ᴅᴀɴɢᴇʀ

11.1K 310 41
                                    

-Otro chico se sobrepasa contigo-

JIMIN

Aquel era el peor trabajo de medio tiempo que habías podido conseguir. Miraste con desagrado el uniforme del lugar, ser una marinera "sexy" jamás se habría cruzado por tu cabeza, nisiquiera lo habías tenido presente cuando firmaste el contrató porque la paga cubría a la perfección ese daño imprevisto en tu pequeño departamento. Aún así, no tenías tiempo de reconsiderarlo o dar un paso atrás, debías salir de ese vestidor si querías el estupido pero necesario dinero.

Tu trabajo es de camarera en un bar-restaurant que contaba con una variedad de platos afrodisíacos del mar, en cierto sentido el uniforme tenía justificación debido a la temática, pero no dejaba de ser una barbaridad repulsiva desde tu perspectiva. Cada cinco minutos estabas acomodando el sombrero y la incomoda falda que se subía demás en algunas ocasiones.

-Buenas noches, bienvenidos-Saludaste cortésmente cuando sonó la campanilla de tu zona. Tuviste la mala suerte de ser ubicada en la VIP donde grandes personalidades y artistas de todos los tipos se acomodaban, y apesar de que querías verlo como algo bueno era imposible cuando esas personas tenían el ego hasta por las nubes. Sin embargo, apesar de las hostilidades que ya habías tenido que soportar, tu mundo se vino de bruces en el momento que viste a las personas que acababan de entrar.

Hiciste tu mirada a un lado en el instante que tus ojos se encontraron con los del responsable de horas y horas de insomnio. Aquellos orbes estaban grabados en tu cabeza y se cruzaban por tu mente en cualquier oportunidad sacandote de quicio, así que no era de extrañar que dudaras si era alguna proyección creada por tu imaginación o era el mismísimo Park Jimin.

-¿Piensas quedarte ahí parada sin darnos una mesa?-suelta una voz femenina, tu atención se centra en la preciosa chica a su lado que te mira con desdén. Su belleza era evidente, hasta el punto en que tu corazón se sintió herido al verla junto a él.

Asintiendo levemente, tu voz sale en un hilo cuando les cuestionas por la cantidad de puestos que requieren-¿Una mesa con cuantos asientos?

Intentas por todos los medios no mirar a la dirección del chico y prestar exclusiva atención a la modelo de reconocidas marcas y pasarelas, incluso recordar la posición de esa mujer te formaba un nudo en la garganta. Jimin era amable y pensaba que tenía una deuda contigo, obviamente jamás estaría interesado en ti teniendo a chicas así a sus alrededores.

-Tres puestos, aún falta una persona por llegar-responde Jimin aunque tu pregunta hubiese ido dirigida a la chica.

Dándole una mirada de reojo, puedes notar la incertidumbre en cada una de sus facciones, quizá pensando que él destino tiene algo con ponerlos en los mismos lugares y en momentos donde la diferencia entre ambos mundos queda más que evidente. Aunque, realmente estaba tan molesto por verte en ese pequeño disfraz de marinera, definitivamente tenía unas inmensas ganas de quitarse su abrigo y cubrirte.

-Por aquí-señalas con tus manos para después escoltarlos hasta la respectiva mesa, esperando a que estos se ubiquen y tomen asiento. Aprovechas para alcanzar algunos de los menús-¿Desean pedir de una vez?

La guapa mujer da una mirada a Jimin y una hacia a ti, su sonrisa se torna maliciosa mientras tira su pelo para atrás y parece advertir algo con sus ojos.

-No soy muy fan de la comida de mar, pero parece que la razón por la que fui arrastrada hasta aquí no es exactamente comestible. Bueno, por lo menos no en el sentido que me esperaba-Comenta la mujer mientras te repara de arriba para abajo-¿No tienes frío? ese atuendo no es de tu talla, excesivamente pequeño para la salud mental de algunas personas.

Mαƙɳαҽ Lιɳҽ Where stories live. Discover now