Capitulo 26.

11.6K 846 32
                                    

Jess.

La inconsciencia que abrumaba mi cuerpo fue perturbada por sentirme observada. No abrí los ojos de inmediato, solo me di la vuelta dejando mi rostro pegado al espaldar del cómodo y antiguo sofá, pero me seguía sintiendo observada. Abrí los ojos molesta, sintiendo mi gesto amargado, el lugar estaba solo un poco menos iluminado de lo que recordaba. Me gire de golpe y me topé con la mirada dulce de lizzie.

-Oh dios! Qué pena con usted. –Murmuro somnolienta. Me siento y acomodo mi cabello y mi vestido. No estaba segura de cómo estaba mi maquillaje o cabello pero le regale una sonrisa- ¿lleva mucho esperando por mí?

-No, llegue hace unos veinte minutos –Ella observa todo el lugar- A pesar de que se sometió a variados cambios, puedo reconocer todo aquello de lo que Brian no fue capaz de deshacerse. Anteriormente fue la oficina de Austin.

-Reconozco que, sin tomar en cuenta la presencia fría y seria de Brian, es un lugar bastante cálido. –Los ventanales eran muy modernos, pero el lugar tenía muchas mesas antiguas que han de ser de roble, así como el mueble donde yo anteriormente estaba acostada, y sus compañeros de juego. También había algunos cuadros y alfombras que se veía muy limpias y bien conservadas pero contaban con aquella aura costosa y clásico/antiguo.

-Siempre me ha causado gracia que las personas piensen en Brian como un ser frio –Tiene una sonrisa hermosa, con líneas de expresiones marcadas y labios suaves.- De los tres es el más cariñoso, un pan de dios.

-Lo sé –Sonrió recordando lo mucho que me cuida. Observo como ella señala mi sitio.

-Yo rompí fuente en ese mueble hace décadas atrás –Se ríe y yo pongo cara de espanto- Es una verdadera tragedia que no haya tenido una cámara en ese momento para capturar la cara de espanto que tenían Austin, Patrick y Sam. Sam... Él era el que estaba más aterrado.

-Me lo puedo imaginar, sería la misma cara que pondría yo. –Me rió un poco junto a ella mientras recuerdo mis episodios de pánico cuando Hanna llamaba para decirme que estaba en labor de parto para posterior a ello, horas más tarde, llamarme diciendo que era falsa alarma. Y en ninguno de los casos yo estuve presente.

-Uff. –Pone cara de ''Estoy agotada pero ni yo misma me lo creo''- No miento si te digo que ellos era sobre protectores conmigo, aceptaban cada uno de mis caprichos y de más. Creo... Que no hay mujer en el mundo... que haya sido más amada que yo.

-Pues fuiste una mujer muy afortunada Lizzie, solo puedo soñar con lo segura que te sentirías, por la forma en la que te he escuchado hablas de ellos me los imagino casi como unos héroes.

-Era más que eso –Murmura poniéndose su dedo índice sobre su labio inferior, inmersa en sus pensamientos- Pasaron muchas cosas malas pero no cambiaría nunca nuestra historia. Era más que eso Jess, y un día muy cercano veras como te sentirás como en una nube con ellos, como si nada en el mundo importara más que ustedes sus hijos, si los tienen.

Ambas duramos tiempo sin hablar, ella pensando no sé en qué, pero me imagino que en esos maravillosos recuerdos con sus tres esposos. Por mi parte yo solo pensaba en las complicaciones de aquel tipo de relaciones. ¿Qué diría la sociedad sobre aquello? ¿Podría soportar yo la presión de tener los ojos de media ciudad sobre mí? Podía hablar de esto sobre Emma, ella podía decirme cómo lidiar con la prensa.

Lo primero que yo haría sería decirle a mis amigas, ellas son mi familia aquí en New york y en la lejanía de nuestro pueblo natal. Sabía que ellas no me iban a juzgar pero si me iban a tachar de loca.

Me podía imaginar a Luis y sus comentarios morbosos tipo ''¿Que se siente que un hombre te coja por el culo y otro por tu vagina, amiga?'' Si!, así como si eso fuera algo casual.

De ninguno o de los tres -WATTYS 2020-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora