Pasión en peligro.

Penúltimo capítulo. (2/2)

Antes de entrar a la habitación, una chica de cabello castaño los sorprendió repentinamente.

-¿Pasa algo?- preguntó la jóven mirándolos con incertidumbre.

-Ella es la...- comenzó a decir el doctor antes de ser interrumpido por Liv.

-Soy Olivia Benson, amiga de Sam.- se presentó y extendió su mano.

-¿Olivia Benson?- dijo no muy convencida.- Nunca me ha mencionado a una Olivia Benson antes.

-¿Podríamos hablar?- preguntó cuando se encontraron a solas. La mujer dudó un instante y luego accedió asintiendo con la cabeza.

-Iba a la cafetería. ¿Viene?- Liv echó a andar junto a ella. Caminaron en silencio, hasta que Liv decidió que debía romper la incomodidad.

-¿Eres su novia?- preguntó Olivia.

-Lo soy.- dijo la mujer de forma puntual.- ¿Por que nunca me habló de usted?

-No somos grandes amigos, nuestros padres lo eran.

-¿Sus padres?- Liv logró captar su atención. Tomaron asiento una frente a la otra y pidieron algo para tomar antes de continuar con la charla. -¿Su padre estaba en el mismo negocio?- Liv asintió y cruzó las manos sobre la mesa.

-Aunque el falleció hace mucho tiempo.

-Al igual que el padre de Sam.- habló en voz baja como si tratara de hacer que la piezas encajaran.- Usted ni siquiera parece la hija de un traficante de blancas, parece policía más bien.- las alarmas de Liv se encendieron y se preguntó si había visto su placa policíaca. Miró sus caderas y con disimuló movió su blazer para ocultarla.

-No soy policía, pero ciertamente tampoco estoy en el negocio.

-¿Nunca lo estuvo?- la joven se mostraba curiosa.

-No, aunque eran los deseos de mí padre.

-¿Entonces que hace aquí?- interrogó nuevamente a Liv.

-Muy bien, seré sincera. A pesar de que nunca quise entrar al negocio, Sam lo hizo y sé que no es un mundo fácil, yo solo quise saber cómo se encontraba. Tenía algunos años sin verlo y en cuanto me enteré no dudé en venir.- la mujer parecía entender las palabras de Olivia. En su rostro se vió un aire de confianza, tal vez de esperanza. Parecía estar absorta pensado en cualquier cosa ajena a Olivia.

-Él tampoco.- expresó viéndola fijamente a los ojos. Liv se acomodó en el asiento y tomó aire para no sentir el mareo que se aproximaba en ella.

-¿A qué te refieres?

-Él. Sam, tampoco lo quería.

-¿Cómo lo sabes?- quiso saber Olivia.

-Soy su novia. Yo lo sé.

-¿Entonces por qué lo hizo?- Lic estaba perdiendo la paciencia.

-Porque se sentía presionado, porque su padre y su hermano pensaron que era lo correcto y él...- titubeó.- Él se dejó llevar y aunque no quería hacerlo, poco a poco lo fueron llevando al negocio.

-¿Cómo puedes estar tan segura?

-Porque conocí a su hermano, de él realmente puedo dar fe del tipo de persona que era, pero Sam no, él no es así.- aseguró rotundamente la mujer levantándose del asiento.

-Lo siento, lo siento.- se disculpó Liv apenada ante el estado de la mujer.- ¿Podemos seguir hablando?- la mujer miró a Liv con indiferencia y se encaminó al ascensor.