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❶❼ "ᴬ ᵈᶦ́ᵃ ᵈᵉ ʰᵒʸ ˢᶦᵍᵘᵉ ᶜᵒⁿ ᵗʳᵃᵘᵐᵃˢ"

[Para que puedan entender el capítulo a continuación es recomendable lean el día 14 de la otra historia. Pero eso depende de ustedes 😚
Ahora no les molesto más y disfruten]
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- Mgh... No~... ¿Quién?...

- Shhhh esto te gustará~ Sasuke

- ¡¿Naruto?! ¡No! ¡Detente!

- Pero si ya estás todo excitado~ no puedo dejarte así

- No... Basta... ¡Alejate!... ¡Nooooo!

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- ¡Nooo! - me levanté agitado - Otra pesadilla...

Ha pasado un mes desde que Naruto cobró su venganza, se lo dejé pasar por que tenía algo de razón en hacerlo, pero de vez en cuando, sueño con que él vuelva a atreverse a hacerlo de nuevo.

Es frustrante, cómo pude dejar que ese idiota me tomase. Qué molesto.

Y no importa cuantas veces lo hagamos, siendo yo quien mande.

Siempre me persigue esa misma duda.

"¿Se volverá a revelar?"

Miro hacia un lado y lo veo ahí, durmiendo plácidamente, babeando y roncando, con aquella típica pose de "me arrolló un camión".

- Ándale, vete a la mierda - le dije mientras le saqué de mi cuarto y le cerré la puerta

- ¡O-oye! ¡Sasuke abre! - gritaba mientras golpeaba la puerta - ¡No entiendo! ¡¿Que hice?!

"¿Qué hiciste?"

Que pregunta tan curiosa, y a la vez estúpida.

- Por lo menos dame mi ropa - dijo susurrando

Es verdad, antes de dormir lo hicimos, pero dejaré que sufra un poco más.

Creo que es suficiente.

Abrí la puerta dejándole entrar, tenía el ceño fruncido y me miraba buscando respuestas.

Decidí ignorarlo y fui hasta mi balcón, me recosté en la reposera que tenía ahí para momentos en los que quisiera relajarme. Y me senté, mirando el cielo oscuro alumbrado por las estrellas.

- Oye ¿tas bien? - dijo apareciendo el dobe

- Sí - hablé sin mirarle

- Hey, estoy aquí - se sentó sobre mí y me tomó de las mejillas obligándome a mirarle - ¿Que te ocurre?

- ¿Te importa?

- No... Pero si Menma te llegará a ver así... No creo que le agrade la idea - miró a otro lado

Solté un pequeña risa, usar a mi niño para ocultar sus intenciones, de verdad que es un idiota.

Pero este idiota se vengó, y de la peor forma, no me gustaría decirle el motivo de mi malestar, es vergonzoso.

- Sabes que puedes decirme lo que sea, ¿verdad?