𝐸𝑠 𝐵𝑢𝑒𝑛𝑜 𝑇𝑒𝑛𝑒𝑟 𝐴𝑙 𝐷𝑖𝑎𝑏𝑙𝑜 𝐸𝑛 𝐶𝑎𝑠𝑎.

🌃9🌃

Tae Hyung iba en camino al apartamento de Jimin, en el bus pensaba lo que hizo... Mierda.

Quizás era mejor olvidarlo eso era... Estaba mal, debía olvidarlo después de todo ya no lo volvería a ver seguro era garantizado ni su abuela hablo con uno eso decía que no eran fáciles de ver ni hablar y JungKook no era la excepción.
Quizás con el tiempo lo olvidaría por completo... Tendría que buscar nuevas distracciones para lograrlo, no sería fácil como creía estubo con él desde su niñez.

Tuvo que parar de pensar en él las lágrimas se le saldrían en pleno viaje y la gente lo miraría raro, a pesar de que comenzó a llover.

Llego al apartamento de Jimin.

—Hola Chim Chim—Tae saludaba, trataba de mostrarse animado.

—Tonto, ¿Por qué no viniste antes?... Bueno ya no importa—Jimin lo regaño en el marco de su puerta invitandolo a pasar—Mamá vendrá hasta tarde y estoy aburrido.

—Yo también estaba aburrido pero también tengo que ir a trabajar.

—Taehyungie, ¿Y si voy a pedir trabajo?, A sí mamá no tendrá ya que trabajar tanto y estaremos juntos más tiempo...

—Pero sí vamos en el mismo salón y no hablamos con nadie más... Aparte sería diferente ella trabaja tú trabajas ya nadie tendría tiempo.

—Bueno, para conocer chicas y no estar aquí encerrado.

—Esta bien, pero ahora solo quiero jugar y distraerme—Parecía desesperado por llevar a cabo lo que pensaba.

—Tae...

—¿Mmm?.

—Te ves diferente, desde primero te veías cansado triste, no lo se menos alegre, o sería tú aura... A pesar de que se fue tu papá.

Tae Hyung de pronto no quiso pensarlo pero fue inevitable, él causante de ello ya no estaba pero ahora todo sería mejor, ¿Verdad?, Lo de su padre parecía no darle tanta importancia ya que volvería en un año, volvería a verlo en un año.

—Es que la escuela me estresa un poco desde pequeño he sido de lento aprendizaje.

—Mentiroso.

—Bueno ¿Me has llamado para decirme eso?, Mejor me voy a seguir viendo Netflix.

—No, no bueno vamos a jugar un rato y cuando sea la hora de irte a trabajar iré contigo.

Carajo.

Jugaron un rato videojuegos, comieron hasta que llegó la hora de irse.

Jimin se alistó con su abrigo y Tae Hyung con el suyo saliendo del apartamento. Conforme avanza del camino al trabajo se preguntaba sobre él nuevo jefe, ¿Cómo sería su actitud?, Parecía maduro, iba idealisando si sería como Lee Sora, de amable comprensiva o suplicaba que no fuera tan mandon o gruñón.

—Es aquí Chim—Tae abrío la puerta haciendo que entrara Jimin primero.

—¿Y a quién me debo dirigir?—Seguía Jimin a Tae Hyung como perrito detrás de su dueño, a los casilleros de los trabajadores para ponerse el mandil.