Mi única Excepción.

V

Los días fueron pasando y el comportamiento de Senku cada vez se volvía más extraño. ___ estaba preocupada por él. No sabía que le pasaba ni tampoco como ayudarle.

Por otro lado Senku tenía la cabeza hecha un lio, su forma de actuar no era la que debería y tenía que volver a ser él, lo antes posible.

Había estado investigando, con la intención de encontrar una "cura" que terminara con sus problemas. La mayoría de las opciones habían sido descartadas, dado que eran absurdas y el joven no presentaba todos los síntomas, mientras que las pocas que seguían en la lista requerían tiempo para poder ser descartadas.

- Esto no puede estar pasando, no tiene ningún sentido. Yo no soy así. No puede ser que cada vez que estemos juntos me distraiga y me ausente. Y para colmo que ella se dé cuenta y se preocupe. – se decía a sí mismo -

- Oye Senku, ¿estás bien? - le pregunto la chica sacándole de sus pensamientos -

- Umm... Sí, sí solo estaba repasando si tengo todos los materiales para mi próxima creación

- ¿Estás seguro?

- Claro que lo estoy – medio mintió, porque en realidad también había estado pensando en eso – ____ cuando termines con el arco necesito que te pases por el club de ciencias. Estoy seguro de necesitaré tu ayuda.

- ¿Qué pasa? ¿Has vuelto a hacer un agujero demasiado pequeño para meter tus manos~? - preguntó con voz cantarina -

- No es eso, necesito que vuelvas a unir unos cables. Se han soltado y no me cabe la mano.

- Claro, no hay problema. Te ayudaré en cuanto acabe.

- Te estaré esperando – respondió mientras veía como su amiga se iba a su propio club –

Una vez en el laboratorio empezó con el experimento, pero al no estar concentrado terminó por hacer mal la mezcla y no se percató hasta que esta exploto.

Esa explosión provocó que él también explotara. Estaba tan enfadado que gruñía entre dientes ganándose las miradas de asombro de sus compañeros.

Algo como eso no era propio de él, no desde que era un niño y menos con una mezcla tan simple. Tenía que encontrar la estúpida razón por la que estaba así y tenía que hacerlo ya.

Por otro lado cuando ___ llegó a su destino, el profesor les informó que ese día probarían su puntería con objetos en movimiento.

En un principio le costó bastante dar en el blanco, pero cuando se dio cuenta de que no tenía que apuntar al objeto, si no, al lugar al que este se dirige todo cambió y le fue mucho más fácil acertar.

Cuando la hora terminó se dirigió al club de ciencias, tal y como le había prometido a Senku. Lugar en el que seguramente solo se encontraba el ojiescarlata, como mucho uno o dos de sus compañeros. Algo que pudo comprobar una vez dentro.

___ les saludó y me acercó a su amigo, pero antes de que le dijera que debía hacer exactamente otra persona se adentró en el aula.

- ___ te he estado buscando, necesito que me des un consejo.

- Claro Taiju dispara.

- ¿Sabes que me quiero declarar a Yuzuriha?

- Sí, creo que todos lo saben, todos menos ella.

- ¡No seas mala! En fin ¿te importa practicar conmigo y después darme unos consejos...?

- Umm...no me importa, pero practicar conmigo no te va a servir para nada. No me malinterpretes estoy encantada de poder ayudarte, pero yo no soy Yuzuriha. Por lo que no sentirás lo mismo que cuando se lo pidas a ella.