𝘾𝙖𝙥𝙞𝙩𝙪𝙡𝙤 8

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La castaña, amiga de ______, se miró al espejo recordando la noche anterior, la noche que tuvo junto a su novio, llena de pasión y de ardor. Se tocó el cuello recordando cada caricia y lamida de parte de su adorado y sexy amante.

– Buenos días. – la saludó el chico moreno, alto, de ojos verdes y de cuerpo esbelto.

El hombre se pegó a su espalda, chocando su miembro con el trasero voluminoso de la chica, que se arqueó al momento de sentirlo así, detrás de ella, besando su cuello y la piel desnuda de su espalda.

– Buen día. – le contestó ella con dulzura.

– ¿Por qué te has despertado tan temprano? ¿Te lastimé? – le preguntó el chico preocupado y ansioso.

La chica de muslos hermosos, se dio vuelta para quedar de frente a éste enigmático hombre con el que había quedado enamorada.
– ¿De qué hablas? No, es solo que fue tan hermoso que no me pareció real, tenía que comprobarlo. – le dijo la chica de piel dorada.

El hombre la tomó del mentón y acercó sus labios a los de ella, encerrándolos en un cautivo y largo beso. Los dedos del hombre pasaron de su mentón a su mejilla, haciendo que la joven se estremeciera y ella pasara su mano por el pecho de él causándole una sensación de ardor y placer que crecía con el rozar de la piel de su amado. Ella separó los labios de los de él y tomó aire, volvió a besarlo y lamió sus labios con dulzura y ternura. Mordió el labio inferior del chico y volvió a separarse del rostro de éste.

– Taehyung...

– Jisoo. – susurró él mientras intentaba regresar a su beso.

– Te quiero.

– También te quiero, Jisoo.

(_______)

Después de salir de la oficina de Junwoo, Yoongi nos llevó en mi auto a un restaurante en el centro.
– ¿Te dije lo guapa que te ves con ese vestido? – agregó de repente.

Tomé el dobladillo del vestidito de flores entre mis dedos y jugueteé con él nerviosa. El color subió apresuradamente por mis mejillas, llenándome de un calor sofocante.

– No lo dijiste.

– Bueno, lo digo enserio. – agregó manejando hacia el restaurante. Tal vez eran sus ojos azules, pero había algo que no me permitía dejar de mirarlo.

– Gracias. – le conteste furtiva. – Me pregunto a donde es que vamos.

– Ya lo verás, nena. – me sonrió de costado para después guiñarme un ojo. – ¿Cómo te ha ido hoy en el trabajo? – me preguntó dirigiendo su mirada a la mía sin dejar de prestar atención al camino.
– ¿Por qué te interesa?

– Joder. – dijo con tono molesto. – No te quiero solo como amiga, ______. ¿Qué no lo entiendes? – agregó algo enojado.

– Lo lamento. – dije arrepentida. – Eres atractivo, pero estoy saliendo de una situación difícil y lo que menos necesito es distractores.

– No seré un distractor, lo prometo. – hizo un puchero con el labio inferior y me miró suplicante.

– No lo sé, Yoongi. A penas y te conozco.

– Hay mucho tiempo por delante, no te apresures, preciosa. – me miró de soslayo y con suspicacia chasqueó la lengua indiferente.
Me volví para ver el exterior. Los edificios estaban llenos de estrepitosa gente que venía e iba de lado a lado, convenciéndose a sí mismos de que el día terminaría pronto, cuando faltaban tres horas reglamentarias de labor docente. Lamí mis labios sutilmente y miré mi reflejo por el parabrisas, que se desvanecía poco a poco por culpa de la silueta de los edificios que pasaban repentinamente.

Profesor de Sexo ll JJK +18Where stories live. Discover now