada día solo puedo pensar en el daño que te cause, pero era demasiado inmaduro y no pensaba más que solo en mí, yo quería tenerte, me gustabas mucho y lo único que logré es perder la oportunidad de que me conocieras como realmente soy - sollozó - es por eso que renuncio a ti, espero que sigas siendo feliz, Esper...

- No sigas - interrumpió el eslavo quien ya tenía los ojos cristalizados, con algo de cautela lo tomó de la cintura con la diestra mientras que con la otra acunaba su rostro- ¿Quién eres tú para decidir lo que me hace feliz?, sé que he sido un completo patán, te ilusione; me acosté contigo sabiendo que me amabas cuando yo no estaba en condiciones para eso... escúchame muy bien, no quiero que te vayas, no quiero sentirme muerto de nuevo, te amo joder, te amo como nunca imagine amar a alguien - tal vez era un pecado, pero a esas alturas lo único que quería, era volver a tener a su lado a aquel muchacho, escuchar su risa, respirar su aroma, tocar su piel, y ¿Cómo no? Volver a besar aquellos dulces labios que tanta falta le hacían, México tenía la respiración acelerada no podía creer lo que estaba sucediendo, pudo notar como el ruso se acercaba con suavidad, por inercia posiciono sus manos en el rostro del menor y pegó su frente con él mientras ambos mantenían cerrados sus ojos, sus respiraciones se mesclaban y eso los tranquilizaba, sus mejillas ardían en llamas en ese momento teñidas de un tono carmesí, por fin sus labios se tocaron, el tacto fue suave pues Rusia no quería lastimarlo, la sensación era fantástica, se sintieron vivos de nuevo, en verdad lo necesitaban, era como por fin estar completos, sin dolor, solo magia a su alrededor, sin pensarlo el mayor lo tomó fuertemente de las caderas atrayéndolo más a su cuerpo, era un beso dulce e intenso donde los chicos se demostraban la falta que se hicieron, Mex no pudo evitar soltar un ligero suspiro mientras se separaban, el eslavo simplemente sonrió para después besar de manera tierna la frente de su amante, el latino sencillamente cerró los ojos tomando delicadamente las manos del castaño. Y así permanecieron con las manos entrelazadas, disfrutando de su compañía y el momento, inclusive las palabras sobraban, solo eran ellos y eso les bastaba.

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*por hoy me despido, gracias por su apoyo criaturitas divinas❤️✨

RUSMEX (ONE - SHOTS)Όπου ζουν οι ιστορίες. Ανακάλυψε τώρα