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Un pequeño niño encerrado en su habitación esperando que nadie pudiese forzar la puerta para entrar.

Era tan pequeño, tan vulnerable, tan tierno... Estaba llorando, era un niño ¿Porque lloraba?

Su pequeña carita redonda estaba estaba lastimada, habían moretones por todas partes y arañazos en su espalda,¿Quien le podía hacer tal barbaridad?

Un hombre grande de aspecto rudo, músculos super formados y expresión seria se encontraba pateando la puerta de aquel pequeño cuarto.

-¡¡Abre la puerta hijo de puta!!- gritaba mientras la puerta seguía con llave.

El niño lloraba del miedo, ¿Como podía ser que su propio padre le tratase de esa manera?-

Del miedo el chico intento esconderse debajo de la cama, sin embargo el hombre furibundo logro desprender las bisagras de la puerta y el niño lanzó un grito del susto que dejó claro su paradero.

Le tiró de la camisa y le dio una fuerte bofetada. El pequeño no tenía culpa de nada.

Había tenído que vivir en esa maldita casa hasta que su madre por fin decidió divorciarse del idiota de su padre.

Aunque todo fue para peor... Yeonjun jamás recibio el amor de su madre luego de ello.

Su madre había caído en una depresión inmensa y parecía que el chico sólo era una carga para ella.

Ya no habían abusos pero tampoco era bueno el que aquel chico fuese ignorado por completo.

Apenas vivían de la pensión que aún daba su padre por ley pero había orden de restricción a la casa para aquel hombre.

Fue un trauma tan grande el que Yeon aún lloraba algunas noches. Le aterraba siquiera que alguien entrara.

Le enojaba ser así, se prometió a su mismo que jamás llegaría a ser así como su padre... Borracho abusador y sobretodo idiota.

Pero había fallado... Había encontrado algo con lo cual borrar su trauma por siquiera un momento.

Y eso era lo que más le dolía, pensar que se había convertido en lo que era su padre... Temía lastimar a alguien, pero a esa etapa del vicio era difícil cambiar.

Aquel día fue la primera vez en la que Yeonjun se sintió un verdadero Hijo de puta.

Hye-mi, la chica con la que despertó no lo había dejado realmente, Yeon despertó a su lado y noto agresiones físicas en todo su cuerpo... Era su culpa.

"¿Como pude hacer esto?" Pensaba.

¿Estaba ebrio y no se dio cuenta?

Realmente el huyo de casa de la chica sin siquiera despertarla. Ya no quería hacerle daño a nadie. No quería nisiquiera tener una cita con otra chica, pero le urgía ser amado.

Intento hablar con su mejor amigo, el único que entendería la situación y apoyaría, pero parecía que el también lo había cambiado por un tal Seonghwa que si bien lo conocía no era ni de lejos un amigo.

El chico regreso a su clase de la universidad y con la depresión invadiendo su ser escuchaba aquella conversación de pupitre de atrás.

-¿Cómo supiste que ese chico no era el indicado?- preguntaba Beom intrigado y con una curiosidad que Yeon no conocía.

-Salía con demasiadas chicas y siempre dejaba solo a sus amigos-

Yeonjun volteó hacia ellos y le sonrió discretamente a Beomgyu. Creía que el era lo único que le quedaba.

Estaba decidido que lo más importante era Beom y que ahora sería su primer plano como cuando se conocieron, cumplir las promesas que le había hecho y regresar al Beommie que él quería.

Estaba decidido que lo más importante era Beom y que ahora sería su primer plano como cuando se conocieron, cumplir las promesas que le había hecho y regresar al Beommie que él quería

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-Profesor Choi, muy buenas tardes... ¿Usted ha sabido de la salud de Beomgyu Hyung?-Pregunto Hueningkai entrando a la sala de profesores.

-La verdad últimamente no, seguramente ha de estar bien, puesto que no hemos hablado demasiado-Respondio como si realmente fuera una relación entre alumno y profesor.

-Estoy preocupado por el ¿sabe?, Realmente es muy vulnerable y quisiera protegerlo de Hyung... Me duele verlo sufrir así- exclamó acercándose y sentándose en la silla de la par.

-Hablare con el en la tarde, preguntaré su salud ¿Si? Te avisaré mañana- soobin volteó a ver a todos lados para ver si nadie poní atención a su conversación. Afortunadamente no había casi nadie en esa sala de maestros. El mayor se acercó y le tocó suavemente la mejilla y plantó un beso en sus labios.

-Deja de preocuparte terroncito, seguramente está bien- susurro entre sus labios.

El menor se levantó de la silla y solo expreso.

-Nos vemos más tarde en la clase profesor- Un guiño se hizo presente y luego el pequeño se marchó dejando a soobin con una sonrisa de oreja a oreja.

Hueningkai iba caminando junto a taehyun y Seunghee hablando de los chicos de la universidad.

-¿Crees que Beomgyu si puede con la responsabilidad que tiene?- Dijo Seung-Hee, aún le ocultaban a Taehyun sobre el amorío de Beomgyu, el había estado enamorado de el y aún lo estaba, aveces parecía muy obvio pero de cualquier manera Beom no lo notaba por estar pensando en el idiota de Yeon.

-en este momento no estoy seguro... Han pasado ya dos semanas desde que nos llamó para que le ayudaramos en sus tareas y creo que por ahora se encuentra bien-

Bajo la mirada aún preocupado... Temía que Beommie estuviese pasando un mal rato.

-Ojala- Beomgyu pueda salir de esto... Imagino las tareas de la universidad han de ser el doble de difíciles que las de la escuela- Hablo Taehyun, así como todos estaba preocupado por Beom pero él vivía engañado con que eran tareas lo que lo tenían mal.

Pobre Taehyun... Le mentían por el bien de su salud mental.

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Feliz día, tarde, noche o madrugada.

C R U S H (Yeongyu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora