Pecado Mortal

32.

No le había gustado esa promesa, Lucio se había lastimado, lo único que quería era estar con el ¡Pero no quería que este se lastimara por una promesa!

Miró preocupado la marca, estaba feliz eso si, Lucio, su amado se quedaría a su lado y eso le encantaba

-No debiste- miro la marca -En serio no debiste hacer eso- abrazó a Lucio con una sonrisa, ya estaba calmado ya no tenía de que preocuparse

Sabía que nada de ese juramento pasaría, eso tenía seguro, tomó aire para relajarse y también sentir el dulce aroma que emanaba Lucio, como le encantaba

-Sólo quédate conmigo- movió su cabeza para mirar el rostro de Lucio -Eso es todo lo que te pido- pensó por unos segundos -Y que borres la foto- sonrió para después recargar su cabeza en el pecho de Lucio y así sentir su corazón

...

Casi suelta la carcajada, de no ser por qué cada movimiento que involucraba el cuello le mandaba dolor igual a cien piquetes en el abdomen, nunca había jurado, el diablo no jura

Estaba condenado

-Me gusta que estés calmado- Habló sintiendo inmediatamente esa sensación, supo disimular bien

Lo separó apenas un poco y sonrió, se acostó en la cama y lo jaló con el

-Hay que quedarnos aquí lo que resta del día, mañana podemos ir a desayunar a algún restaurante que probablemente viste en internet y a pasear por el centro, a comprar más souvenirs y llenar maletas ¿Aceptas?- Rió sinceramente aún sabiendo el dolor que sentía

Quería sentirlo cerca, si estaba condenado él y Lauren no, al carajo todo lo demás

Tomó su teléfono de nueva cuenta y eliminó la foto, también usó el mismo dedo con el que hizo el juramento y quemó el tatuaje

-¿Feliz?- Su respuesta fue un beso

...

-Creo que se te está haciendo costumbre quemarte- miró preocupado donde anteriormente tenia el tatuaje Lucio

-Sólo pedi que borraras la foto, no que te lastimaras más- suspiró cansado

-¿Crees que podamos salir mañana?, bueno como esta el clima, me hace dudar si nos dejara salir- recordó la quemadura del cuello de Lucio y se le quevanto alterado, dirigió su vista al cuello y si, estaba rojo eso le preocupó

-Eres un tonto- suspiró, se levantó de su lugar y fue por algo que calmara el dolor, no tardó tanto en regresar, había encontrado unas pastillas y una pomada, al menos servirían para eso

-Sabes- abriendo la pomada para después untarla en las quemaduras -Ese tatuaje te quedaba bien- con un notorio sonrojo en sus mejillas siguió con atender al mayor

...

-¿De verdad te gustaba?- Preguntó sorprendido -Crei que lo odiabas-

Una idea cruzó su mente, Lauren lo mataría

-Lauren, joven de cuerpo perfecto y limpio, sin ninguna perforación ni nada ¿Aceptas hacerte un tatuaje de pareja conmigo?- Rió con ganas la pomada de verdad que había ayudado

Jaló al menor hasta que quedó sentado encima de él, tenía que admitir que amaba esa posición por qué cada vez que lo hacía Lauren se sonrojaba

Besó su nariz y se sonrojó, de verdad que en vez de un novio le había tocado una máquina de sonrojos

Lauren terminó de untar la pomada y la lanzó a un lado, abrazándolo por el cuello

El sólo se Inclinó y escondió su cara ahí

-Amo como mi cara encaja perfectamente en tu cuello- Dejo un beso limpio ahí -Besame y llévame al infierno- Sonrió y notó el sonrojo de nueva cuenta -O solo besame, por favor-

...

Ambos se besaron, demostraban amor y no mas que eso

¿Un tatuaje? Eso se preguntaba, sólo sonrió, claro que si aceptaría, pero algo que no fuera tan tosco

-¿Y que clase de tatuaje sería?- recargando su cabeza en el pecho del mayor, como le encantaba hacer eso

-Un tatuaje cursi no le quedaría al amo y señor del inframundo- río en tono bajo

...

-No sé...- Pensó un poco más -Algo que signifique una marca sin tener que lastimarte

Se encogió de hombros y sonrió, besándolo de nuevo

Se quedaron toda la tarde en la habitación, viendo películas, haciendo cosas humanas, conociendo el cuerpo del otro abiertamente

Lucio se dió cuenta que Lauren tenía un pequeño lunar en la cadera -Algun día voy a encontrar todos tus lunares y contarlos- Rió coqueto

Se quedaron dormidos en los brazos del otro y despertaron hasta el día siguiente, Lucio abrió los ojos y vió al menor dormido encima de él, se Inclinó a dejarle un beso en los labios y se levantó, comenzando a hacer ejercicio en el suelo de la habitación

Lauren despertó hasta veinte minutos después de que había terminado la rutina, sudado dejó un beso en sus labios y se metió a bañar

Cuando se vió frente al espejo se dió cuenta de lo que había hecho, la marca había comenzado a cicatrizar, el juramento ya no se podía romper

Salió al poco rato y vió a Lauren sentado en la cama con el teléfono entre las manos y tres bandejas enfrente, una vacía y dos llenas

-Hola amor- Sonrió, le encantaba llamarlo así -¿Que quieres hacer hoy? ¿Qué lugar de Buenos Aires quieres conocer?-

...

-bueno, de todos los lugares que investigue- hizo una mueca -quiero ir a todos, pero podemos ir al Palermo!-

Se levanto de donde estaba y fue a abrazar a Lucio -hay muchos restaurantes, un parque y varias tiendas- beso al mayor y después lo miro -¿podemos ir?- Lucio solo asintió con una sonrisa -gracias!- grito emocionado dándole un beso,  se alejo de Lucio y fue por sus cosas para bañarse en lo que desayunaba Lucio

No tardo mucho en salir, vio que Lucio ya había acabado y que ya estaba preparado para salir, con solo verlo, comenzó a arreglarse rápido

Terminó y ambos salieron del hotel para dirigirse al Palermo