Cuando el sol se hizo presente, adentrándose en la casa, entrando por las pequeñas rendijas que asomaban por las ventanas, ___ comenzó a abrir lentamente sus ojos preparándose para el comienzo de este nuevo día. Al incorporarse en su sitio fue a despertar a Senku, el cual se encontraba aún dormido a su lado, ___ se quedó observando por un rato el rostro del chico, deleitándose con cada facción que se hacía presente en este. Decidió acercarse a él lentamente para acabar depositando sus labios sobre el cuello del joven y terminar depositando dos besos suaves sobre su cuello.
- No me importaría despertarme todas las mañanas así, aunque la próxima vez podrías acariciarme el pelo mientras lo haces – sonrió dejando salir su picardía–
___ le miró durante unos segundos, devolviéndole la sonrisa, de la misma forma que él dejó salir la suya.
- No tengo problema, pero quiero algo a cambio...
- Soy todo oídos
- No quiero oídos...
Volvió a sonreírle y rápidamente se acercó a él para depositar sus labios sobre los del chico. Senku correspondió al instante, él estaba aguardando ese beso y más después de que ella lo hubiese despertado de esa forma tan especial y si ella no se lo hubiera dado, habría sido él quien lo hubiese ejecutado.
Cuando ambos se separaron en busca de oxígeno, se quedaron observándose durante un rato clavando sus ojos sobre los del contrario y deleitándose con los de cada uno, ella con los hermosos rubíes y él con aquellos ojos dorados, permanecieron unos minutos sin decir nada, los únicos ruidos que se hacían presentes en la cabaña eran sus respectivas respiraciones y los sonidos procedentes del exterior.
- Senku, creo que deberíamos salir y seguir...ya sabes...con nuestras obligaciones...
- mmm, sí... será lo mejor, vamos tenemos mucho que hacer.
Ambos salieron de la casa y empezaron a organizarse.
- Senku, ¿hoy empezaremos con la construcción del laboratorio?
- Sí será lo mejor, aún no hace calor y tenemos que aprovechar, además tenemos que empezar con la recolección de madera y darle forma.
- Pues vamos allá – le respondió con una sonrisa–
Mientras ___ se marchaba para ir a coger un hacha, Senku se quedó observando como ella se alejaba con una sonrisa, la cual se le contagió y decidió que tendrían que hablar para poner en claro ciertos aspectos de su vida.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Cuando volvieron con suficientes troncos para convertirlos en madera decidieron hacer una pausa, hacía demasiado calor como para continuar, así que volverían al trabajo cuando bajase la temperatura.
- estoy muerta - suspiró y se giró en busca de su compañero. - Rectifico, aquí el muerto eres tú – hablaba mientras se reía–
- Ca...calla...– intentaba coger aire mientras hablaba – e..esto...ha sido...agotador.
