Pecado Mortal

27.

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Comenzó a acariciar la cabellera de Lucio, lágrimas caían de sus ojos

-También, tengo miedo a que nos separen, porque- con cuidado comenzó a levantar la cara de Lucio para verlo mejor

-Porque yo no tengo miedo de mis sentimientos, mi padre debería entender que el es el malo en todo esto- limpió sus lágrimas -El a hecho que sus seguidores maten a los pecadores, el quiere que toda persona sea perfecta-

Tomó la mano de Lucio -Él aunque quisiera alejarnos, no podría hacerlo- bajo el parte de su playera enseñando una marca roja -es una marca de que yo te pertenezco-

Abrazó a Lucio con indicios de no querer soltarlo  -no puede alejarme de lo que más me hace feliz-

...

Levantó su vista hasta el castaño que tenía enfrente, tenía que admitir que se sentía muy bien hablar de lo que sentía, se sentía liberado

Con los dedos retiró la playera del más bajo, solo para apreciar la marca en el cuello del otro

-Deberias odiarme por qué te marqué sin tu permiso- Rió -Tocaste al diablo y no te quemaste, fuiste el primero en tocar al diablo y contener su ira, ahora te pertenezco-

Se levantó hasta dejar un beso en la marca, lo abrazó contra si y lo levantó en brazos, girandolo por la habitación

Pudo notar la risa en el menor y eso lo hizo sentir bien, lo detuvo un momento en el aire y Lauren enroscó sus piernas alrededor de el

-Que se joda tu padre ¡Que se joda!- Gritó al aire y volvió a darle vueltas mientras reían, eso era lo que necesitaba, Lauren era lo que necesitaba

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Tomó con sus manos las mejillas del contrario, para besarlo, se sentía muy feliz de que Lucio si correspondiera a sus sentimientos

Ya no pedía más, solo quería a Lucio, el beso y abrazo terminaron y ambos se acostaron de nuevo, entre mimos y besos -Entoces ¿Qué haremos ahora?- se encimó en el mayor para verlo mejor

-Dices que el vuelo se pospuso ¿No es así?- miró sonriente al mayor, mientras que este asentía, el castaño no pudo evitar dejar salir un pequeño chillido, mientras se lanzaba a abrasar al mayor

-Así pasaremos un rato juntos- se quedó callado por unos segundos -Espera ¿Y el trabajo? Se atrasará- miró asustado a Lucio, el solo río por su cambio, si que su actitud cambiaba repentinamente

...

-Tu ni te preocupes por el trabajo, en Madrid hay gente que se encarga de los hoteles, los demás pueden hacerse cargo sin mi- Se encogió de hombros y lo volvió a abrazar

Podía quedarse ahí para siempre, pero su estómago rugió por comida

-¿Te parece si pido algo al restaurante del hotel para comer? Muero de hambre- Sonrió y se acercó a dejar otro beso en sus labios, Lauren brincó emocionado, el sólo se levantó y pidió por el teléfono, volviendo a la cama acostándose a su lado y jalándolo con el

-Podria pasar todo el día contigo aquí- Se inclinó hasta esconder su cara en el cuello del más bajo -De hecho, me gusta bastante el lugar donde estoy- Desde su posición, la risa del menor era una vibración melodiosa -No me quiero mover nunca-

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Ambos se quedaron en la cama dándose mimos y besos, no tardó tanto en llegar su desayuno 

Comenzaron a desayunar tranquilamente, si que le encantaba pasar tiempo con Lucio, era feliz muy feliz

No tardaron tanto en desayunar ambos estaban llenos el castaño suspiró de tanto haber desayunado -que delicioso- se recargó en el respaldo de la silla

-Por fin ya no tenemos tantos problemas, Tomás ya no está, parece que les agrado un poco a Adriel y Azrael, el contrato se cerró y sólo hasta que pase la tormenta-  Miró a la ventana que de ella se veía la tormenta que no cesaba -Regresaremos y- colocó sus manos en la mesa para apoyarse y acercarse al mayor que no dejaba de mirarlo -vere a mi adorado Moxy- le dijo con felicidad mientras le dejaba un beso en los labios a Lucio

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-¿Quieres volver? Puedo pedirle a Azrael que traiga el auto- Se levantó a tomar el teléfono y volteó con el -Sé hace lo que tú pidas-

Casi podía escuchar a sus amigos reírse por estar tan sumiso ante el, pero ese era el efecto que Lauren provocaba

-Esta haciendo mucho calor ¿O sólo soy yo?- Sentía su temperatura corporal subir, tenía que alejarse de él o lo quemaría

Se quitó la ropa hasta quedar en bóxer y una camisa de tirantes delgada, casi corrió hasta el balcón y cerró el ventanal detrás de él, podía sentir la nieve caer en el y derretirse al tacto, su piel estaba roja y quemaba, Lucio moriría de hipotermia si no entraba, pero se sentía quemar, su temperatura estaba por los cielos

Pasó casi veinte minutos ahí, podía ver a Lauren parado del otro lado del ventanal y no dejaba de repetirle que se calmara, que estaba bien, pero ¿Que podía hacer? Su temperatura debía nivelarse o su piel se quemaría

Casi quince minutos después, volvió a entrar al cuarto, vió a Lauren parado ahí sonriente pero preocupado, y en cuanto dió un paso hasta él, se desmayó.